Mi corazón volvió a su ritmo normal, el colorado de mi rostro juraría que también por que no arden mis mejillas. Moví mi cara en negación muchas veces para olvidar lo que sucedió, no tengo permitido sentir vergüenza, me niego a sentirla frente a él.
Camine hacia mi tocador, me veía horrible. Mi cabello húmedo y echo un nido.
Por dios Olivia que son esas ojeras, más oscuras no pueden ser
No tenia caso estoy bien fea. Igual no tenía a nadie quien impresionar asique para que hacer problema.
Borre todo pensamiento en Ethan.
Pero qué horror.
la próxima vez me juro que tendré mas cuidado.
Recuerda idiota ya no vivo solo con mi mama sino con un tipo de mi edad que se podría no considerar mujer y dos amantes homosexuales.
RECUERDALO
Me coloque unos jeans y una simple blusa después de todo Sara me prestaría un poco de ropa para esta noche, aunque pensándolo bien así me veo bien para esta noche ¿no?
En mi cara ya no había mas remedio que humectarla y usar un sutil maquillaje , lo suficiente como para tapar mi ojeras y un poco de brillo labial.
El timbre sonó.
¿Ya serán las 22? Comprobé la hora en mi celular y definitivamente lo era. Que puntual es Adam.
Salí de mi habitación después de ponerme mis pantuflas, encontrándome con una escena que esperaba evitar.
La cara de Adam era indescriptible, sus ojos estaban más abiertos de lo que una persona normal pudiera hacerlo.
Como podía hacer eso.
Su mandíbula casi llega al piso mirando a la pulga.
Ha si era descriptible.
Y este lo miraba arrugando su entrecejo.
Adam salió de su nube parpadeando.
- ehh... perdón seguro me equivoque de casa - estaba por marcharse hasta que lo hablé.
- Adam aquí estoy, pasa -
Camine hacia ellos lanzándole una mirada de rabia a Ethan para que se retirara y así lo hizo.
Hice un movimiento de cabeza al rubio para que me siguiera. Y así al cerrar la puerta de mi dormitorio la bomba de preguntas empezó.
-Por que no me dijiste que vivías con él, acaso es tu hermano , que relación tienen - soltó un chillido - hay pero que hermoso es - sonrió, dando pequeños saltitos.
Rodé los ojos impacientándome, el motivo era Ethan.
Por favor no podríamos hablar de alguien mas, aun no terminaba de superar lo que paso hace menos de una hora en el baño y volvemos a pensar en ese idiota.
Que le miraba al idiota ese.
- vendré a tu casa más seguido - afirmó.
- No, Adam ¿qué dices?-
- ¿que que digo?, ¿acaso no viste el lobo feroz que vive contigo?- apunta hacia afuera - como quisiera ser su caperucita para que me comiera - abrió la boca como si pegara un mordisco acompañado de un gruñido, si eso era sexi pues lo logro, se veía sexi hasta que caí en cuenta que sus gustos eran diferentes.
Dios podía ser malo a veces
Por que será que los chicos mas lindos sean homosexuales y entre ellos mismos salen, a nosotras la mujeres nos dejan el resto.
Borre todo pensamiento impuro y me concentre en el rubio frente a mí que seguía dando su discurso.
- como quisiera tocar todo su cuerpo con mi mano, seguro que haci conocería lo que es tocar el cielo. Tallar cada... -
- ya Adam vas hacerme vomitar - fingí una arcada.
Dejara de gustarle si le cuento que es un sucio que no limpia su habitación o que ni siquiera sabe usar el lavarropas o que no sabe que es la privacidad o que su mami le sigue revisando todas las redes sociales.
Eso si fue gracioso, mamá me lo conto todo, que chica en su sano juicio mandaría ese tipo de fotos a un bueno para nada. Nahh, mejor le dejo con la ilusión.
Salí de mi pensamientos para volver a mi realidad donde no encontré a ningún rubio.
Donde se metió ahora.
- ¿Adam? Donde estas - caminé por la habitación sin encontrarlo.
El ruido de mi celular me hizo salir de esa pequeña búsqueda.
Adam mi príncipe te acaba de mandar un mensaje.
Adam... : foto📷
Adam...: me explicas es esto 🤔
Bueno la foto estaba fuera de sí, tomada de un punto casi en el suelo teniendo como modelo la espalda de alguien desnuda. Estaba perdida, no soy buena buscando las cosas que pierdo, en algún punto siempre las encuentras tarde o temprano pero esto no era una de esas cosas que puedo perder asi nada mas sino era Adam y estaba dentro de esta casa... que no es mi terreno.
Ahh el bañoo.
Entre al baño y definitivamente ahí estaba con la puerta que daba a la habitación de Ethan entre abierta. ¿Esa era la espalda de Ethan? Tienen buen físico no hay que negarlo aunque es un idiota. Me acuclille a su nivel sin hacer ruido de por medio, si que miraba con tanta atención, ni en clases lo había visto tan concentrado. Este chico esta más perdido que cualquier chica mirando a un ídolo en concierto.
Sople en su oreja para llamar su atención, fue mala idea sorprenderlo, me dedico una mirada de asombro y de odio, me hubiera lanzado un chillido si había uno a su alcance pero seguro no quisiera llamar la atención de su orangután en su ambiente y cuando hablo de orangután hablo de ethan.
- shh - coloco un dedo sobre sus labios en señal que me callara mientras volvía su vista hacia su presa.
Es enserio, que le ve de especial al inepto esté.
Resignada esperando a que acabara me arriesgue ver también a lo que espiaba con tanto amor.
Si. Sus ojos estaban que arden de fuego.
Coloque mi cabeza encima de la cabeza de Adam y... vaya que linda vista, no me quejo tiene lindo trasero.
Ethan se paseaba de un lado a otro en bóxer buscando algo conclui. En la foto estaba sin camisa y ahora los pantalones desparecieron, espero que no desaparezca lo que le tapa su aparato reproductor porque si no, tendría un rubio mas hambriento que cualquier otro animal en celo.
Dios te lo ruego no permitas que eso suce…
Ahora también yo no podía quitar la mirada, enserio sí que atraía.
¿Alguien más siente calor?¿ me estoy sofocando ufffff.
Eche un vistazo a mi amigo rubio, apretaba su labio inferior con sus dientes con deseo o vaya no era la única que sufría de hiperventilación aquí.
Los ojos de Adam se abrieron con sorpresa, antes de entender por qué, este retrocedió tirándome al suelo cayendo juntos. Si no queríamos llamar la atención ahora sí que lo hacíamos.
Ethan nos miraba levantando una ceja con sus brazos entre cruzados preguntándose que rayos hacíamos ahí.
Obviamente no tendría explicación, estábamos espiándote mientras recorrías tu habitación prácticamente desnuda.
Nahh eso no lo diría. Demasiado ego le dejaría
El silencio nos desbordo, nosotros dos en el suelo tragando saliva costosamente y Ethan mirándonos. En qué momento se coloco otra vez el pantalón.
No era momento para pensar eso