Capitulo 3. ¡Que comience el entrenamiento Osos Náufragos!

Take se dirigía junto con Nirvan a la puerta, ambos veían como todas las puertas iban siendo llenadas por varios aspirantes, demasiados diferentes los unos a los otros.

Ambos llegaron a su puerta y para sorpresa de nadie, el número de aspirantes en su gremio era inmenso, rebasaba a más de 500 personas.

La mayoría eran personas de su edad, otros un poco más grandes e incluso había algunos que parecían ser uno o dos años menores que ellos.

Cuando se empezaba a notar un gran parloteo entre los novatos, un sujeto con capa y boina se puso enfrente de todos ellos, llevaba un bastón, su arma al parecer, sus pantalones eran normales, como el de un señor de clase alta, pero su camisa era una muy peculiar, tenía pequeñas armaduras que lo apoyaban, quizás su única defensa, se notaba a simple vista un cuerpo fuerte y barba creciendo aún, como la de un joven universitario de 23 años, pese a que el hombre tenía alrededor de 30.

-Mi nombre es Flin, tercero al mando de los Osos Náufragos.

Palabras salían de los aspirantes, un hombre muy conocido para los novatos, él era similar a una leyenda. Flin "El colmillo" Raider. En sus 15 años como aventurero ha vivido de todo, combates, perdidas y sobre todo aventuras.

-Sé que la mayoría sabe quién soy, pero no quiero que me adulen mocosos, quiero que me demuestren con hechos el por qué decidieron ser parte de nuestro entrenamiento. Para eso nos dirigiremos al muelle, ahí partiremos rumbo a nuestro lugar de práctica, espero que todos ustedes puedan seguir con nosotros al finalizar el mes. ¡Vamos!

Levantó su mano en señal de seguirlo, pasaron 20 minutos hasta llegar al muelle, ya eran las 12 del mediodía y el sol emanaba calor a su máxima potencia.

Take y Nirvan se sorprendieron al igual que la mayoría de aspirantes, el barco no se parecía para nada a uno comercial o de turismo, era inmenso, similar a una carabela, tenía tres velas y en cada una el emblema del gremio, el rostro de un osos partido a la mitad, y del otro lado una isla de nieve junto con un barco similar a la carabela.

-Bienvenidos a su pase para ir a su entrenamiento. Por favor todos suban, pero antes enséñenos su cristal.

Algo raro para solo abordar un barco, sin embargo nadie contradijo su demanda.

Todos dieron su cristal como prueba, este los revisaba y después dejaba pasar a los aspirantes, Take y Nirvan tardaron tiempo en subir... Sentían como si los vigilaban. Para ambos chicos, no les estaban revisando el cristal solo por seguridad, si no que los estaban evaluando antes de su entrenamiento.

Ya en el barco, las velas fueron recogidas y se comenzó con el trayecto hacia el lugar de entrenamiento.

-Qué raro fue que nos estuvieran evaluando.

-¿Tú igual lo sentiste Nir?

-Claro, era algo obvio, pero me preguntó el por qué habrán hecho eso.

-No comiences a crear tanta confianza con ellos amigo.

Decía un chico de cabello negro con un chaleco única prenda por arriba de la cintura, este llevaba consigo una bolsa de apariencia enorme, tenía vendas que cubrían la parte inferior de su abdomen y también llevaba un par de estas en ambas manos, similar a un luchador de box, tenía una apariencia de ser alguien rudo, mirada seria y sobre todo alguien con quién no quisieras meterte, sin embargo a nuestro protagonista no le importo.

-¿Tú crees eso?

-Te seré sincero no confió en muchas personas. Que tonto, olvide
presentarme, me llamo Rion.

-Take Rindera, un gusto Rion.

-Nirvan Rivel, ¿Eres un aspirante del tipo corpus?

-Lo dices por las vendas ¿Verdad? Ja, ja, si soy de ese tipo.

-¡Genial! Mi hermana también era tipo corpus, tengo entendido que son los que tienen mayores dificultades al momento de entrenar.

-Es cierto, los tipos corpus al usar su Gendar en todo su cuerpo deben de hacer que se vuelvan compatibles.

-La verdad si es tedioso, sin embargo he de admitir que mi cuerpo se acostumbró fácilmente a mi Gendar ja, ja, observen.

Mencionaba el chico mientras mostraba como un aura café salía de su mano, esta había adquirido una forma más rígida.

Take y Nirvan se sorprendieron, sobre todo el primero, el cual si o si quería probar su espada en él.

-Oye, oye, Rion, ¿Me dejarias golpearte con mi espada?

-¡¿Qué demonios te pasa?! Es obvio que dirá que no...

-No tengo problemas.

Respondía Rion con una cara seria, mientras que Take tenía una inmensa felicidad en probar su arma y Nirvan se encontraba confundido.

-Cielos... Debo dejar de hablarles a personas extrañas.

-Ja, ja, ja no te preocupes Nir, no haré tal cosa ahora mismo... Lo haré en el entrenamiento.

Respondía Take ante el comentario pesimista y negativo de Nirvan.

-Lo digo y lo repito, debo dejar de hablar con gente extraña.

-Entonces Rion, es un gusto conocerte, pero... ¿Solo Rion?

-Sí, no tengo apellido, así me registré en el gremio.

-Vaya, si sabía que se podía registrar a mano y con el escaneo, así que tú realizaste la primera opción.

Comentaba Nirvan a lo mencionado por Rion.

-Sí, siento que si quiero destacar en esto y conseguir mi objetivo lo haré bajo mi propio nombre.

-Bueno esos son motivos ajenos, así que no me meteré con ellos je, je.

-Oye Rion eres alguien agradable, pero a la distancia parecías una persona de aspecto rudo.

-No me gusta relacionarme con muchas personas, prefiero mi espacio.

-Bueno, bueno pues ahora ese plan no se podrá ja, ja, ahora somos amigos así que estaremos juntos hasta que esto acabe.

-Sí que eres alguien raro chico, pero bueno ya que, si solo son ustedes dos no tengo problemas.

Respondía Rion a lo dicho por Take sobre su tan repentina unión.

En eso el trío de amigos observaba a los demás aspirantes, aspectos raros sí, pero muchos de ellos dejaban a la vista un aura de agresividad, se sentía una apatía en el aire.