Es solo jugar a la escondidas es lindo pero no el día que me puse a mirar a mi hija.
Solo podía mirarla feliz corriendo y buscando a su amiguito llamado Rony aunque jamás le dijo mucha importancia, un día simplemente viendo la correr alrededor de un árbol asique me acerque para preguntarle qué estaba haciendo y su contestación fue "jugando con Rony", como de costumbre intente explicarle que Rony solo era un amigo imaginario pero en eso ella me dijo que estaba detrás mío y fue cuando comencé a sentir un frío en mi espalda.
No pude aguantar y salí corriendo hacia el interior de la casa, colocándome en una ventana volví a mirar hacia afuera pero lo que vi a la distancia fue algo tan espantoso que no puedo explicar pero si logre sacarle una foto.