Cuando se quedaron solos fueron a la cocina, Alexia preparó te verde para a ella y un café para Christian. Se sentaron en la barra de la cocina, estaban en silencio y no sabían cómo comenzar la charla.
-Alexia se que volviste conmigo porque te lo pedí, no se si me has perdonado. Solo puedo repetirte lo que te dije, mi vida sin vos a mi lado no tiene sentido, tu eres el aire que necesito para respirar.
-No Christian, volví porque quise hacerlo, porque me di cuenta que yo tampoco puedo vivir lejos de ti. Estos días fueron los peores de mi vida, temía volver porque no sabía cómo me recibirías. Tú sabes que yo he sufrido mucho en mi vida y si me rechazabas eso hubiese significado que mi vida no tenía más sentido.
-No digas eso Alexia, nunca te podría rechazar. Me siento culpable por lo que pasó, tendría que haberte llevado conmigo en ese viaje y quizás nunca nos hubiéramos separado. Te prometo que la persona que hizo esto pagará por cada lágrima que te hizo derramar. Te amo Alexia.
Se para y se pone de rodillas frente a ella.
-Por favor amor perdóname y permíteme hacerte la mujer más feliz, te doy mi corazón y mi alma para que hagas con ellos lo que quieras.
Alexia toma el rostro de Christian, con suavidad le seca las lágrimas, le pide que se ponga de pie, ella contenía su emoción para poder hablar.
-Christian ya te he perdonado, lo hice desde el momento que te vi junto a nuestro hijo, me di cuenta lo equivocada que estuve al creer en una foto de un desconocido y no esperarte para aclararlo. Yo soy la que necesita ser perdonada, yo se que te hice mucho daño.
No puede seguir hablando, sale corriendo a la habitación y se acurruca en una de las esquinas. El la siguió porque no entendía porque lo había hecho.
-Por favor amor no llores más, no puedo verte sufrir de esta manera.
-Yo no merezco que me quieras de esta manera, no te das cuenta que hago todo mal.
-No Alexia, mereces ser amada, mereces tener todo el amor incondicional que nunca recibiste.
La toma en brazos, se sienta con ella en su regazo en la cama, la acaricia y la consuela besándole todo el rostro.
-Quiero demostrarte todo lo que tu me haces sentir, me permites hacerte el amor?
-OH Christian pensé que nunca volveríamos a estar juntos, ahora quiero amarte por lo que me quedé de vida. Claro que te permito ya que yo también quiero hacer el amor contigo.
Esta vez fue distinto, lentamente se fueron sacando la ropa juntos. Tomados de las manos ambos se arrodillaron en la cama, enfrentados, se besaron apasionadamente volcando todo su amor. Acariciaron sus cuerpos, el suavemente la apoyo en la cama boca a bajo y beso toda su espalda, ella ya no sentía molestia porque el hiciera eso, ya que sus besos la hacían sentir que sus marcas desaparecían. La giro y la volvió a besar en los labios mientras colocaba su cuerpo sobre el de ella, de la mesita de noche tomó un condón (que había sacado de su bolsillo cuando se saco la ropa), se lo colocó y antes de penetrarla la miro.
-Estas segura Alexia qué quieres que te haga el amor?
-Si Christian, no sólo quiero, sino que lo necesito, necesito que volvamos a conectarnos de la manera que mejor lo sabemos hacer.
Con esas palabras el la penetró y se movió despacio disfrutando de cada centímetro de su amada. Con ritmo lento le hizo el amor, sin romper su unión en un momento la tomó por los hombros y la levantó hasta quedar cara a cara, el quedó sentado sobre sus talones.
-Eres la mujer más hermosa Alexia, no lo dudes. Eres el amor de mi vida, no puedo estar sin ti.
Alexia lo beso volcando su amor, no sabía cómo responder a tanto amor con palabras. Comenzaron a aumentar el ritmo, en esa posición el la penetraba más profundamente. El orgasmo los hizo vibrar a los dos, ella llegó primero y el la siguió. Se quedaron abrazados mientras los rescoldos del orgasmo van remitiendo, el no dejaba de acariciarla sintiendo que era un milagro tenerla entre sus brazos cuando pensaba que eso nunca más iba a pasar.
-Alexia gracias por volver a mi lado, tu me completas y a tu lado soy el hombre más feliz del universo. De ahora en adelante nunca te voy a dejar sola, siempre estaré a tu lado para que nadie más se pueda meter en nuestras vidas.
-Christian esto es igual para mi, yo me sentí morir lejos de ti, pero no me atrevía a volver. Verte ese día y ver que todavía sentías algo por mi, me hizo dar cuenta el error que cometí, sabía que tenía que volver a tu lado ya que sos la única persona que me amo en mi vida. Te amo y te amaré por lo que me quedé por vivir.
Se fundieron en un abrazo, el los cubrió con el edredón y se quedaron así hasta que se durmieron.
Este era un nuevo comienzo para ellos. Lograrán la felicidad que se merecen?