SECRETO #3
— ¿Qué es esto? —lo tomo entre mis manos.
No puedo creerlo. No hace falta que me lo diga, sé exactamente qué es esto, cualquier persona sabría qué es esto.
Niego rápidamente —Esto no…
Me lo arrebata de las manos —Pensé que tu… —sé que dirá, pero no puede ser posible.
Yo suspiro — ¿Estas bromeando, no? —Me acerco— ¿Sabes qué pasará si alguien lo descubre?
Su rostro está molesto — ¿Es mi culpa? ¡No seas un idiota!
Me empuja.
Tira sobre mis zapatos la evidencia de algo que jamás debió ocurrir ¿Lo quemo? ¿Lo dejo en la basura? ¿Finjo que esto no pasó y miento?
Recibo una llamada, veo el nombre en mi teléfono.
No puede ser.
No ahora.
¿Qué le diré?
¿Se lo tengo que decir?
No, mentiré.
Pero no merece que mienta, merece… más. Me siento tan mal, no puedo creer que esta sea mi vida ahora, no puedo creer que yo esto sea real.
Contesto y le digo que voy enseguida.