Miro a mi izquierda esperando a que un taxi pase, pero no lo hace, veo la hora en mi celular, debería llegar lo antes posible para asegurarme de que Camille esté bien. La bocina de un auto comienza a sonar, el auto se detiene frente a mí, la ventana se abre, ya no tiene el ceño fruncido, solo una mirada seria. -Suba ya- me acerco a la puerta del copiloto, pero la asegura para que no entre. -Aquí no, atrás- hace una señal con su mano y subo al asiento trasero. -No se ofenda, nadie sube a mi lado, no quiero que las chicas piensen que hay una oficial, ya sabe...- asiento como si en verdad entendiera lo que dice. -En realidad nadie sube a mis autos, pedí prestado este a mi amigo para poder llevarlas al aeropuerto- lo dice como si fuese un pecado llevar a alguien con él, me pregunto cómo es que serán sus novias, ¿acaso serán conscientes de lo idiota que es? Apuesto a que nunca se ha enamorado.
- ¿Y qué hace con sus novias? ¿Las envía en taxi? - me observa por el retrovisor con seriedad. - ¡¿Es enserio?! Me pregunto cómo es que aceptan salir con usted, ya puedo imaginarlo hablándoles sobre sus condiciones para salir con ellas-.
-Vaya señorita Bamford, debo decir que me he equivocado, creí que no tenía una pisca de inteligencia- abro la venta, me pregunto si solo está fingiendo o es verdad lo que me dice. -Sin embargo, se equivoca en una cosa, yo no tengo novias- lo miro con mayor seriedad, coloco ambas manos en mi pecho cuando veo que me observa.
-Ya veo, en la actualidad eso es bastante normal, si gusta puedo presentarle al hermano de Andrew, es bastante atractivo y creo que será su tipo-.
-Le causa placer molestarme ¿no es cierto? -.
-Bueno, no le diré que no- me encojo de hombros y me recargo en el asiento, es un auto bastante lujoso y cómodo, apuesto a que a Camille le encantaría estar aquí. -Nunca se ha enamorado ¿verdad? – mantiene la mirada al frente, no hay un movimiento extraño en sus manos sobre el volante o una expresión que parezca exponer que le ha sorprendido esa pregunta.
- ¿Qué tiene que ver el amor con esto? -.
-Cuando se enamore perdidamente no querrá que ella suba al auto de algún extraño, mucho menos de sus amigos, querrá llevarla a su lado y exponer a todos los chicos que puedan pretenderla que es su novia, no la enviará en ningún taxi porque sabrá que hay una pequeña probabilidad de que el conductor sea un pervertido, así que ya sea a cualquier hora o lugar irá por ella, porque querrá mantenerla a salvo-.
-Debe leer muchos libros de romance, le recomiendo leer a Adam Smith, tal vez aprenda a sacar algo que le sea realmente servible en su vida-.
- ¿Puede dejarme en un restaurante por favor? No pude comer nada y muero de hambre- ya me salté la comida, no puedo hacerlo también con la cena.
Después de unos minutos estaciona el auto. -La invitaré a cenar- baja el auto y cierra la puerta, no creo que sea buena idea cenar con él. Bajo también y lo sigo. -A unos metros hay un excelente restaurante, la comida es realmente exquisita- ha comenzado a caminar a un paso más rápido, ¿cómo hará para caminar así? Me pregunto si tendrá ofertas para convertirse en modelo., lo admito, viste bien y tiene buen aspecto físico, aunque no puedo decir lo mismo de su carácter, apuesto a que no me trata como aquel día porque cree que aún puede convencerme de volver, porque no encuentro otro motivo por el que me invite a cenar.
-Ciertamente no quiero ir a un restaurante caro, ¿por qué no vamos por comida china? - se detiene y gira.
-No como basura, es grasosa y sabe mal-.
- ¡Qué gran mentira! ¿Acaso la ha probado? – no responde, lo sabía, no hay quien se resista a la comida china. - ¡Ya está! Iremos por comida china, vamos- tomo su brazo llevándolo a la fuerza. -No está lejos, ¿ve aquel enorme letrero con letras que no puede entender? Ese es nuestro destino- sonrío al ver su cara después de escuchar mi explicación. -Quite esa cara, le aseguro que le encantará- su resoplido parece indicar que continúa negándose a comerla.
Llegamos al restaurante, y de inmediato toma asiento.
-Oh, primero debes ir a indicar qué es lo que queremos-.
- ¿Qué? ¿No tienen meseros aquí? ¿Qué clase de restaurante es? -.
-Baje la voz, nos están mirando- no está muy feliz, aun así, me sigue a donde la chica encargada. Ella nos saluda con amabilidad, él la observa como si fuese un enorme sapo.
-Bien, queremos dos raciones de arroz, pollo general tso, pollo gong bao, una orden de jiaozi, cerdo agridulce y dos cervezas-.
- ¿Qué? ¿Va a comprar comida para todos los que están aquí? – la chica extiende el ticket con la cantidad que debe pagarse y antes de que él lo tome lo hago yo. – Nunca dejo que una mujer pague la cuenta- me lo quita de las manos.
-No es una cita para que se sienta comprometido a hacerlo- la recupero y pago. Nos entrega una charola con todo lo que he pedido. – He pedido lo más delicioso para que admita que la comida china es buena- me acerco para tomar la charola, pero tira de la parte trasera de mi abrigo obligándome a retroceder.
- Camine a donde quiera sentarse-.
Acomodo los platillos en el centro, entrego su ración de arroz, su cerveza y sus palillos. - ¿Puede comer con ellos o pido cubiertos? -comienza a observar alrededor, todos usan palillos, se niega, los toma y cuando abre el empaque en que se encuentran me observa con enojo.
#23026 en Novela romántica
#4619 en Joven Adulto
celos drama amor, romance odio, suspenso miesterio drama amor romance
Editado: 25.08.2021