Capítulo 25

Tormenta

"-¿No te asusta saber que entrenas al enemigo? -dice Satu mientras amenaza a Yaser con la mirada.

-Sabes que son realmente inútiles; en especial la hija de Dimitruk -observa relajado a Satu- Ahora que su madre está fuera, ella está más que sola.

Satu lo mira desafiante.

-No te atrevas a hacerle daño a ella, o te las verás conmigo -Sentencia."

Me despierto de volada, no entiendo qué sucede ni dónde estoy.

Es una habitación normal, bastante sencilla.
A mi lado se encuentra Rayo, creo que no está despierto, o muy dormido. Me está mirando pero a la vez no me vé.

-¿Rayo? ¿Estás despierto? -pregunto mientras él permanece inmóvil.

El ojiazul parece reaccionar.

-¿Tormenta? ¡Al fin despiertas! -se ve muy emocionado-. Aunque bastante mala hora para hacerlo.

-¿Qué sucede? -me observa confundido.

-¿Acaso no lo vez? O mejor dicho, ¿No vez? -pregunta.

-No entiendo.

-Estamos en total oscuridad -me observa dudoso- No se ve nada; ni aquí ni afuera, absolutamente nada, es como si las luces se apagaran; algo así como una noche eterna -sentencia.

-Qué extraño, yo veo todo normal -me observa incrédulo- Me cuesta creer que no hay nada de luz.

Escuchamos una explosión a lo lejos.

Siento como si algo me pinchara en la cabeza.

-Rayo...-llamo su atención- No me estoy sintiendo bien.

Él se nota preocupado.

El dolor de mi cabeza comienza a ser constante, con pinchazos cada vez más seguidos.

Rayo se queda estático.

-No hay electricidad en ninguna parte -dice una mujer de cabellos azules mientras entra en la habitación tratando de no golpearse con lo que sea que pueda haber enfrente- Creo que esto tiene que ver con lo que sucedió en Esperanza.

-¿Qué sucedió? ¿Qué es este lugar?-aprovecho la oportunidad de preguntar.

-Estás en Libertad, más específicamente el castillo, te tenemos aquí porque no es seguro ir a Esperanza; Yaser enloqueció en las últimas horas, Satu intentó advertirle...

-Le advirtió de que entrenaba el enemigo-Interrumpo.

-¿Cómo lo sabes?

-Lo estaba soñando, creo que eran sueños -Me observan extrañados.

-Cuéntame sobre esos sueños.

-Además del que ya dije, había uno donde se mencionaba "el poder del cambio", en otro se mencionaban a unos tales revolucionarios, algunos guardianes -me detengo a pensar en todo lo que vi.

Creo que también sé como volver el día que nos han quitado.

"-Si están de mi lado apagarán todo, que nadie vea, que los únicos capaces de ver en esta oscuridad seamos nosotros-exigía Yaser.

Nadie le prestaba atención, él se movía de un lado al otro por la sala. Su desesperación lo llevó a forzar a los más débiles para hacer su trabajo."

Se encontraba en el departamento de seguridad nacional, eso fué lo que pude observar.

Tomo la mano de Rayo mientras comienzo a correr, él sujeta la mano de aquella mujer.

Me dicen cómo salir y yo me guío en eso.

Salimos gracias a su memoria del castillo.

-Por más que intenten no pueden generar luz -informa aquella mujer- ni siquiera los que poseen fuego pueden; esto es peor de lo que parece.

-Yaser se pasó de la raya -dice Rayo, un tanto enojado.

Frenar a Yaser siendo que solo unos pocos podemos ver es una locura. Necesitamos recuperar la luz del día.

-Vamos hasta Esperanza, él debe estar allí -informa Rayo- Será más fácil porque cree que nadie ve.

-Soy la única que puede ver aquí -me quejo.

-Pero el cree que no es así, tenemos ventaja -insiste.

-Bien, dime tu plan y si me gusta accedo a llevarlos -sentencio.

-Mi plan es entrar en Esperanza, encontrar la forma de que todos volvamos a ver y después de eso enfrentarlo -dice con total tranquilidad.

Es una locura, Yaser es más fuerte que nosotros y él lo sabe.

Acepto llevarlo, después de todo creo saber dónde ir para recuperar el día que nos han quitado.

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Nos adentramos en la entrada de Esperanza, Rayo se nota preocupado.

Escucho gritos a lo lejos. Prefiero no darles mucha atención.

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Escuchamos fuertes explosiones a lo lejos.
Gente corriendo para alejarse de la zona; fue en la parte más despoblada de Esperanza.
El no ver luces ni nada parecido nos complica la vida, si nos tiraran un explosivo lo veríamos como apagado mientras lo ignoramos como posible amenaza.
Logro ver un poco de luz cerca de donde se produjo la explosión.

-¿Lo viste? -pregunto.

-No entiendo -dice Rayo.

-Se logró ver por unos segundos una luz cerca de donde se produjo la explosión -explico.

-Cuidado, puede ser una trampa -advierte- Por el momento hay que ignorarlo.

Se puede escuchar que a lo lejos alguien está peleando, escucho el sonido de espadas caer al suelo.
Más a lo lejos puedo escuchar la voz de quién creo que es mi padre.