Travis es un desgraciado para empezar tuvo que traicionar a su propia sangre, ahora ame venderá como si fuera carne de res. Los militares determinaron una lista de los delitos más graves hasta los más leves: primero tenemos el traspaso de personas de forma ilegal, actualmente el gobierno prohíbe que terceros traspasen gentes de forma ilegal, si alguien quiere salir del país tiene que pasar diversas pruebas de salud, tener algo que te identifique como persona; un documento de identificación por ello pueden fusilarte o matarte si te encuentran, segundo tenemos el robo de material de supervivencia, las personas que se les encuentre hurtando los suministros que se les dan a las personas se les da fusilamiento o 2 años comiendo pura sobras que dejan, tercero tráfico y venta ilegal de armas, las personas que se les encuentre trasladando y/o vendiendo armas a terceros o cerca de la frontera será torturadas, cuarto el tráfico de órganos, personas que de forma ilegal realicen operaciones de transfusión de órganos serán torturadas o llevada a cuevas por 2 semanas, por último el robo que es castigado apedreando a la persona.
Si mi primo puede ser tomados por los militares puede ser torturada de las peores formas, si un militar dice por ejemplo: torturémoslo quemándole los pies con piedras calientes lo hacen. En lo personal me parecen decretos estúpidos, no se castigan los delitos, de asesinato, robo con agresión entre otros, las personas tienen que ser asesinadas de una vez, tal vez fuéramos menos pero los suministros alcanzarían, no habría gente que cometiera delitos, es algo que los militares no pueden hacer bien.
Cuando llegamos a Ciudad Satélite veo que las personas están escondidas, siento que Travis es el líder alfa, el que gobierna en estos momentos, aunque se me olvido una ley, los mercenarios, está completamente prohibido que las personas paguen a asesinos con trueque o servicios sexuales para asesinar, el castigo, muerte inmediata.
Los secuaces de Travis me esposan con las manos en la espalda, me quitan mi mochila, todo mi armamento esta en sus manos, quizás los vendan por comida o medicamentos para realizar sus fechorías, estoy perdiendo una gran desventaja, ahora solo puedo pelear cuerpo a cuerpo.
Veo las casas y al parecer están en buen estado , solo un poco destruidas, me llevan a una que es como la casa base, esta custodiadas por varios guardias, cuando entro veo que el cielo falso está destruido, las paredes que al parecer estaban pintadas en blanco o amarillo están poniéndose negras. Veo camillas de hospital oxidadas otras destruidas, varias puertas que están bloqueadas con tablones otras con ladrillos.
- ¿Qué es este lugar? Pregunto-.
Uno de los secuaces me pone recto y su compañero me da un golpe en el estomago sacándome todo el aire mientras el otro me golpe en las costillas, no me queda más que resistir el golpe duro, estaba furioso y enojado, cuando salga de esto, les espera una gran y dolorosa muerte.
- Pídele a Dios, que no te mate. Digo amenazando-.
- Soy ateo. Responde-.
Llegamos a una especie de sala de operaciones, me acuestan y me atan las manos y pies con cinturones, que forma más original de operar. Travis se me acerca y veo que esta vestido como medico: mascarilla, bata, gorro y un bisturí en su mano izquierda que al parecer tiene un tatuaje de un león volador. Debe ser su marca veo a los guardias y si contienen la misma marca que él.
Se acerca con una jeringa, debe ser algún sedante o droga, hasta aquí llego mi fin, ahora mis órganos serán vendidos como si fueran comida, personas en cualquier parte del país estarán usando mis órganos para poder vivir o morir, las transfusiones tienen un margen de error del 50%, cierro mis ojos y escucho que se cae algo, una especie de máquina, Travis se va pero en el fondo escucho gemidos de una niña, no gemidos de sexo, sino de pelea, luego escucho balazos, siento que ha matado a Sky. Una sombra se acerca lentamente a la puerta, forcejeo como loco pero cuando veo es ella, me rescata me quita el cinturones y nos vamos.
Tomo de los guardias una pistola y nos vamos corriendo, necesito mi mochila pero no sé donde estará. Sky me guía hasta la salida, pero los guardias tienen tapados los pasillos, nos tenemos que meter en un cuarto de mantenimiento mientras ellos nos buscan, un tiempo para darme un buen respiro, relajo la respiración y lanzo la pregunta.
- ¿Cómo saliste y cómo me encontraste? Pregunto mientras recupero el aliento.
- Escuche a varios guardias decir que te matarían y venderían tus órganos a personas en Honduras y El Salvador. Responde-.
- ¿Dónde está Alicia? Pregunto-.
- ...
- Murió. Dice con lágrimas-.
- Rayos. Digo un poco furioso-.
No sé qué hacer ahora, solo íbamos por un maldito auto para escapar, siento que no tengo rumbo por el momento, en ese momento recordé que Sky necesita regresar a su hogar en Estados Unidos, creo que ya se a donde ir.
- Te llevare a la frontera. Digo-.
- No creo que sea lo conveniente. Dice-.
- Regresaras a casa. Te prometo llevarte. Digo-.
- Tengo que decirte algo. Dice-.
- Dímelo en el camino. Digo-.
Salgo del cuarto y que el destino juegue a mi favor.
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Editado: 11.03.2018