Capítulo 7

Parecía que las cosas iban bien para algunos, pero para otros las cosas iban mal.

Había pasado casi un mes y medio desde aquella incomoda comida en la cafetería de la escuela. Ese día había sido el mas extraños para algunos de los chicos.

Principalmente para Sebastian.

El grupo de los cinco chicos se había dividido desde aquella conversación que tuvieron Daniel y Joel sobre el mensaje de cumpleaños de Sebastian.

Joel estaba molesto con Daniel, y Sebastian no conocía la razón por la cual sus dos amigos habían dejado de hablar. Por las que preguntaba por la razón, Joel no le decía nada, simplemente inventaba excusa.

Joel sentía que no era momento, aunque realmente no sabia como decirle a Sebastian lo que en realidad pasaba por miedo de herirlo, o hacer que se molestara también con Daniel, porque aunque él estaba molesto con Daniel, no quería mas problemas cuando Sebastian se le uniera a la guerra por la tontería que había cometido Daniel aquel día.

Por otro lado, Aimé había perdido las esperanzas con Sebastian. Daniel todo el tiempo estaba encima de ella, y eso le impedía acercarse a Sebastian para hablar con el. Sebastian era su amigo y le interesaba saber como se encontraba, además de ser su amigo también era el chico que le atraía.

Un día gracias a la ausencia a clases de Daniel por estar enfermo, Aimé pudo hablar con Sebastian por un rato a solar.

Aimé realmente quería hablar a solas con Sebastian, es por eso que recurrió a Joel para que le ayudara distrayendo a Gabriela, ya que ella también estaba cerca de Sebastian todo el tiempo.

A Sebastian le pareció raro que Joel lo dejara solo, además sentía que le hacia falta la presencia de Gabriela.

-Qué tal chico solitario. -Saludó Aimé cuando estuvo cerca de Sebastian.

-Hola. -Respondió Sebastian muy seguro de él mismo, cosa que al mismo Sebastian le sorprendió bastante, incluso sonrió.

-Alguien está feliz. -Dijo Aimé sonriendo al ver la sonrisa que Sebastian había dibujado en su rostro. -Se que Daniel faltó a clases, pero hay que disimular nuestra felicidad por su ausencia.

Sebastian soltó una leve risa. Sebastian nunca se cansaría de el seco sentido del humor de Aimé. De cerca, la castaña era mas hermosa, y Sebastian estaba muy seguro de eso.

-Lo siento, no puedo evitar expresar como me siento. -Respondió bromeando haciendo referencia al comentario del Aimé.

-Me agrada que seas un chico que expresa su sentir, ya sabes, de esos que expresan sus sentimientos.

A Sebastian le pareció que aquel comentario estaba fuera de lugar y eso lo puso nervioso.

-Si... no creo que yo sea de esa clase de chicos. -Respondió nervioso.

-Me parece que si lo eres. -Insistió Aimé.

Aunque no lo pareciera Aimé estaba igual o más nerviosa de lo que Sebastian lo estaba. Ese chico aunque no lo pareciera, la ponía nerviosa siempre que sus miradas se cruzaban. Para Aimé los ojos de Sebastian eran tan lindos como el mismo cielo.

Ambos chicos se habían quedado en silencio sin saber que decir, hasta que la castaña se aclaró la garganta llamando la atención de Sebastian.

-En fin... Lo estuve pensando durante días, y bueno sólo quería decirte que me...

Aimé se quedó con la palabra en la boca después de ver como Gabriela se acercaba sonriendo hacia Sebastian. Pero eso no fue lo que hizo que Aimé dejara de hablar. Lo que hizo que se congelara fue ver el beso que Gabriela le dio a Sebastian. No era un beso de amigos, era un beso de esos que te dicen lo comprometido que estás con una persona.

Un beso en los labios.

Joel venia casi corriendo detrás de Gabriela, pero realmente ya era bastante tarde. Por más que Joel quisiera ayudar a Aimé, Gabriela ya había arruinado el momento de la castaña.

Sebastian se sintió nervioso después de aquel beso que Gabriela le había dado frente a la chica que le gustaba.

-Perdón por interrumpir. -Se disculpó Gabriela sonriendo. -Pero sentía que no podía estar más tiempo separada de mi novio.

Gabriela soltó una leve risa al pronuncias la palabra novio.

Aimé abrió los ojos al escuchar la impactante noticia. ¿Sebastian y Gabriela eran novios? ¿Cuándo había pasado eso?

-¿Son novios? -Preguntó Joel igual de sorprendido que Aimé.

-Claro que si. -Gabriela respondió bastante obvia. -Queríamos mantener esto en secreto unos días más.

A Joel le sorprendió que su mejor amigo no le contara sobre su nueva pareja. Aunque Sebastian no le había contado nada a Joel sobre su atracción con Aimé, Joel ya sabía de aquel sentimiento, y le constaba que ese sentimiento era correspondido por Aimé.

Aimé había conversado con Joel sobre su atracción hacia Sebastian, por eso Joel accedió a ayudar a Aimé para que pudiera hablar con Sebastian a solas, pero las cosas no salieron del todo bien.

-Felicidades.

Aquella triste palabra fue lo único que pudo decir Aimé, sólo intentó sonar tranquila y normal para que al menos Sebastian y Gabriela sintieran que la palabra felicidades, era sincera.

Y vaya que la actuación de Aimé funcionó, ya que Sebastian creyó sincera aquella palabra y eso hizo que se le rompiera el corazón.

Sebastian lo había arruinado todo con sus malas desiciones.