Un pequeño secreto

Que ganas más grandes las de poder estar en medio de la nada, en un campo lleno de flores, el poder sentir el viento en el rostro y por sobre todo sentir esa libertad , esa libertad de salir corriendo hacia cualquier lugar, el poder liberar esas ganas de querer escapar para no volver .

Que ganas de sentir ese sentimiento de poder gritar a los cuatro vientos y saber que eres libre, que nadie te mirará feo, nadie estará ahí para juzgarte o hacerte llorar. Sentir esa soledad que reconforta, que te hace pensar y te hace quererte, te hace desahogarte y sentir que renaces.

y querer cumplir ese deseo de escapar, de correr, de ser libre, por aunque sea por un rato para así luego poder volver y sentirse recuperado, sentirse mejor.

Creo que coincido con más de uno al decir que estos días han sido catastróficos y que cada vez son más difíciles de sobre llevar. Que rabia da el sentirse tan vencido, sentirse tan roto y dañado, que angustiante se siente el tener que pensar que no hay a donde correr y que tú solo debes de poder impulsarte para salir a delante, no importa lo cansado que estes, no importa si no tienes motivos para levantarte, solo sabes que debes hacerlo.

Así me siento, desesperanzada, con ganas de llorar y votar todo este sentimiento de una vez, el querer dejar de sentirme tan quebrada.

Que ganas de poder saber qué hay algo o alguien que te ayuda a impulsarte y así levantarte, pero no, no es así, solo eres tú el que debe de tomar iniciativa y querer levantarte, luchar por lo que quieres y luchar por conseguir esa libertad de poder salir corriendo y luego tener las ganas y la fuerza de volver y vivir.

Poder ser sin cadenas sin nada que me detenga y ser feliz...

Me despido soldado... me DESPIDO hasta nuevo avisó.