Capítulo 1: ¿Te quieres casar conmigo?

Alguien me dijo alguna vez que los diarios son los confidentes de aquellos que los escriben, pero para ser sincera yo estoy escribiendo este para que él o alguien más lo lea... Se suponía que este diario hablaría sólo de él y de mi pero después de aquel día las cosas cambiaron, ya no seríamos sólo nosotros dos. Es curioso pensar que cuándo conocemos a alguien que habla un idioma diferente al nuestro, lo primero que queremos aprender a decir son palabras graciosas o insultos, sin embargo, yo fui una excepción, yo le pedí que me enseñara a decir: "te amo, y ¿te quieres casar conmigo?" Y el rio tanto que pensé que se ahogaría y después me llamó "rara", pero eso no me molesto.

Así es como lo conocí gracias a él, Esa noche hacía frío, era mi primer viaje al extranjero, estaba sola en aquella enorme cuidad llamada Seúl, con el corazón en la mano y ebria, muy ebria... En mi cabeza sólo había una duda, ¿cómo había terminado así? Y entonces lo recordé, - ¡oh! Es por Hyun Jin... Mi primer amor. Teníamos cinco años cuando lo vi por primera vez de la mano de su padre, un militar viudo de origen surcoreano que había estado casado con una mujer mexicana algunos años atrás, se mudó al vecindario. Su pequeño hijo de nombre Hyun Jin era serio, al principio le era casi imposible hablar con alguien, ya que no entendía ni una pizca de español.

Fue en 3er año de escuela cuando le tocó en el mismo salón que a mí, naturalmente no hablaba mucho, pero aun así llamaba la atención de las niñas, no puedo decir que yo era la excepción, cuando cruzamos palabra fue durante el receso, ya que si bien era popular a la mayoría le costaba hablar con él, su español era difícil de entender así que decidí hacer el intento.

Después de ese mañana perdí la cuenta del tiempo que pasamos juntos, cuando menos lo espere éramos muy buenos amigos, su música, su idioma, su comida etc. creo que me enamore de todo ello, tanto que pasábamos tiempo uno de casa de otro, su padre era alguien muy simpático para haber sido un militar y su comida era deliciosa, alguna vez menciono que ese era su pasatiempo si mal no recuerdo, por otra parte, mi madre nunca tuvo ningún problema con nuestra amistad. Creo que fue en segundo año de secundaria cuando la popularidad de Hyun Jin aumento bastante, y eso comenzó a hacerme sentir insegura por eso decidí aprender más cosas sobre su familia.

Era la única chica a la que su padre aceptaba, tal vez era porque me adapte a ellos los más que me fue posible, su padre era estricto con la idea de no perder sus raíces, pero no era alguien de mente cerrada, su padre después de tanta insistencia por mi parte decidió ayudarme con una petición inusual, quería conocer cosas sobre Corea.

Fueron alrededor de 6 meses lo que me tomó aprender algunas palabras de coreano, su padre parecía complacido y mi madre sorprendida por mi entusiasmo hacia otras culturas además de la mía, en mis duros intentos de aprender coreano era bastante torpe, lo que provocaba que Hyun Jin se riera muy seguido de lo que le decía tratando de decirle otra cosa en su lugar, pero el apreciaba mi esfuerzo y eso era suficiente para mí.

Fue en preparatoria cuando por fin comenzamos a salir, y vaya que me fue muy difícil, porque hasta ese entonces había tenido que sufrir considerablemente tratando de espantar a la competencia, pero mi duro esfuerzo había valido la pena, ¡éramos novios por fin!

Habernos conocido y habremos enamorado era todo un cuento de hadas, algo que pocas personas pueden presumir, Éramos bastante compatibles, compartíamos grupos en común, era un romance color de rosa, hasta que una mañana escuche las palabras más aterradoras hasta ese entonces, asuntos familiares requerían que él y su padre regresarán a Corea, por tiempo indefinido. No me sería posible verlo más tiempo, ¿podría nuestro romance sobrevivir a eso? fue la primera vez que estuve aterrada...