Para empezar, esta cuestión de alguna forma podría considerarse una falta de respeto para aquellos que son unos apasionados en el conocimiento del saber dejarse llevar por la corriente, no obstante, no estamos aquí para manifestar descontentos de personajes ajenos que no aportan nada bueno a nuestra sociedad, mas bien, estoy aquí con el propósito de dar un claro motivo del porqué yo diría que sí.
A lo largo de nuestra existencia, todos conocemos diferentes tipos de personas, y éstas nos van moldeando, es decir, crean nuestra personalidad a base de momentos que compartimos con ellas. Algunas de estas experiencias, suelen ser traumáticas, y como seres humanos tan empáticos que somos, dejamos que las cosas negativas influyan más en nuestro ser que lo positivo, aun así, hay que admitir que no todo es malo en nuestro entorno.
Quizás para algunos estoy exagerando o digo lo evidente, pero no, no es exageración ni mucho menos, puesto que algunos seguramente, nunca se habían detenido a pensarlo hasta ahora. Hay que tener en cuenta que al final nos tenemos a nosotros mismos en el caso de estar en plena soledad, y si deseamos conseguir alguna amistad, entonces ésta vendrá más adelante, siempre y cuando, estemos predispuestos. Por el contrario, si estamos rodeados de personas, pero ninguna nos llama la atención, el caso se torna un poco más complicado.
En algunas ocasiones, subestimamos nuestras acciones y más aún, lo que tenemos a nuestra cercanía. Hay que entender que a veces nosotros somos los que nos hacemos ideas equivocadas, y alejamos a quienes desean acercarse, por lo que, de ahí, debemos recapitular y darnos un tiempo para pensar la manera en cómo queremos cambiar; sorprendentemente el comienzo de ello es cuando buscamos nuevas visiones.
De cualquier forma, lo que quiero lograr tocando el tema de las personas que construyen las bases de nuestra personalidad, es que gracias a ellas terminamos dando con esta pregunta en particular, ¿y por qué digo esto?, pues por el hecho de que siempre cuando estamos realizando el viaje del héroe, terminamos por encontrarnos con gente que desestima nuestro esfuerzo. Ésta por lo general, nos cuenta una historia que no es nuestra, y en donde sus propios antecesores se la inventaron también a él. Si este es tu caso, entonces deberás de tener en cuenta de que lo que está en juego es tu vida, y aunque pueda dar mucho miedo el tema de ser responsable de ella, debo decirte que no existe mayor libertad que la de ser artífice de tu propio destino.
Sin embargo, es cierto que, podemos ser nosotros mismos nuestro enemigo, por lo que en primer lugar hay que aprender a abrazarnos, pues de otra forma no podremos avanzar como realmente lo deseamos.
Como sabrás, tenemos muchas voces en nuestra cabeza que a veces se transforman en una jaula de grillos y nos meten tantos peros, que nos deja parados durante mucho tiempo en una misma celda, es por ello, que hay que aprender a detenernos; a contactarnos con lo que somos, más exactamente, con nuestra luz y oscuridad. Quizás en estos momentos no lo experimentes de esta manera debido a las circunstancias, no obstante, el poder lo tienes tú en tus manos, y para saber si realmente ha valido la pena, entonces te bastará con luchar en el presente, para así realizar una mejor versión de ti a cada instante; te sorprenderías de lo fácil que es comenzar con algo, como el hecho de decir gracias por un alago para luego darte cuenta de que es algo que realmente mereces y a lo que todos tenemos derecho. Empezar por pequeñas cosas para luego dar grandes saltos, es algo que todo buen sabio debe hacer.
Ahora mismo, sin saberlo, estás dando un paso al leer este libro, así que, estate orgulloso/a de ti. Por eso, es que pienso, que en lugar de ver para atrás y observar todos los errores que tuviste, ¿no sería mejor recordar lo que aprendiste y te sirvió para desarrollarte? ¿No es acaso mucho mejor que permanecer en una oscuridad con una quietud que te frena antes de decidirte a dar un paso?
Pienso que, es mejor tener esa gran meta, e ir sin arrepentimientos a animarnos a amar, a soñar, a estudiar, o lo que sea que queramos hacer sin miedo al qué dirán, puesto que la gente siempre está hablando, así que… ¿qué sentido tiene preocuparse por eso cuando se trata de tu propia felicidad?
Enfocarnos en lo que nos gusta ser, y desenvolvernos naturalmente en nuestro entorno como si fuéramos el más dulce de los caramelos, ¿no hace las cosas más interesantes? ¿No hace las cosas… más fáciles?
Nadie merece ser tratado de forma despectiva, pero la persona que principalmente le da valor a su ser eres tú, así que, amate con emoción sin olvidarte de ser amable con los demás, ya que cada quien está librando su propia batalla.