De regreso a casa.
Blake
La mañana estaba preciosa el día de hoy, el sol brillaba con el cielo despejado era raro ver este tipo de climas en estas épocas del año en Rusia, pero de igual forma se disfrutaba, desde ayer que llegamos no podía dejar de pensar en cuantas cosas más mis padres me ocultaron, que mas iba a descubrir a lo largo del tiempo, ya ni siquiera sentía que conociera a mis padres.
Me encontraba sentado en el balcón de mi habitación observando el jardín brillar bajo la luz del sol, unos toques en la puerta llamaron mi atención, pues entraron Karina Prien Colton y Alisa, la primera traía un sobre blanco entre sus manos.
— Hola. — la voz de Karina fue la primera en romper el silencio.
— Hola. — me levante de mi lugar y camine hasta la mitad de la habitación donde ellos se encontraban.
— Ya llegaron los resultados. — Karina me tendió el sobre el cual tome al mismo tiempo que dirigí mi vista hacia Colton y Prien.
— Tenemos la información, pero primero queremos saber lo que dice ahí para saber si dártela o no. — Colton contesto.
Abrí el sobre leyendo cuidadosamente todos los campos hasta encontrarme con el más importante, el mundo se detuvo por un momento, todo a mi alrededor daba vueltas, comencé a marearme, y un sentimiento se instalo en mi pecho, no era de dolor, tristeza o aflicción, era de alegría, la pequeña era mi hermana, era verdad.
Levante mi vista encontrándome con la mirada de mis amigos, no contuve las lagrimas.
— ¡Es mi hermana! — solté el papel y comencé a revolver mi cabello. — ¡tengo una hermana de mi sangre! ¡no estoy solo! no estoy solo... — caí de rodillas llorando como un pequeño.
Amaba a Yess como mi hermana, pero sabia que no llevaba mi sangre, durante muchos años me sentí solo pues no tenia a alguien que me consolara, no tenia un vivo recuerdo de mis padres, actualmente me sentía aún más solo, sentía que la vida no valía la pena, solo había venganza en mi futuro, pero ahora, ahora era diferente, ella me estaba dando otra oportunidad de vivir mi vida diferente, así como jure proteger a mi familia a amigos, la protegería a ella, cueste lo que cueste.
Mis amigos me rodearon con un abrazo, volvía a sentir la alegría que años atrás sentía, tenia una hermana.
— Todo lo que Loui te dijo era cierto, tu padre la mantuvo escondida pues sabia que tenerte a ti ya era un peligro pero tu tenias a la familia de tu madre para protegerte, sin en cambio a ella no, era una bebé cuando tu ya eras más grande. — Colton comenzó a hablar. — antes de irse de Rusia tu padre iba a llevársela a ella también pero lo mataron antes de poder ir por ella, le dejo una carta para que supiera que vendría por ella.
Las lagrimas no dejaban de salir de mis ojos, apreté con fuerza a mis amigos.
— Déjenos solos. — Alisa hablo por primera vez.
Mis amigos dudaron un momento, pero les indique que estaría bien, sabia que tendríamos que hablar sobre que es lo que haría de ahora en adelante.
— ¿Y bien qué harás? — Alisa se sentó conmigo en el piso.
— Ella no debe crecer en este tipo de ambiente. — me limpie las lagrimas respirando profundo.
— ¿Cuál es tu plan?
— Nos iremos de aquí, regresaremos a New York. — gire mi vista para poder observarla mejor. — se que no puedo dejar la organización sin un líder.
Alisa fijo su vista en mi y sonrió con algo de tristeza.
— ¿Qué estas intentando decir?
— Se que soy el heredero, que me tengo que hacer responsable, pero como bien sabes la familia va primero. — suspire antes de continuar. — Me la llevare regresare con los Wiliams, yo seguiré dando la cara por la organización pero mientras ella crezca necesito tenerla en un lugar seguro.
— Te iras solo con ella.
— Si mis amigos se quieren ir conmigo no habrá ningún problema, no los obligare a nada. — Alisa asintió agachando la mirada. — frente al mundo yo seguiré a cargo, ya reivindique la mafia, además necesito terminar con mis metas y sueños, no solo quiero ser un mafioso, quiero ser alguien en la vida.
— Sabia que tu mal humor se debía a eso, no estas feliz siendo lo que eres.
Negue con la cabeza sin dejar de verla.
— Se que el legado de mi familia estará a salvo contigo, ¿puedo confiar en ti?
— Claro que si jefe. — sonreí ante su reacción, se había vuelto mi amiga y confidente.
— Jamás dejare de cuidarte, y vendré muy seguido.
— No te preocupes por mi.
Alisa me rodeo en un abrazo al cual yo acepte.
[...]
Después de hablar con Alisa y mis amigos las cosas quedaron claras, yo seguiría siendo el jefe, pero mientras yo no estuviera el mando lo tendría Alisa, mis amigos no querían regresar a New York, pues se habían acostumbrado a la vida en Rusia, así que se quedarían para apoyar a Alisa y a mi en todo, volví a llorar pues ellos eran mis únicos amigos en todo el mundo y seria difícil para mi dejarlos.
Ya había hablado con mi hermana menor, la cual ya se su nombre se llama Camila, acepto irse conmigo a donde fuera, fue difícil explicarle que nuestro padre ya no estaba vivo y al mismo tiempo que yo era su hermano mayor, pero en cuanto termine de explicar que éramos hermanos, ella solo comenzó a llorar y me pregunto que si la cuidaría y no la dejaría sola como su mamá y papá, admito que me rompió el corazón sentirla tan vulnerable, triste, pero atreves de ella me vi a mi hace diez años cuando tenia su edad, y conocí a Yess, el recuerdo de mi otra hermana me estrujo más el corazón.
Ahora ambos nos encontrábamos en el aeropuerto para tomar el avión hacia New York, Karina, Colton, Prien y Alisa estaban ahí para despedirse de mi.
— Buen viaje hermano. — Colton me abrazo para despedirse.
— Tienes prohibido tener otro mejor amigo, soy el único. — Prien se nos unió.