Capítulo 30

Día de la boda 4 meses después

Al fin llegó el dia más feliz de mi vida, parezco una princesa. El vestido es super pegado al cuerpo de encaje, cuando me vea Alex se le va a caer la baba.  Me han peinado, maquillado y ayer me fui a un spa de despedida de soltera. Mi imagen con el gorrito ese de plástico era de lo más graciosa, menos mal que no hay fotos de ese momento.

Mi padre no para de llorar desde que me ha visto así vestida.

-Cariño que rápido has crecido, estoy orgulloso de ti. Va a ser un placer llevarte al altar.-Dice mi padre entre lágrimas.

-Papá no me hagas llorar que estoy maquillada y voy a parecer la novia cadáver.

Mi querida mejor amiga y compañera de piso, Ana, va a hacer de madrina mientras que de padrino va a ser el hermano de Alex. Por cierto, Hugo, el hermano de Alex, y Ana tienen un lio que cada vez que se ven saltan chispas. 

Ana lleva un traje rojo que es impresionante y va guapísima la jodía.

Al fin llega la hora de la ceremonia, me agarro del brazo de mi padre y nos disponemos a bajar las escaleras que con el taconazo es bastante complicado. 

-Papá, por dios, agarrame fuerte que a ver si voy a hacer el pasillo de la iglesia pegada al suelo.-Digo muy muy nerviosa, mientras mi padre se ríe y me agarra mas fuerte.

Entramos a la iglesia y empieza a sonar la música, mientras voy andando miro a todos los invitados con una sonrisa agradeciéndoles que estén aquí. Decidida miro hacia delante y me encuentro a Alex con un esmoquin que esta para comérselo.

Llego al altar y nos sonreímos aunque nerviosos. Pasa la ceremonia y en el momento de "¿Alguien que impida este matrimonio? que hable ahora o calle para siempre" en ese momento se abren las puertas de la iglesia y aparece Lucas gritando:

-María no te cases, vuelve conmigo.

Toda la gente empieza a cuchichear y yo siento que me mareo pero Lucas sigue hablando o más bien gritando.

-Tienes que decidir, o él o yo. 

Me quedo en shock y decido rápido. Voy a dónde está Lucas sonriendo y le suelto una hostia que me duele hasta a mi. En ese momento, sonrío y me vuelvo con Alex. 

-Alex, puedes besar a la novia.-Nos besamos entre aplausos y risas.

Espero no arrepentirme de esta decisión, pero siempre hay que hacer lo que te dicte el corazón.

FIN