Todo sea por amor {saga amores sufridos N°3}

Capitulo 14

Me estoy preparando junto a Mía para la cena que vamos a tener con mis suegros y cuñado. Mía está con un vestido rosa estilo princesa que tiene un moño de lentejuelas junto a una vincha con un moño igual que el vestido ya que ella todavía no tiene el pelo largo para hacerle peinados. Aunque pensándolo bien voy a tener que aprender porque no soy muy buena haciendo peinados. Pero mi pequeña está hecha una princesita mientras ella está entretenida con un sonajero yo termino de arreglarme, decidi usar un vestido rosa para ir convinada con ella lo único que el mío es entallado en la parte superior y luego está suelto con vuelos además cuenta con un pequeño escote. Es sexy pero sin llegar a ser vulgar. De peinado me hago un recogido y un maquillaje sencillo.

-"Bueno Mía ya estámos guapa"- me acerco para alsarla y la detallo es muy bonita tiene los ojos color gris igual que yo supongo que lo abra sacado de mi padre ya que el tiene los ojos grises. En cambio mamá y Esmeralda los tienen azules. Pero su cabello es pelirrojo eso lo saco de su padre biológico porque mi hermana es rubia como mi mamá pero yo y mi padre somos pelinegro. El color de cabello me confirma que Gerardo no es su padre porque ni el o ni su familia son pelirrojos. En cambio de mi hermana saco sus facciones sin duda que hará rabiar mucho a mi esposo porque cuando crezca va a tener varias pretendientes -"Mi amor eres muy bella"- estoy tan concentrada admirandola que no noto la presencia de mi esposo.

-"Las dos son hermosas"- mi esposo estaba en el marco de la puerta con una gran sonrisa.

-"Más nuestra pequeña ya me la imagino de grande va a tener varios pretendientes"- eso borro inmediatamente la sonrisa de mi marido.

-"De eso nada mi princesita no va a tener novio hasta los 90. Incluso estoy pensando seriamente en enviarla a un convento, obvio que la visitaríamos todos los día"- lo dijo con una seriedad como si estuviera planeando las compras.

-"Ni lo pienses mi pequeña va a crecer y cuando ella se enamore se pondrá de novia con un hombre que la valore y se casará tendrá sus hijos. Y tú no la vas a enviar a un convento ¿Oíste?"- lo digo sería para que me entienda que es algo que no cedere yo quiero que ella sea feliz sola o en compañía de alguien que la ame.

-"Bueno no la enviaremos a un convento pero podemos tener hijos haci puede tener una ayuda para cuidar de mis bellas damas"- eso me causo nostalgia pero soy consciente que no podemos tener un hijo hasta que no le confiese la verdad.

-"Ya veremos"- fue la única respuesta que se ocurrió porque aunque yo deseó tener un hijo con el no quiero que sea con el engañado sino que quiero que recupere la memoria y desee quedarse conmigo para que tengamos hijos.

-"Amelia ¿Es porque estoy inválido?"- su pregunta me sorprende.

-"¿Que?"-

-"Si desde que salí del hospital no tenemos intimidad. Además de que te pones nerviosa cada vez que te beso. Quiero saber si el motivo es porque soy inválido"- si el ha querido mantener relaciones íntimas pero siempre le pongo una escusa.

-"No mi amor. Nunca me va a importar tu aspecto yo te amo recuérdalo siempre. Todo lo hago por amor"- mis palabras tienen segundas intenciones pero solo yo lo sé.

-"¿Entonces?"-

-"Antes del accidente estábamos en la cabaña familiar pero discutimos por eso nos volvimos temprano y supongo que la culpa no me deja hacer el amor  contigo"- digo con algo de lágrimas en mis ojos. El tira de mi mano para que me siente en su regazo y comienza a limpiar mis lágrimas con una ternura sorprendente.

-"Oh amor no fue tu culpa. No te sientas culpable sabes que no me gusta verte llorar solo debe haber alegría en tu rostro. Yo también te amo"- esas palabras hace que llore más porque me confunde.

-"Yo también"- con cuidado de no aplastar a Mía le doy un beso que aunque comienza tierno empieza a subir de intensidad. Pero el timbre nos interrumpe y Gerardo se separa a regañadiente.

-"Ya llegó la tropa"- aunque perdió la memoria algunas cosas nunca cambian.

Bajamos y yo me dirijo a abrir la puerta y veo a mis suegros en compañía de mi cuñado.

-"Hola cariño ¿cómo estás?"- me saluda mi suegro.

-"Bien suegro muchas gracias y ustedes ¿cómo andan?"- me saludan de forma muy cariñosa como de costumbre. Ellos se adelanta al comedor pero queda mi cuñado con una expresión de tristeza que me parte el alma.

-"¿Que le pasa a mi hermano favorito?"-

-"La culpa no me deja vivir. Lia es horrible no sé si me entiendas "- si el supiera.

-"No es tu culpa entiendo que tú la hayas amado pero no fue tu culpa recuerda que tú revisaste todo incluso hubieras dado tu vida por ella. Venga no te quiero ver triste dame un abrazo "- y el se acerca a dármelo.

-"Si no estuviera seguro de que me amas y que lo quieres como a un hermano creería que ustedes tienen algún romance"- nos damos vuelta y vemos a mi esposo con una seriedad.

-"Querido hermano creo que la dama escogió terriblemente me debió escoger a mi yo soy más guapo"- como olvidar que mi cuñado ama poner celoso a mi esposo.

-"Niños vamos a comer dejen de pelear adelante de mi niña"- veo como mi suegra los reprende tanto mi suegro como yo estamos aguantando la risa.



#28524 en Novela romántica

En el texto hay: traicion, amor, engaños.

Editado: 18.09.2023

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