Cuando la perdí

Mi papá había salido a un viaje de negocios y yo debía encargarme de dirigir la empresa hasta que él volviera, sería como una prueba para ver qué tan capaz era, además estaba algo confundido con lo del compromiso y era la mejor forma de despejar un poco mi mente. Pero con todo el asunto de la empresa no pude ver a Sara, por lo demás todo iba bien. Mi papá debía volver esa noche, lo esperaba entusiasmado, quería que me diera su punto de vista acerca de mi desenvolvimiento en el trabajo, aunque seguro mi papá llegaba muy cansado luego de cuatro horas de viaje. Llegué a casa muy tarde, seguro de que mi papá ya había llegado, pero no, aun no llegaba ya había pasado algunas horas y mi papá no llegaba, ya debería haber llegado, mi mamá se veía preocupada, sus ojos estaban llenos de angustia; no había visto a mi madre desde la cena con Julieth y sus padres, puesto que me esforcé mucho por evitarla, además parecía muy enojada conmigo. Pero no era momento para pensar en enojos, llamé al celular de mi papá pero no contestaba, se encontraba fuera de servicio y era muy extraño. Estaba muy preocupado, entonces recibí una llamada del hospital y nos informaron que mi papá había tenido un accidente de tránsito, estaba en estado crítico. Inmediatamente salí corriendo, tenía que llegar lo más pronto al hospital, cuando me dirigía hacia la salida pude ver a Sara; estaba muy preocupada y en su rostro se reflejaba una profunda tristeza, deseaba hablarle, explicarle todo lo que había pasado, decirle que no debía sentirse agobiada que todo estaría bien, quería decirle que la amaba con todo mi ser y que quería que se quedara a mi lado en los momentos difíciles… pero no era el momento, no sabía que sería la última vez que la vería. Mientras me dirigía al hospital sentía una terrible punzada en el pecho… no..no sabía qué hacer, sabía que mi papá estaba muy grave y debía ir hacia él...pero otra parte de mi quería volver a casa junto a Sara… en ese momento deseaba poder dividirme en dos e ir a los dos lugares al mismo tiempo, pero era imposible

Cuando llegué al hospital lo más rápido que pude, corrí desesperadamente por los pasillos hasta la habitación en la que se encontraba mi papá. Me dijeron que el auto había perdido pista debido a una falla con los frenos, mi papá había sufrido varios golpes en la cabeza y tenía algunas contusiones cerebrales, había perdido la conciencia, los doctores hicieron todo para ayudarlo pero ahora se encontraba en coma… y no se sabía cuándo volvería a despertar.

Horas después también llegó mi mamá, le expliqué la situación, mi mamá entró en pánico y desgarrada se sumergió en un gran llanto; yo hacía lo posible para calmarla trate de ser fuerte… pero las lágrimas escapaban de mis ojos. No podía creer que mi papá un hombre tan bueno, el hombre a quien tanto admiraba ahora yacía inconsciente en una cama, con la lejana esperanza de despertar algún día.

Pase toda la noche en el hospital, no pude dormir en ningún momento, sentía como si mi papá hubiera previsto todo y que por eso me dejo a cargo de la empresa antes de irse de viaje, a veces deseaba que todo fuera un sueño y que al despertar todo volviera a ser como antes.

A la mañana siguiente fui muy temprano a casa, tomé una ducha y luego de prepararme salí inmediatamente, tenía que ir a la universidad. Me sentí distraído toda la mañana, no pude concentrarme en las clases, así que luego de hablar con los maestros ellos entendieron la situación y me fui más temprano. Fui directamente a la empresa, con mi papá en ese estado yo debía seguir dirigiendo la empresa, ahora no tenía tiempo de dudar, debía esforzarme mucho más.

Ahora estaba más ocupado con la universidad, la empresa y las visitas al hospital, no me quedaba tiempo para nada, cada vez me ausentaba más de casa. Por un tiempo me dediqué a mis obligaciones y pospuse mi conversación con Sara; pero dentro de mí me moría por verla, por hablarle y escuchar su dulce voz, la extrañaba demasiado, pero no tenía tiempo, además el cansancio me vencía.

Pasaron un par de meses, para entonces no sabía nada de lo que ocurría en casa, tampoco sabía nada de Sara ni la había visto, me preocupé mucho y decidí hacer lo imposible por verla y hablarle. De seguro ella se sentía sola o traicionada talvez por mi falta de atención después de lo que había pasado entre nosotros; quizás solo me estaba haciendo falsas esperanzas, quizás ella no sentia lo mismo que yo, pero no, estaba seguro de que ella sentía lo mismo, pude verlo en sus ojos y ellos no engañan.

Una mañana, desperté muy temprano quería ver a Sara y hablar con ella antes de ir a la universidad, la busqué en la cocina, en la lavandería, en el patio, la busqué por todos lados pero no la encontré. Estaba frustrado en verdad deseaba tanto hablar con ella, cuando entre en mi habitación me noté algo en el piso, halle una pequeña nota, se encontraba en el piso junto a la puerta, pensé que tal vez Sara me la había escrito para declararme lo que sentía, puesto que no pude verla en mucho tiempo. Pero al leerla mi corazón se deshizo en mil pedazos no podía creer lo que decía:

Para James:

Nuestro amor siempre fue un error pero aún así quiero que sepas que

Yo tambien te amo

Siempre te he amado

Sin embargo no tengo nada que pueda ofrecerle a una persona tan buena como tú, solamente seré una carga para tí y un obstáculo en tu vida

No sabes cuanto lo siento

Pero ahora debo marcharme

Para ti

Sara

Lo sabía… sabía que ella también me amaba, pero ¿por qué?¿por qué se fue? ¿a donde? ¿Acaso era tan cruel para desaparecer de esa forma?, ¿acaso la asuste? Salí corriendo desesperadamente, llegué a la cocina y le pregunté a la cocinera donde estaba Sara y que le había pasado. Ella me miró tristemente y me dijo: -A Sara la despidieron hace una semana, no sé a dónde fue, pues ella no tenía familia ni un lugar a donde ir; disculpeme si no puedo ser de más ayuda- luego se dio vuelta y salió de la cocina, tratando de esconder las lágrimas que se le escapaban, pues Sara había sido como una hija para ella.