Richard sintió su mundo caer a pedazos, lo más terrible de la situacion no era que su hija estuviera en custodia del estado, sino que legalmente él no podía hacer nada. Tiempo después del acuerdo en el cual el había quedado con su ex en que cada uno tendría un hijo, se enteró de que ella lo había puesto, afirma un papel donde él le cedía todos los derechos de la menor.
—Mi vida es una pesadilla —exclamo derrotado, Clare no comprendía lo que sucedía, pero algo estaba muy claro para ella y era que esa niña no la apartarían de su lado.
—Les doy 5 minutos para que se despidan de la menor —sentencio el uniformado acompañado por dos empleados de servicio social, los cuales tienen un poco de confusión ante el comportamiento de la niña, sin embargo, están ansiosos por ayudar.
—Gracias —Richard se acerca su hija, la cual no había tenido la oportunidad de abrazar desde que tenía 2 añitos, estaba grande y hermosa, dejo caer algunas lágrimas sin miedo al que dirán, su vida nunca había sido fácil, sin embargo, los últimos años eran los peores.
—Te amo hija y lucharé por ti, lo prometo —dicen que la sangre llama y no hay duda de lo cierto de esta frase cuando Abby con tan solo 5 años se lanzó a sus brazos envolviendo en un calor sin igual.
El reencontrado padre, dejo brotar algunas lágrimas, la cual Abby limpio miro a su maestra y también la abrazo.
—Yo quería que tú fueras mi mami —los de servicio social miraban la escena haciendo que sus cerebros trabajaran a toda velocidad, miraron los dos adultos, los cuales se miraron, ella se ruborizó mientras él se puso pálido, al parecer alguna idea no tan descabellada, paso por su mente.
—Les daré un consejo más valioso que el oro si de verdad aman a esta niña y ambos están solteros, contraigan matrimonio y adóptenla porque si deciden pelear con el estado perderán un valioso tiempo, recuerden que pronto será navidad y ningún niño merece pasarlo en un hogar de acogida —los dos adultos se miraron con asombro más no respondieron nada.
—Ella es mi hija biológica, pero no tengo derechos legales para con ella si los pido me los darán su madre la abandono —quiso obviar el consejo.
—Papá, tú querías un milagro en navidad y este es —Zion miro a su padre el cual estaba en silencio viendo a su hija partir con las autoridades competentes.
Los que ningunos de ellos sabía era que Eva y Elianny necesitaban que su madre se casara antes de navidad y ya sabían quien sería su cómplice, solamente era cuestión de un buen plan y la magia de la navidad haría el resto.
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Editado: 18.12.2021