Acaso, ¿te gusto?

Entramos juntos a la clase y enseguida todo el salón hizo silencio.

—Buenos días chicos, soy su profesor de ciencias Naoki... le presento a una nueva estudiante que estará con nosotros— se acerca a mi— Vamos sakura presentate— Me dice en susurros.

—Buenos dias me llamo sakura— dije y es lamentable, pero fue lo poco que conseguí decir... soy muy tímida para hacer amigos a la primera, odio hacer este tipo de presentaciones en público.

—Bueno eso es todo, puedes sentarte, vamos a empezar con la lectura del primer capítulo de su libro. —enseguida me doy cuenta que realmente es un profesor, ha cambiado de actitud en cuanto hemos entrado por esa puerta.

Así transcurrió el día, su clase era normal aunque con un pequeño detalle, él era demasiado lindo y todas nos le quedamos mirando como bobas...pude notarlo porque soy nueva y mirando a mi alrededor vi como las chicas veían al profesor Naoki, y de algo estaba segura, esas miradas estaban llenas de lujuria y deseos prohibidos iguales que los míos, pero a diferencia de ellas yo si estaba en mi realidad, consciente de que eso es un imposible, y que él nos ve a todas como sus estudiantes.

Durante el receso, comía sola cuando de repente alguien tapo mis ojos.

—¿Quién es?... no sé quien es por favor— no me gustaba este tipo de cosas siendo la nueva, no quería ser objeto de burla ni mucho menos.

—Hola soy Kate, y estamos en el mismo salón, te vi aquí sola y me recordaste a mí cuando entré, me sentaba distanciada de las personas porque tenía miedo y era un poco timida... ya no lo soy, las cosas cambian y no te das cuenta, asi que quiero que te adaptes— era una chica alta y de pelo negro hasta los hombros, tenía ojos oscuros y piel ligeramente bronceada... en realidad es bastante esbelta y guapa, ¿por que tendría timidez?... debería estar confiada con lo bella que es.

-—Ah, pues es muy lindo de tu parte gracias...— le dije con una media sonrisa.

Comimos, hablamos y así nos conocimos un poco más... y sin darme cuenta hice mi primera amiga.

De camino a casa me preguntaba si Naoki tendría novia, siendo ya un adulto y con lo guapo que es de segurito que ya estaba flechado por alguna belleza universitaria o empresaria profesional, así que terminé desanimándome por completo.

—Holaaa Sakuraaaa!!!!

—Ahhhhh!!! — Grité tan fuerte del susto por estar sumergida en mis pensamientos y no aterrizar a la realidad, que terminé de rodillas en el piso.

—Disculpame no quería asustarte, parece que solo vivo espantandote— veo como Naoki sonríe— ¿o será que siempre estas en as nubes? —me mira con una cara elocuente y juguetón, mientras me ayuda a ponerme de pie—¿y que pensabas?— me pregunta en tono curioso sin dejar de mirarme directo a los ojos y eso solo consigue ponerme nerviosa dado.

—Yo... Yo.. Pues Nada— balbuceo nerviosa porque ni se imagina que él era la causa de mi encimamiento tan profundo.

—¿Cómo que "nada"?, si estabas tan sumida en tus pensamientos que casi vuelas cuando te hablo y ¿dices que "nada"?, anda dime— se acerca ligeramente a mi y me estira los cachetes como si fuera una bebé, con ese gesto ya me queda claro que solo soy una niña para él.

—Pensaba en... que... si tenías Novia... dime, ¿acaso tienes una?— con valor le pregunto y lo miro a los ojos esperando su respuesta de manera ansiosa.

Se me queda mirando como sorprendido por la pregunta que acabo de hacer, más sin embargo, me contesta muy serio.

—Sakura acaso, ¿yo te gusto ?— me mira muy fijamente... contestando mi pregunta con otra pregunta aún más elocuente y me deja perpleja ante tan cuestión.

Me sonroje tanto que sentí una inmensa vergüenza porque, es como si viera a través de mi, y en ese momento lo único que podía hacer era salir corriendo, y eso hice.

-ESPERA SAKURA!!! —Lo oí gritar mi nombre pero no me atreví a voltear y seguí corriendo con lágrimas de vergüenza en mis ojos.