Probablemente estés aquí porque estás en busca de una esperanza; de un trozo encubierto que no hayas sido capaz de ver frente a la brutal realidad que te ensombrece y te apaga con cada instante, así que, voy a decirte, que aquí estoy yo para iluminarte un poco. No, no es que me crea especial ni nada, sólo soy una persona que también está cansada y desea que las cosas cambien, por lo que, para ello, he decidido hacer este libro.
Desde mi experiencia, y desde lo más profundo de mí, sé que la gente no experimenta cambios por mano ajena, más bien, ésta lo suele hacer por la necesidad que le surja. Por otro lado, en el caso que deseemos observar el cambio, uno mismo necesita ser paciente y sincero en el proceso para ayudar a la persona, pues éste no será de la noche a la mañana. Sin embargo, otras veces, es mejor no ser testigo de ello, puesto que esa persona puede arrastrarnos para con él.
Sé que es difícil ser amable con quien te cruzas cuando se comportan como monstruos, no obstante, hay que estar al tanto de algo, y es que estas personas se transformaron en agujeros negros no porque quisieron, sino porque también fueron víctimas tanto de terceros como de sus propias malas decisiones, y aunque no estemos en obligación de ser cordiales con ellos, es preferible no caer en sus juegos. A veces alguien necesita una buena reprimenda, y por eso muchas veces la verdad duele, aun así, ésta libera. En cualquier caso, es bueno saber el origen de las cosas, lo que nos lleva a ser conscientes de que nuestros actos traen consecuencias irreversibles. Por otro lado, recuerda que eres un ser valioso, y no importa quién lo diga, nadie, ABSOLUTAMENTE NADIE, tiene derecho a denigrarte, en especial cuando te conoces bien a ti mismo.
Ahora bien… tener esto que se llama el libre albedrio es complicado, pues cada quien sabe que puede hacer lo que quiera, no obstante, no todos entiende cuál es límite de ello, así que, por lo mismo, hay que recordar que nuestros derechos se terminan cuando empiezan los del otro; eso se llama respeto.
Retomando lo que es el sufrimiento, muchas personas sabias dicen que es algo que podemos elegir, y en eso tienen una razón absoluta, pero, retomando, otra vez está el hecho de que los sentimientos están en el medio de ello, de modo que eso bloquea la lógica, lo que hace que actuemos en contra de nuestros deseos, así que es algo que debemos trabajar día con día. Yo misma sé que no es para nada sencillo controlarse, y hay que reconocer que no todos van a escucharte, aunque te puedo dar la seguridad que tarde o temprano, a medida que vayas avanzando en tu existencia, esas palabras empezaran a resonar como lo hacen las mimas gotas cuando caen en un lago y crean ondas. Con esto quiero decir, que vivimos en un universo vasto, lo que significa que el peso no recae solamente sobre nosotros, sino que también lo hace sobre los demás, de modo que, si poseemos ciertas ideas, tenemos el deber de dejarlas salir, siempre y cuando, sea algo que tenga que ver con lo que es justo. Si eres una de esas personas que tienen miedo de ser juzgado, entonces te diré esto, tenemos una vida muy corta y tendrás muchas cosas de las cuales arrepentirte en un futuro de no haberlas hecho, en especial si se trata de una buena causa, así que vive lo más honorable que puedas, y en base a lo que más te guste sin dañar a nadie en el proceso.
Como ya lo he explicado en párrafo anterior, así como la ciencia repercute en la vida diaria del ser humano, así igualmente hace lo mismo cada individuo con su contrario, pues sabes, estoy segura que no eres consciente de que esa persona con la que chateas ahora, algún día dejará de responderte y no porque quiera, sino porque de seguro algo en ella ha cambiado o la vida ha decidido arrebatártela abruptamente; las cosas a veces así pasan y… no, no busco deprimirte, pero admito que lo más indicado es ser consciente de las posibilidades, y claro… se vale llorar. ¿Quién no se pone mal al perder a un ser querido sea por medio de peleas o por la misma parca? Los lazos siempre serán importantes para el ser humano, ¿y a quién no le gustaría compartir sus gustos con gente que le apasione lo mismo? Estoy segura que también deseas pertenecer a un lugar en especial, y déjame decirte, que lo tienes más a mano de lo que puedas darte cuenta, ya que nosotros somos los que al final elegimos. ¿Te das cuenta lo importante que es saber lo que quieres? ¿Lo primordial que es saber entenderte a ti mismo?
En cualquier caso, poco a poco te diré, que parte de tus acciones afectan a esta gente con la que hablas, sin embargo, no son sólo tus acciones las que crean repercusiones, pues así también pasa con las palabras. Es impresionante cómo en algunos tan sólo la forma de expresarse puede crear grandes malentendidos y provocar el más terrible de los sufrimientos.
Esa serie de personas que suelen crear malas situaciones, se dan cuenta de que antes de dominar el lenguaje, primero tienen que dominar sus sentimientos, los cuales pueden ser realmente salvajes si no se les contiene, así que, veamos… creo que a esto es lo que se le llama la inteligencia emocional.
¿Pero cómo se hace esto?, pues para serte sincera no es nada sencillo, así como la ciencia va de la mano del hombre, se necesita del conocimiento de varias ramas, tanto en el ámbito de lo espiritual como lo filosófico, ya que eso es lo que traerá la verdad de la cual siempre estás sediento/a, por lo que, debes comprender, que será un camino largo, pero fructífero al final. Si bien, no puedo asegurarte que tu vida sea impecable, pero voy a decirte que al menos, la verdad que encontrarás, tendrá un peso tan intenso, que te darás cuenta con las situaciones que atravieses que habrás llegado a un punto en donde te has hecho más fuerte, así que… ¡en hora buena! ¡Vas avanzando!
Ahora bien, con esta leve introducción por los diversos caminos que recorreremos, espero que pueda darte la luz que buscas, o al menos un trozo de esa inmensa verdad que deseas encontrar. En cada capítulo, usaré la mayor cantidad de sabiduría que poseo para plantar una verdad en la que yo creo, y que espero pueda liberarte de toda esa tortuosa carga que tienes.