Esa mañana Christian se dio cuenta de la fecha, era el día del cumpleaños de Alexia. Mientras ella dormía pensó de qué manera agasajarla, ya que era seguro que hacía mucho que no festejaba sus cumpleaños. Empezó a organizar todo. Le pidió a la señora Gail que prepara un desayuno para llevárselo a la cama, además le dijo que prepara una cena especial con una torta para celebrarle el cumpleaños a Alexia, él la iba a llevar a pasear todo el día para darle tiempo a que preparara todo.
Con el desayuno listo fue a despertarla. Alexia se encontraba sentada en la cama y Christian entró cantándole feliz cumpleaños. Ella se emocionó mucho con este pequeño gesto, que para ella era algo enorme. Christian se sentó a su lado en la cama y puso la bandeja entre ellos.
-Feliz cumpleaños Alexia, estoy honrado de poder compartir contigo tu cumpleaños número 22.
Le da un beso casto en los labios y ella se emociona, además se pone colorada.
-Muchas gracias Christian. Es la primera vez que me sirven en la cama el desayuno el día de mi cumpleaños. La honrada soy yo por recibir esta hermosa sorpresa.
-No tienes porque agradecer, verte tan feliz me hace sentir complacido. Este es el comienzo, luego de desayunar hoy te llevaré a pasear por donde tú quieras.
-Lo que haces me hace sentir muy querida y es un sentimiento muy nuevo para mi.
Alexia no pudo contener las lágrimas de felicidad que se habían acumulado en sus ojos y empezaron a rodar por sus mejillas. Christian la abrazo y secó sus lágrimas con dulces besos.
-Por qué lloras? Le dice preocupado.
-Son lágrimas de felicidad, es la primera vez que me siento tan feliz y es algo único en mi vida.
Se quedaron abrazados un rato y luego saborearon el exquisito desayuno. Charlando y riendo pasaron la mañana.
-Bueno Alexia estas lista para pasear en tu día?
-Si, donde vamos a ir?
-Recuerdo que te gusto ir a navegar, te gustaría volver a ir?
-Me encantaría, es muy lindo poder pasar un día al aire libre.
-Entonces vamos, ya tengo todo listo para que paseemos.
-Pues salgamos.
Mientras ellos disfrutaban el día navegando, en el departamento de Christian se estaba organizando la fiesta de cumpleaños. La señora Gail preparaba ricas comidas y Taylor se encargaba de invitar a las personas que su jefe le había pedido, incluso a la familia Grey. Grace conocía a Alexia porque la había atendido cuando la conoció Christian, por eso el le habló a su madre y le explicó la importancia de celebrarle el cumpleaños a Alexia, ella lo compendio muy bien y lo habló con el resto de la familia. Lo que la familia no sabía era que Christian la iba a presentar como su novia.
Christian vio la oportunidad en esta fiesta en presentar a su familia a su novia, algo que no había hecho nunca, porque las relaciones que había tenido hasta ahora fueron pasajeras y no eran importantes. Pero esta mujer que se cruzó en su camino le hizo ver las cosas de otra manera y ver que el amor verdadero podía entrar en su vida.
Cuando estaban terminando de navegar Christian le dio un regalo a Alexia.
-Este es un regalo para que uses esta noche.
Alexia abre el regalo y saca un hermoso vestido sin mangas, largo hasta el piso, espalda cubierta, de color azul. Además lo acompañaba unos bellos zapatos de taco haciendo juego con el vestido. Alexia no podía creer lo que veía, nunca había usado ropa tan fina y elegante.
-Muchas gracias Christian es hermoso.
Le dio un beso en la mejilla en agradeciendo.
-Hoy te voy a llevar a cenar a un lugar especial, te puedes cambiar en el camarote principal, yo me cambiaré en el otro camarote. Taylor nos estará esperando cuando atraquemos en el muelle.
Christian le dio un casto beso en los labios y la dejó cambiarse, se fue a cambiar también.
Cuando llegaron al puerto Taylor los estaba esperando para llevarlos a su destino.
Taylor le abre la puerta a Alexia y Christian sube por la otra.
-Tengo que pasar un momento por mi departamento y luego vamos a cenar.
-De acuerdo.
Cuando llegan le pide que lo acompañe a buscar lo que necesita, con la excusa de no dejarla sola. Entran y llaman el ascensor. Cuando llega ambos suben tomados de la mano.
-Christian este ha sido un día magnífico hasta ahora. Muchas gracias.
-Me alegra mucho que esté siendo feliz para vos este día, pero todavía no termino. Faltan sorpresas.
Se abren las puertas del ascensor, entran en el departamento y las luces se encienden de golpe, el cumpleaños sorpresa comenzaba.