Capítulo 17

Miré hacia delante en busca de ayuda, alguien o cualquier luz que me dijera que ahí había gente. Caminando y caminando con aquel frío conseguí llegar hasta un pequeño pueblo....o ¿barrio? No sabía exactamente lo que era, pero nunca pensé que un lugar para vivir tan pequeño fuera posible. Justo a la entrada de este pude ver una especie de gasolinera....¿pero eso todavía existe? Supongo que para la clase baja sigue siendo así.

Me fui acercando hasta el lugar.

- ¡Oye, señorita! Llene mi tanque con esa gasolina.

- ¡Ahora mismo señor! - dijo la trabajadora.

Wow....realmente sigue existiendo este tipo de servicios.

No sé en qué momento aquellos dos comenzaron a discutir. Parecía que se iban a pegar ¿Nadie iba a pararlos? Aunque bueno....tampoco había nadie al rededor. No quería meterme, así que simplemente me dediqué a observar a lo lejos hasta que terminaran y yo poder ser atendido.

- ¡La hoja de reclamaciones! ¿¡Y el encargado!? - comenzó a gritar el.

- Ahora mismo está ausente, pero pronto llegará.

- ¿¡Como te vas a encargar de esto!? ¿¡Lo pagarás tu verdad!?

- No puedo encargarme de esto señor - respondió ella.

- ¿¡Y quién lo hará!? Tranquilo bebé, papá lo solucionará - dijo hablándole a su coche, yo también lo hacía. Seguro era un señor con clase - ¿¡Como te llamas mocosa!?

- Alina, Alina Vell.

Espera....ese nombre y esa voz me suenan....

- ¿Le habéis dado una beca a una pobre? - dijo Seungmin.

- ¿La de la patada en tu entrepierna? - respondió Changbin.

- Si.... – suspiró.

- ¿Como se llama? ¡Creo que soy su fan número 1! - gritó Han

- Mmm....¿Amina?¿Amanda? ¿Alicia? No lo sé.... – intentó recordar Hyunjin

- Déjalo, ya sabemos que tienes la cabeza para decorar - reí desencadenando una guerra.

¿Podría ser esa chica? El nombre se parece a los que dijo Hyunjin....y esa voz....

- ¡Mas te vale que esto se solucione! ¡POR QUE TE JURO QUE ARRUINARÉ TU VIDA SI MI COCHE SE ROMPE!

Aquí es cuando ella explotó.

- ¡No es mi problema que usted se haya equivocado!

Si....esos gritos, definitivamente era ella.

- ¡Por tu culpa mi coche tiene gasolina de mala calidad!

- ¡Usted vino a este lugar en medio de un pueblo con recursos bajos!

- ¿¡Me estás diciendo que cometí dos errores!?

- ¡SI! – es valiente la chica.

Rápidamente, el hombre la agarró del cuello de la camisa. Echó su mano abierta hacia atrás y ella cerró los ojos.

No sé en qué momento, mis piernas reaccionaron por si solas y corrieron hasta él.

- No le conviene hacer eso señor - dije mientras paraba su mano a centímetros de la cara de ella.

La chica me miró sorprendida, sin saber cómo reaccionar.

- Usted parece de los míos, de clase alta, ¿va a perder los estribos por una simple plebeya? No creo que merezca la pena aparecer en las noticias por agredir a una empleada. Lo digo por experiencia. - referencia a lo que le pasó a Hyunjin - Solo admita su error y váyase. Si no lo hace, las cámaras de seguridad demostrarán que usted estaba en lo erróneo y saldrá perdiendo.

- ¿¡Y quién eres tú!? - dijo un poco confundido y molesto mientras bajaba su mano.

- Soy Lee Minho, hijo de Lee YeongMin, CEO de Yuet.

- L....L....¿¡YeongMin!? ....¡Ahora te reconozco! Eres el pequeño Minho - rápidamente me estrechó la mano agitándola demasiadas veces - ¡Hice algunos trabajos con tu padre en el pasado! Una pena que ya no me contacte, pero puedes hablarle de mi para volver a hacer negocios.

- Por supuesto señor.

- Wow, es increíble como has crecido, estás grande, fuerte y guapo, tu padre tiene que estar muy orgulloso de ti - se giró hacia la chica y se disculpó - lo siento señorita, no volverá a pasar.

Ella asintió con la cabeza aceptando sus disculpas sin saber muy bien que estaba pasando.

Poco después, el hombre se alejó en su coche.

Yo la miré a ella de arriba a abajo.

- G....gracias por eso - dijo aún perpleja por lo que había pasado - ¡Tengo que volver a trabajar!

Yo sonreí de lado.

- La fuerte y gritona chica ha tenido que ser salvada.

- Tch - dijo con un poco de molestia - aquí no puedo pegar a nadie.

- ¿Por qué no? En la UWK no tienes problema de hacerlo.

- Porque esto me da de comer. Vosotros no. Tengo que mantener el trabajo.

- Alina perdió contra un señor - la molesté un poco.

- ¿Como sabes mi nombre?

- Se lo dijiste a esa escoria. – solté.

- ¿Escoria? Hasta hace poco hablabais de volver a trabajar junto a tu padre.

- ¡Solo eran formalidades!, aquel hombre solo es un estafador que perdió su oportunidad en una empresa de las grandes.

- ¡Ah! Entiendo....

- Por cierto, necesito tu ayuda - dije sin más.

Ella se giró y me miró asombrada.

- ¿M....mi ayuda?

- Trabajas en la gasolinera ¿no? - dije señalando su uniforme.

- ¡Si claro! - respondió avergonzada causándome gracia.

- Mi coche se quedó sin gasolina en lo alto de aquella cuesta. ¿Podrías darme un poco?

- ¿Estás seguro? Es de "mala calidad" - dijo arqueando una ceja.

- Es la única opción que tengo - suspiré.

- Luego no me la vayas a liar como aquel señor! - comentó mientras iba a por un bidón para rellenar de gasolina.

Minutos después, luchábamos con una gran tormenta de lluvia.

Hasta aquí el capítulo de hoy ¡Espero que lo hayáis disfrutado muchísimo!

¡Muchas gracias por todo el apoyo! ¡Nos vemos en otras historias!

AUTORA DE: Kaori, la esfera mágica.

EDITORIAL: Ediciones Arcanas.

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