V
Ya tengo listo mis cosas y Ana sigue durmiendo – parece en coma – me da risa verla pero debo regresar hoy y prepararme para mis clases, le dejo una nota al lado de la cabecera y le doy un beso en la frente, cuando voy bajando al comedor me encuentro con José y Alan saliendo del despacho, en el comedor están todos menos Ana y la señora Sofia – esas dos se dan la mano – sigue dándome risa cuando llego toda colorada por el beso que le dio José, nunca lo va admitir pero ella se muere por él, sigo en mis pensamientos y no pongo atención a la conversación que tienen en la mesa, la verdad, me siento incomoda con las miradas que me da Frank, Alan y José.
- Elena, me gustaría que fueras con mi esposa a Italia para ver unos negocios que me tienen pensativo y aprovechas para ganar experiencia– me dice el señor Alan
- Claro me encantaría, pero, ¿cuándo seria eso?
- Mañana, la idea es que solucionen eso rápido
- Muchas gracias, pero no puedo ir yo tengo cosas que hacer de la universidad, es más, yo les doy las gracias por la cena y la atención, pero me tengo que retirar.
- ¿Pero porque tan rápido? no pudimos hablar de la fundación – me dice Karen
- En dos días inicio mi clase vacacional y debo estar lista, pero podemos reunirnos el fin de semana para hablar de las ayudas – ella me dice que esta bien y me da un abrazo de despedida
- Déjame yo te llevo – me dice José
- No – dice Frank y todos lo voltean a ver – yo la llevo de paso me sirve porque tengo una reunión mas tarde
- No es nece…
- Perfecto – me interrumpe el señor Alan – por favor asegúrate en dejarla en el departamento
pasa alrededor de una hora para que salgamos de la propiedad, ya en el carro no digo nada de nada, la verdad espero que el viaje sea de esta manera, me encuentro viendo por la ventana cuando comienza a nevar otra vez, me quedo dormida y cuando despierto vamos entrando a la ciudad, pero el camino no es a mi departamento.
- A donde ..
- Vamos hablar Elena – me mira de reojo – te llevo a mi departamento porque necesitamos aclarar algunas cosas
No tengo de otra que salir de esto, ya voy sabiendo que con él no hay forma de prolongar las cosas y menos evitar, llegamos a un edificio muy hermoso de 10 pisos, pero se ven dúplex, estaciona el auto, mientras sale y da la vuelta para abrirme, yo pienso en salir corriendo apenas pueda. Salgo de mala gana y aparento estar molesta, porque por dentro estoy nerviosa, subimos al último piso y en completo silencio – si es un dúplex – es bastante grande, los muebles son de color gris con cojines azul cielo, tiene varias decoraciones de mitología y eso me impresiona muchísimo, los ventanales son de techo a piso, me acerco y el panorama es impresionante - desearía despertar siempre con una vista así – mientras yo estoy perdida con el paisaje, mi mente viaja a la ultima nevada que viví con mi madre.
Ese día estaba jugando en la parte de atrás de la mansión con los hijos de los empleados que vivían en esa época en la casa de visitas, mi mamá nos llama para tomar chocolate con pan de azúcar, ella sonreía y le brillaban los ojos.
- Cuando terminen van a jugar en la habitación al lado de la sala
- Si mami, ¿podemos entrar nieve? – todos le hacemos ojitos, pero no funcionaba con ella
- No, la nieve acá no durara, pero mañana pueden jugar con ella en el día – nos dice con una de sus hermosas sonrisas
Todos decimos que sí, vamos a jugar al salón como dijo ella, pero entra mi papá de la mano de esa mujer otra vez, en ese momento no sabía lo que ocurriría y jamás imagine que sería la última noche que pasaría con mamá
- Elena – me sacuden del hombro - ¿estas bien?
- Si, perdón no escuche cuando me llamaba – me giro para ver que tiene bebida caliente y golosinas ya servidas – ¿Qué quería preguntarme?
- Siéntate – me acomodo al lado de la chimenea y él en la poltrona de al lado – quiero que me digas, quien eres realmente – lo miro sin entender – veras Elena yo lo único que quiero es mantener la seguridad de mi familia y de las empresas
- Yo no he sido doble en este tiempo que llevo compartiendo con su familia, es verdad que tengo secretos, pero esos no van afectarlos en nada - le digo molesta por como aborda las cosas
- Entonces dígame ¿Quién es? – me pasa una carpeta, esta contiene información personal, fotos, direcciones, nombres de las personas que me ayudan con la investigación de mi padre – no hay información de su nacimiento, estudios y viviendas anteriores de dos años, le repito nuevamente ¿Quién es?
- Me sorprende que tenga el descaro de decirme esto, cuando usted me investigo, estas fotos me las tomaron hace poco – le coloco los papeles en la mesa y lo miro enojada - ¿puso gente a seguirme?
- Solo respóndame
- Siga investigando a ver si encuentra algo – me levanto para irme, pero me detiene
- Le estoy preguntando primero a usted
- No – me suelto de su agarre – usted se encontró con una pared y la única puerta que ve esta al frente de usted, si tanto quería saber de mí, debió preguntarme o a José
- Le pregunte a José, pero no me quiso decir nada, yo – suspira pesado y pone sus manos en la cintura – quiero saber que tan malo fue tu pasado como para ocultarlo y .. – se queda callado
- mis marcas verdad – suspiro cansada - Claro, curiosidad y lastima no son una buena combinación – me dirijo hacia la puerta – y sabe que Frank – me giro antes de irme por completo – las cicatrices que tengo en la espalda no son nada con las que llevo en mi interior, puede usted seguir investigando por morbo o como prefiera llamarle, pero no va a conseguir nada, porque de eso me encargue personalmente – me giro para irme definitivamente
- ¿Por qué esconderse?
- Es mejor volver a empezar cuando todo fue consumido por el fuego – le digo luego de un rato y mirándolo a los ojos