Porque lo dicen las viejas historias,
porque se corren rumores de viejas amistades,
porque se dicen cuentos de cobardes,
porque así lo dicen las otras personas.
Así como una obra en el museo,
así como la canción en un concierto,
así como una ballena en el acuario
así veo yo un día, momentáneo.
Nunca he tocado tu rostro
nunca te he visto afligida
he visto ojos llorosos
y he visto mejillas rojizas,
no son lagrimas que lleven mi nombre
no son colores rojos por verme,
pequeños actos sensibles
el simple tacto de piel me confunde.
Ya has visto narcisos por el campo
ya has visto mis hortensias florecer,
mirarlas las hace embellecer,
ignorarlas las confunde, las haces nacer.
Porque de aquellos cobardes soy,
porque de esas personas soy yo,
porque de esas amistades estas tu
y porque esta vieja historia ya paso.
No hay hortensias ocultas, ni arrancadas,
solo ignoradas y renacidas quedan
y aquellos narcisos que viste y adoras
me obligan a pedir que se vayan,
hortensias que no supieron decirte,
hortensias que no supieron ganarles,
miedo de otra cobarde,
miedo de viejas amistades.