En las sombras de Montevideo, la ciudad que alberga encantos y misterios, se encuentra una leyenda urbana que aterra a sus habitantes: la aparición del Hombre del Ropero.
Cuenta la historia que hace muchos años, en un antiguo edificio del Barrio Sur, vivía un hombre solitario y excéntrico. Se decía que este hombre, llamado Emilio, tenía una extraña obsesión por los armarios antiguos y coleccionaba ropas de época para su macabra colección.
La leyenda cuenta que Emilio fue encontrado muerto en su apartamento, rodeado de sus amados armarios. Desde entonces, se cree que su espíritu permanece atrapado en el edificio, buscando venganza contra aquellos que osen desafiar su legado.
Una noche, Martina, una joven intrépida y curiosa, decidió investigar la leyenda del Hombre del Ropero. Atraída por la historia y en busca de emociones fuertes, se aventuró en el edificio abandonado.
A medida que avanzaba por los pasillos oscuros y polvorientos, Martina comenzó a escuchar susurros inquietantes provenientes de las habitaciones. Sus pasos resonaban en el silencio, creando una atmósfera de tensión que la envolvía.
Fue entonces cuando Martina llegó a una puerta entreabierta que conducía a una habitación llena de armarios antiguos. La joven, impulsada por la curiosidad, decidió entrar para descubrir si la leyenda era cierta.
Dentro de la habitación, el aire se volvió pesado y opresivo. Los armarios crujían y sus puertas se abrían y cerraban violentamente, como si tuvieran vida propia. El pánico se apoderó de Martina, pero antes de que pudiera escapar, una figura sombría y desfigurada emergió de uno de los armarios.
Era el espíritu de Emilio, el Hombre del Ropero. Con ojos vacíos y una sonrisa retorcida en su rostro, se acercó lentamente a Martina, envuelto en una aura de oscuridad. La joven, paralizada por el terror, no podía moverse.
Justo cuando el espíritu estaba a punto de tocarla, Martina logró reunir la fuerza suficiente para huir de la habitación. Corrió sin mirar atrás, sintiendo la presencia maligna persiguiéndola por los pasillos del edificio.
Finalmente, Martina logró escapar del edificio y corrió hasta encontrar refugio en un café cercano. Con el corazón latiendo desbocado, se dio cuenta de que había desafiado a una de las leyendas urbanas más temidas de Montevideo.
Desde aquel día, la historia del Hombre del Ropero se volvió aún más aterradora. Los valientes que osaron entrar en el edificio abandonado aseguran haber escuchado susurros escalofriantes y visto sombras moverse entre los armarios.
El legado del Hombre del Ropero perdura en Montevideo, recordándonos que hay secretos oscuros que acechan en
#496 en Terror
#639 en Paranormal
terror, paranormal misterio fantasmas espiritus, relatos breves
Editado: 28.12.2023