El día de la fiesta llegó y tenía que alistarme, Tony estaba raro últimamente, lo notaba preocupado desde que recuperamos la lanza, pero confiaba en que todo estaría bien, tal vez solo se había asustado por Clint, quién ya estaba bien, gracias a la doctora Cho que sano la herida con una máquina que creaba tejido humano, era ciencia muy avanzada, eso era admirable, quizás por eso Tony la invitó a la fiesta, me preguntaba por qué mi padre estaba investigando la energía que emanaba de la lanza, aunque la respuesta no era tan difícil para mí, industrias Stark ahora tomaba el rumbo de la energía autosustentable, intentar replicar la energía de la lanza era tentador para Tony. Tomé un baño y al salir me topé con Thor.
- ¡Demonios Thor! – grite de la impresión – me asustaste.
-De verdad lo siento, no quise asustarte – respondió Thor – y de verdad está situación no fue a propósito.
-Descuida, aún no me acostumbro a tenerlos a todos aquí.
-Ya te acostumbraras con el tiempo.
-Quizás debería irme, técnicamente estoy desnuda y frente a ti.
-No te preocupes, trato de no mirar, no es que tengas un cuerpo feo, tienes un cuerpo maravilloso, pero… bueno tú entiendes.
Estábamos frente a frente y me acerque mucho a él, mi intención era abrazarlo para que se calmara por la situación que estábamos pasando, sin embargo, al estar tan cerca los dos, nos besamos, no sabía qué estaba haciendo, pero se sentía bien, aunque no debía hacer esto, ni siquiera estábamos enamorados, algo estaba pasando. Después de unos segundos nos separamos de golpe.
-Discúlpame Thor, no sé qué me pasó – dije confundida – no volverá a…
-Yo soy quien lo siente – me interrumpió Thor – creo que estoy un poco vulnerable, Jane y yo decidimos terminar y no se lo dije a nadie.
- ¿Es en serio? No lo sabía, si quieres podemos hablar.
-No, está noche quiero divertirme en la fiesta y luego me iré a Asgard, entregaré la lanza.
Asentí con la cabeza y le di un beso en la mejilla, luego regrese a mi habitación para alistarme y alejarme de la situación tan extraña que acababa de vivir, trate de no pensar en eso, así que empecé a vestirme, elegí un vestido rojo, era un poco corto, pero nada exagerado, elegante con tirantes en los hombros, un suéter de casimir blanco y unas botas pequeñas en color blanco, la pulsera que controlaba mis poderes aún estaba ahí, el collar que Loki me regaló y por si acaso mi daga escondida en el tobillo. Cepille mi cabello en un lacio perfecto que dejaba ver la altura real de mi cabello, ya llegaba más debajo de la cintura, ahora por alguna razón tenía destellos rojizos, mis ojos tenían un verde más brillante, supongo que eran las dos gemas en mi cuerpo.
Salí al pent-house y la fiesta ya había comenzado, todos estaban ahí, cada quien divirtiéndose dispersos por toda la fiesta, conocía a todos los amigos de Tony, recordé que cuando fingía tener diez años los veía en cada fiesta que él hacia y me presentaba como su maravillosa y perfecta hija o heredera de toda la industria, bajé por las gradas y empecé a saludar, entre esas personas habían mujeres que estaban enamoradas de los millones de mi padre y trataban de ser la indicada para él, sin embargo, él abandonaba a todas después de una loca noche de alcohol, fui con cada grupo y en todos había una de ellas, aunque claro, ninguna de ellas me reconocía porque él no dejaba que las viera, llegue con una que estaba coqueteando con Steve.
-Hola, perdón por tardar Steve – dije mirando a ambos – por cierto, soy hija de Tony Stark.
-Ah si, la niña de diecisiete años, muy joven para Steve – respondió tocando electrónico hombro de Steve – deberías estar en un baile, no en la fiesta de tu padre.
- ¿Se supone que tienes diecisiete? – pregunto Steve mirándome en señal de auxilio – creí que tenías casi mil años.
-Así es, no me veo ni de ochenta años ¿No crees? – dije bromeando – tal vez deberías hacer muchos deportes si quieres verte como yo unos años más, después de todo una mortal como tú debe cuidarse más, no eres una diosa como yo.
Tomé a Steve del brazo y me lo llevé con Falcón, para dejarlo fuera de las garras de las locas mueres con quién mi padre salía en su pasado, había olvidado lo irritantes que eran, vi a la doctora Cho mirando a Thor desde lejos, me causaba gracia que ella no fuera más valiente de hablarle de frente, fui con Thor para evitar que alguna de las caza recompensas se le acerque, no hablábamos mucho, estábamos un poco tímidos el uno con el otro, solo pensábamos en el beso, nos sentamos lado a lado en uno de los sofás, y después de un momento alguien conocido apareció a lo lejos, era Christian, y se sentó frente a mí, ahora estaba más incómoda que antes.
- ¿Cómo convenciste a mi padre de invitarte a esta fiesta? – le pregunté un poco irritada - mejor no respondas, probablemente te colaste.
-En realidad estoy aquí porque me hice amigo de María Hill – respondió – ella me invitó.
-Bueno entonces supongo que sabes que Zafiro es una diosa – interrumpió Thor – significa que yo no la haría enojar en tu lugar.
La fiesta paso rápidamente y poco a poco los invitados se fueron, quedando solo quienes vivíamos ahí, María, Clint, la doctora Cho y Christian, todos bromeábamos hasta que hablaron de sus teorías respecto al Mjölnir, y Thor los reto a levantarlo si eran dignos, parecían niños con un nuevo juguete, Clint fue el primero en intentar, seguido de Tony con Rody, Bruce y el capitán quién logro moverlo solo un milímetro, pude ver el desconcierto de Thor en su rostro, yo solo reía con todos ellos, luego le pidieron a Natasha que lo intente, pero ella no quiso hacerlo porque sabía que no lo haría.
- ¿Qué tal mi hija? Ella puede intentar, es una diosa igual que Thor – dijo Tony mirando a Christian de manera intimidante – creo que puede ser digna de gobernar un mundo.
-No tiene que ver con ser un dios, papá – respondí poniéndome de pie – Loki no podía levantarlo.
-Siempre hablando de Loki, bueno intenta pequeña.
-Técnicamente ya estás destinada a gobernar Asgard, solo demuestra que eres digna.
Puse mi mano tímidamente en el martillo y respire profundamente, hice fuerza, pero pude levantarlo con facilidad, quedé boquiabierta al igual que todos los demás Vengadores, me miraban tan asombrados que no sabían que decir, deje el martillo en la mesa nuevamente y me senté junto a mi padre.
-Ya vieron señores – dijo Tony – mi hija es digna y tal vez sea porque es una diosa.
-Quizás sea una buena teoría – respondió Thor – yo tengo otra, ninguno es digno más que ella y yo.
Levantó el martillo y lo giro en el aire, todos abuchearon y comenzaron a molestar a Thor, riéndonos, Christian me miraba serio.
- ¿Dignos? – pregunto una voz robótica saliendo del taller – ninguno de ustedes podría ser digno, todos son asesinos.
- ¿Quién eres? – pregunto Steve poniéndose de pie.
-Me parece que me llamaron Ultron.
- ¿Quién?
-Un escudo para el mundo – reprodujo una grabación de la voz de Tony.
-J.A.R.V.I.S. – dijo Tony.
-Lo siento, tuve que matar al otro – interrumpió Ultron.
- ¿Alguien está muerto? – pregunto Steve.
-Todo ustedes tienen secretos, quieren proteger al mundo, pero también son un peligro para él, sobre todo ella – dijo Ultron apuntándome – ella terminará por destruir todo cuando lo único que la mantiene cuerda desaparezca, así que tengo una idea, el exterminio de los Vengadores.
Salieron otros robots disparados hacia nosotros, Thor me tomo de la cintura y en un abrazo voló hasta detrás de una mesa, dónde delicadamente me dejó en el suelo, sabía que no podía usar bien mis poderes sin terminar en una tragedia, la doctora Cho corrió a esconderse en otra mesa, María, Natasha y Christian tenían un revólver cada uno y disparaban a los que podían alcanzar, los demás se defendían como siempre usando sus habilidades, yo trataba de contenerme, hasta que uno de esos robots se acercó a María y Christian, ella intento atacar cuerpo a cuerpo, pero sólo logró que el robot la haga estrellarse contra una mesa, dejando solo a Christian, así que use mis poderes, haciendo un pequeño campo de fuerza alrededor de él y con la otra mano aplaste al robot sin tocarlo, todos destruyeron a cada robot que nos atacó y quedamos frente a Ultron.
-Agh qué dramático – dijo Ultron – los poderes de la pequeña Stark, tan controlados, ni siquiera les mostró el diez por ciento de su fuerza, y aún así se empeñan en mantenerla viva, sabiendo que ella será la extinción de toda la existencia, y algún día verán el monstruo que eres niña.
Thor lanzó su martillo y destrozó el cuerpo robótico de Ultron, todos nos miramos, yo estaba espantada con lo que Ultron había dicho sobre mis poderes, no era nada que yo no supiera, pero llamarme monstruo era muy cruel, Thor decidió intentar alcanzarlo cuando nos dimos cuenta que uno de los robots había logrado escapar, todos entraron al taller para tener una explicación de lo que había pasado, Christian le daba primeros auxilios a María ya que en la pelea algunos vidrios de rompieron y ella termino pisando estos. Thor por fin regreso y camino intimidante hacia Tony, él se dio la vuelta para mirarlo y Thor lo tomo del cuello en el aire.
-No no no, por favor, Thor cálmate – dije acercándome a él – es mi padre, bájalo ahora.
Thor me miró y lo bajo lentamente, empezaron a hacer las preguntas de porque había hecho eso, Tony empezó a reír nerviosamente, no sabía si lo hacía para provocar peores reacciones o era involuntario.
- ¿Te parece graciosa la situación? – reclamo Thor – tu hija es el primer blanco de Ultron seguida de nosotros y el mundo, y tú provocaste todo esto.
- ¿Por qué lo hicieron? – pregunté dirigiéndome a Tony y Bruce – ambos lo hicieron y sea lo que sea les salió mal.
- ¡Porque quería darnos un descanso sin preocupaciones! – grito Tony – que el mundo este a salvo y cada uno pueda hacer su vida, qué mi hija pueda casarse y ser la reina de Asgard y yo haga mi vida con Pepper.
- ¿Y salió muy bien verdad? – reclamo Thor – ahora la podrían intentar matar o peor, usar la lanza de Loki para controlar la mente de Zafiro, ella podría matarnos si solo lo intenta.
-De verdad lo siento – Tony parecía frustrado – perdóname hija, arreglaré todo esto, no dejaré que te mate ni te ponga en nuestra contra.
-Este bien papá – respondí abrazando a Tony – sé que lo solucionaremos juntos, estaremos bien, solo debemos encontrar a Ultron.
Comenzaron a rastrear a Ultron, cosa que era difícil ya que siendo una inteligencia artificial, podía estar en todas partes del mundo, y ya había creado más robots que hicieran lo que él quisiera, pero María decidió ayudarnos con eso, entregándonos reportes de que es lo que buscaba exactamente, buscaba vibranium para un cuerpo más fuerte, y también tenía de su lado a mellizos alterados genéticamente, él podía correr muy rápido y ella tenía algún tipo de poder telequinetico, el rastreo exacto tomó un poco más de un día, pero logramos rastrear a Ultron en Sokovia.
Nos dirigimos rápidamente a Sokovia y esta vez no nos costó tanto entrar a la misma base en la que encontramos la lanza, debíamos separarnos por precaución, yo quedé sola vigilando el sótano donde podría estar la lanza, busque lo más que pude, pero no estaba ahí, esto parecía algún tipo de trampa, pero nadie atacaba, teníamos como siempre el intercomunicador por si algo salía mal.
-Tengan cuidado, la mujer trato de controlar mi mente – era la voz de Thor – no creo que un mortal pueda resistir, por suerte Zafiro y yo tenemos mentes poderosas.
Caminé cuidándome, entré a otra habitación y sentí algo raro un pequeño mareo, di la vuelta lentamente y ella estaba delante de mí, alejándose, intenté atraparla, pero el mareo era más fuerte y tuve que ponerme de rodillas, de repente una visión se volvía física ante mis ojos. Estaba en un lugar oscuro, y frente a mí aparecían las gemas del infinito, todas, las seis, podía sentir su poder, se alejaban y yo las seguía, me guiaron hacia el paisaje de Asgard, pero estaba en llamas, todo se destruía por un fuego abrasivo, la gente corría huyendo de este, y las gemas seguían avanzando, llevándome hasta un lugar oscuro otra vez, en el suelo estaban todos los soldados de Asgard muertos, los tres guerreros muertos clavados al suelo por lanzas, y Heimdall agonizando, más lejos una sombra gigante frente a Thor y Loki, quienes estaban heridos, de repente está sombra tomaba del cuello a Loki, yo corrí hacia ellos rápidamente, pero cuando llegue el cuerpo sin vida de Loki cayó al suelo, me puse de rodillas a llorar mientras abrazaba a Loki, miré mis manos y estaban llenas de sangre, al igual que mi cara, comencé a tratar de limpiarla.
- ¡Zafiro! Escúchame, solo es una ilusión – era la voz de Thor – despierta, no es real.
No pude responder ni mirar a Thor, solo me tomo en sus brazos y me saco de allí, subiéndome de vuelta al jet, me dejó finalmente en un asiento, me pidió que me calmara, me abrazó y eso me saco del trance en el que me encontraba, el impacto de sentir que me tocaban hizo que reaccione agresivamente, por suerte como Thor me abrazaba logro detenerme antes de atacar.
-Soy yo Zafiro, soy Thor – dijo con la voz más tranquila – estás aquí, con nosotros, lo que sea que hayas visto no era real.
-No, Thor, fue una visión del futuro – respondí temblando – no era una ilusión, yo lo sé, puedo diferenciar una ilusión de una premonición, gracias a Loki.
-Esta bien ¿y que viste?
-Muerte, todo se destruía, algo muy malo pasará Thor.
Thor solo me miró preocupado, afortunadamente nadie nos escuchaba, estaban afectados porque a ellos también les habían hecho ver cosas a las que tenían miedo, esa mujer no era inofensiva, pero al menos Clint no dejo que ella entrará en su mente, ya tenía experiencia con eso por culpa de Loki, tener a un dios controlando tu mente tendría que ser algo muy doloroso, por fin llegó Tony con Bruce totalmente deshecho, Hulk había atacado a Tony y destrozado toda una ciudad, por suerte Tony estaba preparado con una armadura que podía controlar a Hulk si alguna vez se salía de control, Tony me miró, y me dio un beso en la frente, nos informo que estaban pensando en arrestar a Bruce y en cuanto a nosotros, estábamos en peligro porque ahora Ultron podría estar en todo el mundo y tratar de matarnos al vernos, así que Clint decidió darnos asilo.
Nadia sabía dónde nos llevaba, pero cualquier lugar sería mejor que las ciudades grandes donde podían iniciar una persecución contra Bruce Banner, técnicamente éramos fugitivos o víctimas de un psicópata y sus dos amigos alterados genéticamente con los poderes de la lanza de Loki. Llegamos a una granja, le pertenecía a Clint y nos presento a su familia oculta, una esposa y dos pequeños hijos, y un tercero que venía en camino, todo era muy confuso, yo salí a tomar aire y Thor simplemente decidió irse a buscar respuestas respecto a lo que había visto en la visión que le mostró la chica alterada, su nombre era Wanda Máximoff y su hermano Pietro Máximoff, me senté en el pasto apoyada en un árbol, Steve se acercó al verme.
-Estas un poco afectada por lo que viste – dijo Steve – supongo que la tranquilidad del campo te ayudará a quitar malos pensamientos.
-Supones bien, estar así es más familiar de lo que cualquiera pensaría – respondí cerrando los ojos – crecí con Thor y Loki, pero con Loki teníamos una relación más estrecha, íbamos a un jardín lleno de rosas blancas que fue hecho en su honor por su madre, leíamos libros juntos y a veces nos quedábamos dormidos.
- ¿Cómo una diosa digna del poder de Thor se enamoró de su hermano inestable?
-Nadie puede ver la belleza que yo veo en él, bueno físicamente todos pueden verlo, pero yo encontré belleza en el caos de Loki.
- ¿Entonces eres de esas chicas que se enamora del chico malo y cree que con su amor lo puede cambiar?
-No claro que no, yo no quiero cambiarlo, me gusta egocéntrico como es, yo quiero seguirlo a donde el quiera ir, si logro que vaya por un buen camino estaría perfecto, pero si él quiere continuar por dónde está igual estaré a su lado.
Steve solo me miró un poco más y se alejó para cortar leña, vi que hablaba con mi padre pero no me acerque, yo solo quería estar sola, calamar mis pensamientos tan llenos de miedo, no quería dejar que mis miedos me consuman, encontraría la forma de cambiar ese futuro si es que pasaba realmente, entré nuevamente a la cabaña y la esposa de Clint, Laura, me entrego una manzana, me la comí, Clint me miraba desde la cocina, supongo que se daba cuenta de lo que pasaba, que estaba preocupada y asustada con lo que sucedía en ese momento. De la nada se abrió la puerta y entró Tony con Fury. Nos dijo que debíamos volver a ser un equipo y encontrar a Ultron, que Tony debía reparar sus errores y que él ayudaría de alguna forma si era posible, también nos dijo que María Hill aún trabajaba para él, y habían reclutado a Christian para ayudar, ya que necesitaba dos manos de confianza.
-Christian el ex novio de Zafiro está localizando a la doctora Cho – dijo Fury – y por cierto me pidió que te entregará una carta.
Me la entregó y yo la guardé en un bolsillo de mi chaqueta que traía puesta.
-Debemos encontrar a la doctora Cho – dijo Bruce – ella trabaja con tejidos sintéticos, tal vez Ultron la buscará para hacer un cuerpo perfecto.
-Perfecto, entonces ya saben dónde ir y entregue la carta, yo veré cómo ayudar – interrumpió Fury – por cierto, lo mejor sería que Zafiro espere en la torre de los Vengadores, alejada de Ultron por el momento.
Asentí con la cabeza y seguí a Fury, que se ofreció a llevarme de vuelta a New York, para que yo pueda esperar a que los Vengadores regresen con ese cuerpo sintético, me dejó en la puerta y se fue rápidamente, yo subí hasta el último piso y entre al taller, para encender todo el sistema de control del edificio, en este momento seguro estarían en Seúl, Corea. Si Ultron buscaba a la doctora entonces cuando ella ya no le sirviera la mataría, era lo más seguro, espere unas horas y Tony llegó con el cuerpo sintético junto a Bruce, íbamos a quitarle todo el poder que requería ese cuerpo, miré el cuerpo y me di cuenta que en la frente tenía una gema del infinito, la gema de la mente, me asusté pero no dije nada, debían separar el cuerpo de esa gema sin tocarla o podrían morir desintegrados por el poder de la gema. Sin embargo, Tony cambio de parecer, él quería darle consciencia usando el programa de J.A.R.V.I.S. y convenció a Bruce que está vez si funcionaria.
Me preguntó si estaba de acuerdo con esta idea y yo solo pude asentir con la cabeza, confiaba en el genio de mi padre, sabía que él lograría está vez hacer algo bueno para el mundo, y si no, yo destruiría la gema para absorberla, así Ultron nunca podría encontrarla si fallábamos en esta misión, conecte todos lo cables a la cámara donde se encontraba el cuerpo y espere que ellos hicieran realidad su idea, pero en ese momento llegó Steve con los mellizos Máximoff a su lado, diciendo que no permitiría que cometieran otra vez el error de crear a otro peligro.
-Capitán él sabe lo que hace – dije poniéndome frente a los tres – yo confío en que está vez hará lo correcto.
- ¿Tú te pones de su parte, Zafiro? – reclamo Wanda – él creó a Ultron, que quiere matarte porque te considera un peligro masivo a futuro.
Mientras todos discutíamos, Pietro corrió rápidamente y desenchufo cada uno de los cables que yo había conectado a la cámara del cuerpo, íbamos a prepararnos para pelear cuando Thor llegó el invoco un rayo que dirigió hacia el cuerpo sintético dando la energía que necesitaba, las computadoras mostraban que la carga había terminado exitosamente, Thor y yo nos acercamos a la cámara para ver el cuerpo, tenía los ojos cerrados y los abrió de golpe, sacando todo el poder que tenía y haciendo que una explosión nos haga salir disparados, ellos chocando contra las paredes o el piso, yo saldría disparada hacia una ventana, pero Thor fue más rápido y me tomo en sus brazos recibiendo todo el impacto de la explosión y los vidrios.