"Trato con el tirano"
Mi nombre es Arcelis Garden, pero todos me llaman Arat es todo lo que se, según el señor Brennan sufro de perdida de memoria por un golpe, no se muy bien a lo que se quiera referir con eso. No lo entiendo, no entiendo muchas cosas de las que pasan, del porque al esconderse el sol las rocas siempre brillan, el porque no puedo dormir por las noches y solo me quedo en el valcon mirando el noreste donde se puede ver muy lejos una gran luz similar a la luz de aquellas enormes rocas que rodean toda la ciudad.
Padecer de perdida de la memoria es algo muy pero muy… ¿incomprensible?, Es difícil poner en palabras lo que siento al no saber nada de lo que me rodea, temerle hasta la criatura mas pequeña y temer de cambios que te hacen salir de la rutina, se vuelve muy fastidioso en ciertas ocasiones.
Mis días desde que recuerdo fueron visitas al hombre de blanco (Medico), Tomar pastillas cada una con colores diferentes y intentos fallidos del señor Brennan en intentarme hacerme recordar mi pasado.
–Arat, por favor intenta decirlo –Dijo el señor Brennan, con su cara habitual, una cara a la que no se le sabe si es seria o una sonrisa.
–Ok… Tres tristes tigres estaban tragan… -Intente pronuncia aquel trabalenguas pero extrañamente cada vez que lo ago solo me rio, ¿Por qué estarían triste los tigres? ¿Se les puede notar a aquellas criaturas tristes alguna vez?.
–Jajaja continua sigue repitiéndolo hasta que lo logres –Dijo moviendo las manos en señal de que lo vuelva a repetir– Un trabalenguas puede ser bueno para activar recuerdos ya olvidados abecés me funciona cuando tengo que buscar mis llaves.
El señor Brennan era un hombre muy carismático y encantador, es como una figura paterna para mí. Fue la primera persona que conocí cuando todo empezó, dice que me encontró entre los escombros de una tienda de ropa, hoy se cumple un año desde que eso paso y aunque no recuerde la fecha de mi nacimiento o mi edad tomo ese día como el día en el que volví a nacer.
–Bien basta de trabalenguas por hoy, duérmete tengo que ir a terminar el inventario de hoy –Dijo levantándose de aquella silla que estaba situada enfrente de mi cama que había colocado para tener “Nuestra charla matutina”, coloco la silla en su respectivo lugar y camino a la puerta «Fuera luces» Dijo apagando la luz y cerrando la puerta.
Señor Brennan disculpe si abecés le guardo secretos o le digo mentiras pero, Temo no poder servir para algo con mi condición. No solo sufro de amnesia, si no de un fuerte caso de insomnio.
Todas las noches cada vez que el termina de darme las buenas noches escapo por mi ventana y veo desde el tejado de la casa aquella luz, ¿Qué significara?, ¿Qué hay haya?, dudo que sea el sol cuando se esconde el sol se esconde de un lado diferente a donde se sitúa aquella gran luz y cada vez que sale esa luz sigue ahí.
Tantas preguntas y tan pocas respuestas en este nuevo mundo. Aunque la única pregunta a la que quisiera una respuesta es “¿Quién eres Arcelis Garden?”, Porque no encajas en este pueblo, todas las demás personas lucen contentas con lo que lo rodea, pero… ¿Por qué tu no?.
Volví a entrar a mi cuarto solo para ponerme ropa mas abrigada, lastima que lo mas abrigado para mi es una bufanda de estambre a la que me da algo de alergia y un suéter que hice yo misma, podría decirse que es un suéter para mutantes ya que tiene una tercera manga colocada detrás del cuello, pero la uso en ocasiones como bufanda; colocándome botas de cuero y unos guantes de lana Salí por la ventana de mi cuarto y baje sosteniéndome de las cañerías, estire mi brazo hasta sostenerme una rama de un árbol que se había colapsado hace tiempo contra nuestra casa, tome aquella rama, me sujete y baje hasta el piso.
Antes de seguir mi camino me aseguro de ver si el señor Brennan esta bien. Al asomarme por la ventana veo que esta rendido en su cama con una foto sujetada en su mano derecha, una foto que le pertenecía antes a su difunta esposa.
Pobre señor Brennan, el ah sido como una padre para mi, pero yo nunca podre llenar ese gran vacío que dejo su esposa eh hijo cuando partieron después de aquel gran catástrofe de la que se le tiene prohibido hablar al respecto.
Al salir de la casa me dirige hacia donde yo trabajo, mi trabajo era simplemente hablar y hacer confesar a personas que cometieron crímenes y hacerlas recapacitar,no entiendo porque el señor Brannen me puso en este puesto pero ultimamente siento que lo ago muy bien.
las personas con las que eh tratado son personas que encontramos fuera y dentro de la ciudad que se han vuelto inestables desde aquella catástrofe, personas que perdieron la cabeza por aquellos eventos ocasionados, pero había alguien en especial a quien no aguantaba las ganas de hablar.
Al llegar a la comisaria tuve que entrar en hurtadillas ya que si el guardia que estaba en su turno me veía me acusaría con el señor Brennan. Así que me escabullí por la ventana de la oficina del sheriff y proseguí mi camino a las celdas a donde están aquellas personas, en la primera celda se encuentra Joe bob, es un hombre de pocas palabras, desde que lo encontramos fuera de la ciudad tratando de robarnos el ganado lo único que ah dicho es “Joe bob”. En la segunda celda esta Gregorio Gonzalez, Perdió la cabeza y intento matar a su hijo culpando de que el estaba poseído por un demonio.