♫Capítulo 26♫

—Déjame en paz, Saúl —dije. 

—No, Emma, necesito que vuelvas conmigo —insistió.

—Deja de hacerte sufrir solo, tienes que dejarme ir para siempre, déjame vivir una vida en paz, solo te pido eso.

Los guardias estaban atentos por si Saúl hacía algo. 

—Es que te necesito, quiero que vuelvas —insistió. 

—No es lo que necesitas, Saúl, lo que necesitas es irte de aquí y dejarme en paz —dije.

—No lo haré, Emma, lo siento pero tienes que volver conmigo.

En ese momento llegó la mamá de Ana y se detuvo en la esquina de la escuela, así que con ayuda de los guardias llegamos al carro. 

—No puede ser que se rebaje de ese modo —dije. 

—Te aseguro que no te molestará nunca más —dijo Ana.

—Perdón por llegar tarde, es que estaba cuidando al papá de Ana —dijo la mamá de Ana. 

—No se preocupe, gracias por llegar, por un momento pensé que Saúl haría algo —dije. 

Miré por la ventana y me sentí muy mal porque Saúl no me dejaba ser feliz y no me dejaba ir por las buenas, estaba totalmente aferrado a mí y eso era muy molesto y agotador. Él quería que volviera con él a las fuerzas pero yo no quería, me iba a volver a tratar mal y yo no quería esa vida de nuevo. 

—No puede ser —dijo Ana.

Le estaban marcando y cuando vio la pantalla contestó de inmediato. 

—Hola, chicos —saludó. 

Guardó silencio. 

—¿Es algo malo? —preguntó Ana. 

Volvió a guardar silencio. 

—¿Ahora? —preguntó. 

Volvió a guardar silencio. 

—Vamos para allá, gracias, chicos —dijo y colgó. 

—¿Qué pasó? —pregunté. 

—La disquera quiere hablar con nosotras, así que hay que ir ahora mismo a la empresa —dijo. 

—Las llevo, chicas, no se preocupen —dijo la mamá de Ana. 

Miré por la ventana y el aire hacía que mi cabello volara por todas partes.

Cada lugar de México me recordaba a mi infancia y a mi juventud. Recordaba cuando caminaba por las calles o me iba con mis amigos a los centros comerciales o a cualquier lugar. Los recuerdos volaban en mi cabeza y me dolían de cierta forma, ya que todos eran de mi papá y del sufrimiento que me tomó olvidarlo.

Recordé la noticia que me dieron de los premios, eso me hizo aprender una lección, que es importante salir adelante como sea. Leondre me enseñó eso cuando lo fui conociendo. 

Recordé que el amor siempre lo cura todo, alguna marca del pasado siempre se cura con el amor de las personas hacia ti, son un motor increíble para continuar y no rendirte. En mi caso, el camino fue muy largo y complicado porque me tocó sufrir demasiado pero el amor me salvó. 

El pasado quería tener un encuentro conmigo pero yo no quería dejarlo entrar, no quería ponerme triste, así que decidí olvidar y enterrar los recuerdos en el fondo de mi corazón y seguir adelante. Mi papá hubiera querido eso, sobre todo que siguiéramos unidos y lo cumplí. 

Llegamos a la disquera y entramos, la mamá de Ana iba a esperar afuera mientras nosotras veíamos al director de la empresa.

Subimos a los últimos pisos y nos detuvimos en la oficina del director. Tocamos la puerta y él nos dejó entrar. 

—Hola, director, ya estamos aquí —dijo Ana. 

—Hola, Ana, las mandé a llamar porque necesito preguntarles algo y platicar con ustedes de un tema muy importante —dijo. 

—Claro —dijo Ana. 

El director nos dio la indicación de sentarnos y lo hicimos. 

—Me enteré que tienes planes en Londres, pero creo que en esos planes no estamos nosotros —dijo. 

Guardó silencio y siguió. 

—¿Vas a quedarte en Londres definitivamente? —preguntó. 

Ya no tenía más que pensar, ya estaba decidida. 

—Sí, ahí es mi nuevo hogar —respondí. 

—Como sabrás, ya no podemos representarte porque la distancia es muy larga y muy tardada, así que llegué a un acuerdo con una disquera reconocida para jóvenes en Londres —dijo el director. 

Era una gran oportunidad. 

—«Division of Universal Music GmbH», la cual está representada por «Better Now Records», es muy reconocida en Londres y es una empresa más grande que la nuestra —dijo.

Conocía esa disquera porque ahí había varios artistas que me gustaban.

—Hablé con ellos esta mañana y si te quedas, pues ellos te quieren dentro del equipo, no cambiarías de mánager, solo si ustedes lo deciden —dijo. 

Definitivamente era una gran oportunidad. 

—Ana me contó que tienes una colaboración con Alan Walker, esta será nuestra última representación para ti —dijo—. Ya hablamos con ellos y en un mes tendrás que ir a Noruega a grabar la canción y el video, él la publicará en su canal y tú vas a promocionarla en tus redes sociales.