Capitulo 3

Matías.

_ gracias _ Effie me miró y desvío la mirada.

_ ¿existe la posibilidad que Ana te la quité?_ negué con vehemencia.

_ no lo permitiré_ me acerqué a Effie y pusé mi mano en su mejilla_ lamento ser el causante de tu tristeza, Graco me ha dicho que no lo has pasado muy bien.

_ no te preocupes.

_¿ cómo no hacerlo? Si yo te a.._ ella pusó sus dedos en mis labios.

_ no lo digas Matías

_ Effie..._ me acerqué a ella, bajé mi cabeza y atrape sus labios entre los míos, la apreté fuerte a mi cuerpo. Pasó sus brazos alrededor de mi cuello y todo desapareció para mi, estábamos envueltos en un espiral de ansias, tantos meses lejos, sin vernos, sin tocarnos... ahora lo hacíamos con mucha desesperación.

Ella se apartó cuando fue evidente mi necesidad por ella.

_ debo irme Matías_ mi mente estaba nublada de deseo por Effie pero ella se marchaba...

_ no te vayas, quédate está noche_ ella negó.

_ para ti sólo será sexo _ fruncí el ceño y negué _ para mi será más que sexo y si me quedó contigo esta noche, quien sufrirá seré yo.

_¿crees que soy un insensible que sólo te usaré?_ ella negó y puso más distancia entre nosotros.

_ sólo estoy protegiendo mi corazón, no has visto a Athenea, solamente a mí, no me acostare contigo hasta que no estés totalmente seguro que es a mi a quien deseas _ la sujeté del brazo y la miré directo a los ojos.

_ ¿hay alguien más?_ ella abrió los ojos con sorpresa pero desvío la mirada, haciendo que los celos se alojarán en mi.

_ debo irme... _ apreté la mandíbula.

_ ¿Quién es?

_ nadie Matías_ se soltó y avanzó hacia la puerta.

_ no he sido violento jamás en mi vida personal pero juro que le partiré la cara a ... _ ella me interrumpió molesta.

_ no tienes derecho a reclamar Matías, si tu corazón fuera sólo mío, tendrías el derecho de pelear, golpear si deseas pero no es tu caso _ apreté los puños mientras Effie salía de la casa.

Effie

Salí apresurada de la casa, sentía el corazón latiendo a toda velocidad, no sabia que rayos me pasó para hacerle creer a Matías que había alguien más, bueno creo que si lo sabía, no deseaba que él supiera que estaba echa una mierda como diría Graco, lo había extrañado tanto, su beso me llegó hasta el alma pero recordé a Athenea... y que su corazón estaba dividido, quería su corazón completo para mi... no a medias.

Me sobresalte al sentir que tomaron mi brazo con fuerza y al girarme me encontré con un desconocido muy guapo y muy viril.

_ Pythia _ negué, él me miró detenidamente y luego me soltó_ lo lamentó te he confundido con alguien más.

Pasé mi lengua por mis labios.

_ es mi hermana _ él empezó a ver mi rostro con detalle.

_ se parecen muchísimo, te confundí con ella, ambas son preciosas_ se pasó la mano por el cabello.

_ señorita Effie _ desvié la mirada y me encontré con Altaír.

_ ¡Altaír!_ me acerqué y lo abracé _ Dios que alegría verte, no sabes la angustia que pasé cuando desapareciste ... _ él desconocido me interrumpió.

_ ¿Effie? ¿La Effie de Inés? _ él sonrió y oh era guapísimo.

_ ¿Quién eres?.

_ Mi nombre es Mika Costas, rey de la isla Medrea_ enarque una ceja.

_ el griego sádico _ mordí mi labio ante mi atrevimiento _ lo lamentó, estoy agradecida por haber cuidado a mi amiga y no hacerle daño.

El sonrió, ese hombre debía de saber que una simple sonrisa derretiria hasta un iceberg y lo hacía a propósito.

_ no te preocupes he escuchado peores insultos, griego sádico no es tan dañino_ metió las manos en sus bolsillos.

_ ¿qué hacen por aquí?

_ andaba haciendo unas diligencias por aquí,  para ser más exacto interesado en una casa, te vi y pensé que eras Pythia.

_ ¿de dónde conoces a mi hermana? _ él se encogió de hombros.

_ ¿está casada?

_ quieres que responda a tus preguntas pero no respondes las mias_ me crucé de brazos _muy rey podrás ser de Medrea pero aquí sólo eres Mika.

Él no respondió sólo se me acercó... demasiado cerca para mi gustó  haciéndome jadear.

_ un rey lo es en cualquier lugar, Inés se negó a mi petición de conocerte pero el destino se encargó de reunirnos _ tomó mi mano y besó mis nudillos _ Effie no sabes el gustó que he sentido al conocerte... al fin _ su mirada estaba oscura_ tenía dudas de comprar la casa pero _ se dirigió a Altaír _ llama a la señorita que nos atendió y dile que acaba de vender una casa_  lo miré con sorpresa _veo temor en tus ojos, pregúntale a Inés si soy el hombre de los rumores, te aseguro que soy una oveja vestida de lobo_ levantó las cejas _ por fuera una fiera y más manso que un gatito.