Todo Por Una Mujer

Capítulo I

Me encontraba sentada en una sala de interrogatorios, no sabía cómo diablos había ido a dar ahí y donde demonios se encontraba Victoria, trate de levantarme, pero estaba esposada a la silla —¡Ah!, ¡ese maldito bastardo!- dije en un susurro, sin embargo una voz sonó detrás de mí —¡Oye escuche eso!- dijo el general mientras se acercaba a la mesa, tomo una silla y se sentó frente a mí —¿Y cómo querías que te llamara?, maldito bastardo- dije lanzándome hacia adelante y tratando de mirarlo a los ojos, pero él ni siquiera se inmuto, cruzo sus piernas y se recargo sobre la silla. —Bueno, no es tan ofensivo viniendo de una perra como tú, que va por ahí atropellando generales y para de pilón con un auto robado, aunque en realidad te detuve por el auto robado- dijo mientras trataba de esbozar esa sonrisa burlona que tan bien conocía y que tanto me encantaba, que tanto me encanta —¿¡Te atreves a llamarme perra a mí, cuando fuiste tú el que me abandono, cuando fuiste tú el que se largó sin siquiera conocer a su…- no, no puedo decirle que Victoria es su hija, tengo que actuar rápido —¿Sin conocer a mí qué…?- mientras ponía las manos sobre la mesa de metal y se acercaba tan peligrosamente a mí que podía sentir su respiración chocando contra mis labios, voltee la mirada hacia un lado y trate de reparar lo que dije —Sin conocer a tu… a tu, dime de una vez, ¿En realidad te importaba nuestra maldita relación?-
Michael se quedó paralizado, eso fue lo que se llama en box, un golpe bajo —¡Pero por supuesto que me interesaba nuestra relación, te amaba, te amo y te seguiré amando Ariel!- uff cayó en la estúpida improvisación que hice —Si tanto te importaba nuestra relación, ¿Por qué te largaste y me dejaste sola?, 2 años me quede esperándote y jamás volviste, 2 años me estuve torturando con tu recuerdo, pensando e imaginando que estarías bien, que nada malo te había pasado, que algún día entrarías por esa puerta y me dirías “al fin he vuelto mi amor”- mierda, malditas lágrimas, ¡ahora no! —Me quede esperándote 2 años, Michael, 2 malditos años en los que pude haber rehecho mi vida, olvidarte por completo y poder salir adelante, ¡poder seguir sin ti!- a la mierda con las lágrimas —Pero no, no he podido olvidarte, sigues clavado como una maldita estaca en mi corazón- dije mientras lagrimas cálidas corrían por mis mejillas, quede en silencio por aproximadamente 3 segundos.

 

El silencio se rompió por un fuerte golpe a la mesa de metal —2 años, ¿¡me reclamas dos malditos años, cuando yo estuve 5 años en el desierto de sonora sin olvidarte ni un solo día!?, poniendo mi vida en riesgo para protegerte a ti y a todas las persona que queríamos, arriesgue mi vida, ¡estuve a punto de morir 19 veces!, para que después de todo ese tiempo volviera por ti y ya no te encontrara- pensé que me tenía acorralada, así que intente cambiar de táctica —Necesito tu ayuda- dije mirándolo a los ojos, Michael se volvió a acercar peligrosamente a mí —Ah, ¡¿ahora si necesitas mi ayuda, después de que me llamaste maldito bastardo, después de que casi me llamas hijo de put…?!- me altere un poco, solo un poco, no pudo terminar la frase yo que me abalance sobre él y lo besé; tenía que proteger a Victoria.

 

Después del beso Michael no sabía muy bien que hacer, se puso a caminar por toda la sala, golpeó varias cosas para después sentarse frente a mí y decir —No vuelvas a besarme así, ¡o te juro que dejo que te pudras en la cárcel!, ¡tu y yo ya no somos nada!, ahora dime, ¿en qué te ayudo?, pero que quede claro que lo hago por el bien de tu linda niña, porque si por mi fuera, bien podría abandonarte a la mitad de la carretera- quede en shock por sus palabras y su manera de decirlo, no podía comprender que una persona tal dulce pudiese convertirse en algo tan asquerosamente frio —Trato hecho- le dije…



#27677 en Otros
#3844 en Aventura
#1892 en Novela histórica

En el texto hay: romance, amistad, accion y aventura

Editado: 08.12.2019

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.