Un Deseo de Navidad

Me Cumplirías un Deseo?

Yo nunca he desobedecido las normas ni las reglas, pero desde que Yara me encontró estudiando la interacción de una mujer con un hombre, toda mi rectitud y buena fe se fueron a un volcán.

La he llevado de paseo por varias dimensiones incluyendo terral donde está su hogar, al pobre Zlatan le pintaron el cabello de azul chicle, por un día, le pusieron esmutin a Vera en la cama, unos animalitos que les gusta el calor, las noches son frías y se pegaron al cuerpo de la pobre tan rápido que costo despegarlos, son pequeños, peludos e inofensivos pero tienen ventosas en sus dedito y se pegan tan fuerte que deja morados, Vera tenia pequeñas marcas por todas parte incluyendo su cara.

Nunca habia sido castigodo y ya van dos desde que ese pequeño demonio me arrastra con ella, ultimamente ya ni ha usado su chantaje de acusarme, creo que ya me lavo el cerebro y solo la sigo como un idiota.

Hoy he decidido quedarme en mi casa, nunca en mi vida había tenido que limpiar un comedor, pero debido a las travesura de ese par de Nathalie y Yara he tenido que pagar sus castigos.

-Hijo no te vinieron a visitar.- Me anuncia mi madre, me levanto y salgo de mi cuarto. Nathalie esta parada en medio de la sala con cara de preocupación.

-Hola Jair espero no molestarte?- Me dice con una sonrisa tímida cosa que me extraña más. Ella tiene por costumbre llamarme Jota.

-Estas bien Nathalie te veo preocupada.- Ella asiente.

-Lo estoy, no he visto a Yara desde que salió esta mañana y pensé que estaba contigo, pero tu mami me dice que no ha venido.- Me extraña eso. Ellas dos son inseparables.

-Crees que le paso algo?- Ella asiente y me acerco a subir su cara para que me vea a los ojos.

-Cuéntame que pasa Nathalie?-

-Ella estaba triste pero cuando le pregunte me dijo que nada y salió sin darme cuenta, estoy preocupada, ella estaba deprimida y no sé cómo ayudarla.- Veo lágrimas en sus ojos y entiendo que no es una broma.

-Vamos la encontraremos.

Llevamos una hora buscando en la ciudad cuando decidimos ir por los alrededores, decidí ir al lugar donde los conocimos.

La encontramos sentada en una roca tirando piedras hacia el rio se ve triste, me acerco y me siento a su lado y Nathalie del otro lado.

-Crees que mi madre me vea desde el cielo?- No sé qué contestar.

-Yo creo que si.- Le asegura Nathalie.

-Qué crees tú?- Ella me frunce el cejo y luego suspira.

-Ella nunca me cuido, me dejaba sola por días, cuando supe cocinar empezó a dejarme sola por semanas y cuando llegue a la adolescencia casi ni la veía.- Su tristeza es muy transparente.

-Eso es malo.- Está en desacuerdo Nathalie.

-Y porque se iba tanto tiempo?- Me extrañaba una madre siempre cuida a sus hijos.

-No lo sé, creo que era prostituta, pero nunca traía hombres a la casa.- La expresión me es conocida.

-Que hace una prostituta?- Ella me mira extrañada.

-Una mujer que vende su cuerpo a cambio de dinero.- dice con vergüenza.

-Pertenecería a la raza de Gaishe?- Frunce el ceño y me mira.

-Es una raza sexual, necesitan el sexo para alimentarse.

-No lo creo, ella era humana o yo necesitaría el sexo también.-

-No si no has madurado, ellas tienen una edad para comenzar a necesitar alimentarse.-

-Claro, un bebe no podría tener sexo.- Observa Nathalie.

-Qué te pasa Yara?-

-Es por la navidad.- Suspira con tristeza.

--Eso no es la celebración sin sentido de terral.- Ella me mira con los ojos humedecidos.

-Eres una bestia J, para nosotros tiene sentido.-

-Bueno.- Le digo con las manos hacia arriba para que no me ataquen, pueden ser salvajes si se lo proponen.

-Era la única época que estábamos juntas, no importaba cuanto tiempo hubiera estado afuera ella llegaba para navidad y ahora no lo voy a celebrar.-

-Ella ya no está así que es mejor así, no?- Ambas me caen encima y me pegan en la cabeza con sus nudillos.

-YAAA!! Perdón.- Se separan de mí dejándome todo desarreglado.

-Quiero navidad J, por favor.- La miro confundido no sé qué puedo hacer yo.

-Bueno dile a Sisi que quieres ir a terral y celebrarlo.- Ella niega con la cabeza y lágrimas corren por sus mejillas.

-Me cumplirías un deseo J?- No le podría negar nada, ella que cuando lo perdió todo fue fuerte para consolar a otros.

-Si está en mis manos.- Ella me sonríe brillantemente.

-Tráeme la navidad.- Su sonrisa es hermosa pero yo de navidad no sé nada.

-Yara eso es un poco difícil.- Entrecierra sus ojos y se pone seria.

-Te reto elemental, tu que te crees superior podrás con algo tan sencillo.- Se levanta dejándome con los pensamientos revueltos, esa pequeña demonio me está retando de manera burlesca.

Fui a terral y averigüe todo de la bendita navidad y con ayuda de los descendientes he organizado todo, me lleve a Daniel y Elenara para que me ayudaran y aunque a mí me parece horrible todos ellos se han divertido, incluso trajeron para preparar comida de terral.

Pedí a Nathalie y a Sisi que distrajeran a Yara pero ya es hora de la sorpresa.

-Diablos me voy a caer, porque las lucecitas esa no se han prendido.- La escucho quejarse, aplaudo y las luces mágicas se enciende por todas partes ella está en el medio mirando con sus ojos abiertos y la boca formando una perfecta O.



#1235 en Fantasía
#197 en Magia
#146 en Paranormal

En el texto hay: magia, amor adolescente, deseo de navidad

Editado: 17.11.2018

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.