"Jake mate"
Sus palabras se repitieron en bucle en mi cabeza, cada vez más distorsionado. Q ap
Lentamente la somnolencia se exparcio en mi mente.
Mis piernas perdieron fuerza y me arrodille enfrente del caballero de plata.
La derrota siempre fue la decisión de este combate, no importa cuánto tiempo pase seguira siendo una derrota.
Y aqui en mi peor momento recordé como es que llegue aquí, el recuerdo que hizo que ayudar a los elfos en una misión suicida fuera posible
Flash back.
Se podía ver a Dos niños hablando en un parque a las afueras del pueblo
"Hermano vamos vamos, dijiste que jugaríamos hoy"
"Está bien, que jugamos esta vez"
Hablo un rohan (9) a una cata (7), emocionada dijo.
"A las escondidas"
"Okey, ¿quien cuenta primero?"
"Tú"
Después de esas palabras cata salió corriendo a través de los árboles.
"¡Hey no te vayas tan lejos!"
Grito rohan para quedarse en silencio y comenzar a contar.
1,2,3,4,5,6,7,8,9,10,11,12,13,14etc..
Contó hasta llegar a 40. Cuando se dió la vuelta
Una sensación ominosa invadió la mente de rohan cuando miro todo el bosque.
Ignorando esa sensación rohan busco y busco hasta el cansancio, cuando estaba por los rincones del parque la noche ya estaba por caer.
Hasta que finalmente recordó dónde estaba este parque. Este parque está echo dentro de un bosque.
"!Cata¡"
Con decisión se sumergió en el bosque para encontrar a Catalina.
Cada paso que daba veía el como el hermoso bosque de día se convertía en un criadero de pesadillas por la noche.
Distraído por los árboles tétricos callo por un acantilado.
Crunch
Rodó todo el acantilado, con suerte equivalente a ganar la lotería esquivo los picos de este.
Fin del flash back.
Esa vez fui tan inútil, si yo hubiera estado cata no habría Sido...
Con la somnolencia casi tomándome por completo mire a la cara del caballero de plata.
El sol abrasador detrás de su cabeza cubrió toda su cara y dejo sola la silueta de un caballero.
Lentamente levantó su espada por encima de su hombro.
Un dolor punzante en mi cabeza me trajo devuelta a la realidad.
Ahora recuerdo, como estoy aquí.
Las visiones de un caballero decapitando enfrente de mis ojos a mi padre pasaron por mi cabeza.
Ustedes me quitaron todo.
Confundido por la silueta borrosa del caballero lo confundí del ejecutor de mi padre.
Te llevaré conmigo aunque sea lo último que haga.
De un movimiento rápido saque mi daga oculta y la clave en la pierna izquierda del Caballero de plata.
Sus ojos se abrieron como platos cuando se dió cuenta de mi ataque.
Con mi cuerpo moviéndose por la furia naciente en mi corazón me levanté lanzando un ataque a su torso.
Sin perder el tiempo Said se alejo rápidamente a 20 metros de mi.
"Bastardo, solo prolongaste tu muerte."
Said se acercó a la daga completamente ensartada en su muslo.
Cuando la toco nuevamente abrió los ojos en sorpresa.
"Bastardo"
Mire con una sonrisa a el Said furioso.
"¿Por qué no te la quitas? ¿Acaso estás asustado de una simple daga?"
Mi sangre mancho el suelo debajo de mí.
Si te la quitas no solo te estás condenando a desangrarte si te la quitas, pero si no lo haces el oricalco en la espada envenenada tu sangre y bajará tu temperatura hasta morir
Said me miró con el odio impreso en sus retinas y levantó su espada contra mi.
¿Que es lo que vas a hacer idiota?
"No importa cuantos trucos uses, la única verdad aquí es que atravese tu abdo-"
"Cállate"
Ignorando el echo de la sangre recorriendo todo mi abdomen hasta llegar al suelo.
Tengo frío...
Mi cuerpo a entraba y salía de estados diferentes cada segundo. Aveces el dolor en mis manos se convertía en un ardor comparable a aceite hirviendo y de un momento cambiaba a un frío sepulcral.
Si mueres aquí, padre descansará.
Coloque ambas manos en mi espada rojiza.
"Bailemos"
Rápidamente canalice el aura a mis piernas y ataque al lado derecho de Said.
"Perra"
Y así comenzó el intercambio de cortes. Con la velocidad increíblemente reducida de Said contrarresta va cada corte que lanzaba y el de igual manera asia lo mismo.