Capítulo 37

—El clan Asha debe llevar mucho tiempo buscando para encontrar el  cofre y el pergamino -comenta Edgar pensativo. 

—La llave es lo único que le falta -contesta Leonardo. Su tío Eugenio le había encomendado una gran responsabilidad.

—Y no la va a tener -dice Alex con seguridad. 

—Debemos evitarlo -responde Patrick.

—Debes reforzar el sello donde se encuentra la llave -le dice Román a Leonardo.

—Yo apenas he despertado mi poder, no sé controlarlo por completo. Soy un pricipante. Debes hacerlo tú -señala a Alex. Él era un hechicero sanador, pero también guardián, era perfecto para crear escudos protectores como el que posee el edificio.

—Yo tampoco sé que sello es -responde Alex.

—Sigue leyendo, aquí debe estar todas las instrucciones -le comenta Edgar.

—Ayudaremos en lo que necesites -dice Román.

—¡Muchas gracias! -contesta Leonardo alegre. Estaba feliz de contar con apoyo durante esa difícil misión.

  Al continuar leyendo pudo notar que su tío dejó todo listo para él. El plan estaba bien detallado para él.

—El 19 de octubre se vence el sello.

—Esa es la fecha que está marcada en el calendario de la pared -comenta Karina.

—Antes de ese día hay que estar preparados para reforzar el sello -dice Patrick.

—Según dice mi tío en el diario de memorias se debe esperar 2 días antes que se venza el sello para reforzarlo -contesta Leonardo. 

—Estamos a 3 de octubre -dice Naim quien se había mantenido callado igual que los demás espíritus familiares. Se encontraban sobre la cama de Azur.

—Debes prepararte para el 17 de octubre reforzar el sello -señala Alex.

—¿Estaré listo para esa fecha? -pregunta Leonardo preocupado.

—Si te esfuerzas sí -dice Maribel.

—Mi tío me dejó un regalo en el depósito. Aquí está el encantamiento para abrir el estuche gris.

—¿Estuche gris? Me recuerda algo -dice Román pensando.

—¿No es ese que no pudimos abrir? -pregunta Maribel sobre el día que Leonardo, Román, Edgar y ella revisaron el depósito de Eugenio.

—Cierto, ya tengo curiosidad de ver que es -Edgar estaba muy emocionado.

—El regalo es para Leonardo, no para ti -le comenta Román observándolo.

—Pero igual quiero verlo. Debe ser algo interesante. 

—Eugenio tenía muchos secretos -dice Karina con una sonrisa.

  Todos fueron hasta el depósito, la curiosidad les ganó. Leonardo abrió la puerta y salió con el misterioso estuche gris alargado.

—¡Abrelo! -dice Maribel.

 Patrick lee el encantamiento y el estuche desaparece por completo y sobre las manos de Leonardo aparece un báculo gris con una joya roja.

—Es un báculo -comenta Edgar asombrado.
  Alrededor del báculo había un papel enrollado.

  Leonardo leyó en voz alta —Esté báculo posee parte de mi magia guardada. Úsalo para reforzar el sello. Tu querido tío Eugenio.

—Es perfecto. Esto te ayudará mucho ya que no posees mucho control de tu magia -le dice Patrick.

—Eugenio pensó en todo -dice Román sorprendido.

—Como protector de una importante reliquia debe estar preparado -contesta Alex.

  Regresaron al apartamento de Leonardo. Pasaron toda la noche y madrugada leyendo y comentando los planes.

—No hemos dormido nada. Estoy agotada -dice Maribel bostezando.

—Ya deberíamos irnos a dormir. Nos encontraremos después -asintió Patrick.

  Román, Maribel y Patrick fueron a buscar a sus espíritus familiares y los encontraron en la gran cama de Azur. Estaban durmiendo Beilla, Katia, Naim y Azur, todos estaban juntos enrollados como si fueran hermanos.

  Román se acercó a Leonardo en voz baja —Te dejo a Beilla aquí. Cuando despierte me la envías a mi apartamento. No quiero despertarla.

—Yo también. Naim sabe regresar al apartamento cuando quiera -dice Patrick susurrando. 

—Me cuidas a Katia -comenta Maribel y le guiña un ojo.

  Todos se fueron a sus apartamentos a dormir y descansar. Leonardo y Karina quedaron solos.

—No esperaba que el lugar donde me vine a ocultar sería el que me dijera toda la información que necesitaba -dice Karina asimilando la situación.

—Yo no esperaba que el edificio donde me mudé sería para seres sobrenaturales y mágicos. Mi vida cambió tanto -responde Leonardo recordando su pasado como algo muy lejano.