Una sorpresa en casa

EVA

Los días pasaron volando y ni me di cuenta. Estaba muy ocupada estos días con los exámenes. Hoy tengo el de sociales. Me lo sé muy bien, por eso no estoy nerviosa.

Al salir de clase, me fui directo a casa. Por fin era viernes. Llegué a casa contentísima, pero todo eso se esfumó al ver a mi primo, Erik.

Joder, estaba guapísimo. Había cambiado mucho, de tener más de diez granos en laca a ser uno de los chicos más guapos que he visto

-Hey primita, se te va a caer la baba- Bueno, su comportamiento no ha cambiado.

Pasé al lado de él, fingiendo indiferencia.

-O igual, a ti- Me toca todo un fin de semana con él. Ya había hecho planes, pero se me olvidó el pequeño detalle de que mi primo iba a estar en mi casa

Intente ignorar a mi primo por el resto de la tarde. Intente primero llevar bien con él, pero era imposible. Era un engreído y se creía algo por el simple hecho de ahora ser guapo.

Al día siguiente quedé con Ellie para pasar con ella la tarde. Habíamos quedado en su casa. Íbamos a estar un allí y luego nos íbamos a salir con el resto de nuestro grupo de amigos. Ya lista iba bajando para ir a encontrarme con ella. Mi madre estaba en la cocina haciendo galletas

-¡Adiós, mamá! - Sabía que me iba a dejar salir porque ya habíamos terminado los exámenes, no quedaba nada, estábamos a final del mes de abril. Íbamos a coger las vacaciones. El mes de mayo se pasaba rápido y el de junio solo era dos semanas. Aunque era poco tiempo, teníamos un examen muy importante. Que se hace cada año para evaluar a los alumnos antes de subir a la ESO. Iba a empezar a estudiar la semana que viene.

_¿Dónde vas? Madre mía, qué memoria y eso que se lo dije ayer

-Ya te lo dije, mamá, voy a salir con Ellie un rato y luego con nosotros a amigos

-Sabes que estás castigada- A ver eso lo sabía, pero el castigo es que iba a tener que aguantar a mi primo que ahora no sé dónde está- Pero puedes... Ah, llevar a tu primo NO y NO. Ni siquiera sabía dónde estaba.

-Eh, no está aquí, creo que se ha ido...- Por desgracia, este apareció por la puerta, fastidiándome el momento

-¿Me buscabais?