Fechas: De 1952 hasta mediados de la década de los 60.
- Apariencia: Boina francesa, gafas de sol, jersey negro de cuello alto, cigarrillos, vinilos de segunda mano y unos buenos bongos.
- Hitos: ‘Aullido’ (1956), de Allen Ginsberg, así como un centenar de recitales de poesía en el Greenwich Village.
- Máximo exponente: A Ginsberg y Jack Kerouac habría que añadir a William S. Burroughs, aunque él nunca estuvo demasiado cómodo con ello.
Beatnik es un término inventado en 1954 por el periodista estadounidense Herb Caen con el fin de parodiar y referirse despectivamente a la generación beat y sus seguidores, apenas meses después de que se publicara En el camino (On the Road), la novela-manifiesto del movimiento escrita por Jack Kerouac.
Aunque los escritores beat rechazaron el término por despectivo, el mismo fue adoptado y difundido ampliamente por los medios de comunicación, aplicándolo a un estereotipo juvenil distinguible por la forma de vestirse y arreglarse que se hizo moda, y relacionándolo con una actitud proclive a la holgazanería, el desenfreno sexual, la violencia, el vandalismo y las pandillas de delincuentes. Con el tiempo la denominación terminó siendo aplicada de manera indiscriminada, tanto al estereotipo, como a los artistas de la generación beat y sus seguidores.
Los beats y los beatniks se diluyeron en la segunda mitad de la década de los sesenta, inmersos en los movimientos contraculturales como los encarnados por los hippies, el rock, la revolución sexual, las luchas antirracistas y contra la guerra de Vietnam. Fuera de Estados Unidos, ambos términos beat y beatnik fueron utilizados como sinónimos, sin percibir el sentido paródico del segundo.
Etimología :
La palabra beatnik fue acuñada por Herb Caen, un popular periodista de San Francisco, para referirse a los beats o la generación beat, que habían establecido su principal centro de reunión en la Playa Norte de la ciudad. Caen, quien varios años después ganaría el Premio Pulitzer, utilizó el término en un artículo escrito en el San Francisco Chronicle el 2 de abril de 1958, fusionando las palabras beat y sputnik. El Sputnik 1 fue el primer satélite artificial y había sido lanzado por la Unión Soviética seis meses antes, convirtiéndose en un símbolo, tanto del poderío soviético como de la amenaza de destrucción nuclear de los EE. UU. en el marco de la Guerra Fría, debido a lo cual desató una ola de temor masivo entre los estadounidenses. Al vincular a la generación beat con el Sputnik soviético, el objetivo era mostrarla como "no americana" (no estadounidense). En algunos sitios web se menciona erróneamente que la palabra derivó de la fusión de los términos beat y nudnik, término idish que significa ‘aburrido’ u ‘obtuso’.
Criticando la tergiversación del término, Allen Ginsberg, uno de los principales referentes de la generación beat, escribió una carta al The New York Times, luego de que el periódico la utilizara reiteradamente en un artículo referido al escritor, para deplorar «la engañosa palabra beatnik»", diciendo que «si hubieran sido los beatniks y no los iluminados poetas beat quienes hubieran invadido este país, no habrían sido creados por Kerouac sino por la industria de los medios de comunicación de masas, dedicados constantemente al lavado de cerebro del Hombre».
Por su parte Jack Kerouac, quien inicialmente había definido el término beat como "abatido, despreciado y maltrecho" (beat down), ocho meses después precisó su significado en el Foro Brandeis «¿Hay una generación beat?» («Is There A Beat Generation?») realizado el 6 de noviembre de 1958 en el Hunter College Playhouse de Nueva York. Los panelistas eran el propio Kerouac, James A. Wechsler, el antropólogo de Princeton Ashley Montagu y el escritor Kingsley Amis. Wechsler, Montagu y Amis se presentaron vestidos con trajes, mientras Kerouac lo hizo con jeans negros, botas y una camisa a cuadros blancos y negros. Leyendo un texto que ya tenía preparado, Kerouac reflexionó sobre el significado y el sentido de «lo beat»:
Es debido a que soy beat, esto es, que creo en la beatitud y en que Dios ama tanto el mundo que le dio a su hijo único... ¿Quién sabe, si el universo no sea realmente un vasto mar de compasión, la verdadera miel sagrada, debajo de toda esta muestra de personalismos y crueldad?
La diferencia entre beat y beatnik
En la jerga local estadounidense de la época, el término beat indicaba la cultura, la actitud y la literatura, mientras que la palabra beatnik se utilizaba para estereotipar la cultura beat, tal como aparecía en los personajes de historieta, muchas veces violentos, que difundían los diarios y revistas.
Beat era un modo de ser, dijo el profeta (Ginsberg); beatnik era ropa de moda. Beat era identidad; beatnik era imagen.
Esta distinción entre beat y beatnik ha sido analizada por el profesor Ray Carney de la Universidad de Boston, una autoridad en cultura beat, en The Beat Movement in Film, una serie de notas suyas realizadas en ocasión de una muestra de 1995 organizada por el Museo Whitney:
Gran parte de la cultura beat expresa una posición negativa antes que positiva. Estuvo animada por un vago sentimiento de displacer e insatisfacción cultural y emocional, y un anhelo, antes que por un propósito o programa específico.
Sería mucho más fácil si sólo buscáramos películas con beatniks. El periodista de San Francisco Herb Caen acuñó la palabra (que, a partir de un sarcástico juego de palabras con el recientemente lanzado Sputnik de los rusos, intentaba aparentemente poner en duda la americanidad-desangre-roja-blanca-azul de los beatniks). Y los medios de comunicación popularizaron el término. Dobie Gillis, la revista Life, Charles Kuralt y una hueste de conductores de espectáculos y periodistas redujeron lo beat a una serie de tontas superficialidades externas que han permanecido entre nosotros desde entonces: chivas, anteojos de sol, lecturas de poesía, cafés, holgazanes y jerga "cool, man, cool".