Verdadera Amistad (parte 1)

Estoy ya cambiada con ese conjunto que David me regalo el cual consta de una falda de cuero negra y una blusa blanca con lazos pequeños color negro adornándolo como diseño, los cuales combine con unos botines y pantys negras, si ya lo sé tengo algo con el color negro no me culpen.

Ya en el instituto pasan las horas y terminan las clases para así poder ir a la biblioteca que queda en el último piso para sacar el libro de Paulo Coelho llamado Once minutos trata sobre una mujer la cual fue engañada, convertida en prostituta y que después se enamora. Y oh sorpresa me encuentro en el libro una nota la cual dice: ¡sorpresa!

Al solo decir eso supe que no lo vería en el instituto y quizás fue en vano ponerme el atuendo que me regalo. Regrese muy lento hacia mi casa sin ganas de nada ya que me había decepcionado, en realidad me había desilusionado ya que tenía ganas de verlo en fin había la probabilidad de que mañana si lo vea.

Ya estaba pasos de llegar a la puerta y seguía sin señales de él, aun así, guardaba la esperanza de verlo hoy, con la cabeza agachada entre a la casa y encontré la sala vacía como casi todos los días por ello decidí que para mejorar mi ánimo un poco, comería. Estaba tan centrada en mis pensamientos que me choque con un cuerpo lo cual me resulto raro, alce la vista y ahí lo vi cocinando.

Directamente lo abracé y comencé a bombardearlo con miles de preguntas:

- ¿Por qué? ¿cómo? Y ¿qué rayos haces cocinando? -le dije muy rápido sin poder creerlo.

-Vine después de que te fuiste para la escuela porque había mucho tráfico para llegar antes, aun así, me las ingenie para sorprenderte-me sonríe y apaga la cocina para abrazarme-Y lo de entrar a tu casa pues sé que tienen la costumbre de dejar una llave de repuesto enterrada en el jardín de al lado.

-Cierto-lo dije de manera lenta ya que mi hermana mayor y yo fuimos el motivo por el cual esa llave se deja ahí-hago círculos invisibles en su espalda- uy no sabes lo que tengo para contarte, en su mayoría no son positivas pero bueno-alzo los hombros de forma desinteresada.

-Pues aquí estoy, aunque primero-se calla y me carga como princesa para sentarme encima de la mesa y comenzar a servirme lo que ha preparado-listo ahora sí, creo que mejor vas comiendo mientras yo voy contándote algunas cosas y preguntando ciertas dudas que tengo respecto a rumores- ¿rumores? ¿qué rumores? que no sea sobre Elías por favor mis dioses del Olimpo, ayúdenme- que me han llegado y después que termines me cuentas y me das explicaciones completas, ¿vale?

-Okey-lo dije en un susurro ya sabía lo que venía a continuación.

-Se puede saber ¿quién es el chico que andaba contigo de un lado al otro? -me miro acusatoria mente, Okey admito que a veces me pasaba y lo tenía pegado a Elías como chicle.

- ¿Rumores? ¿buenos o malos? -lo mire un poco miedosa ya que sé por dónde iba la conversación.

-Sí, rumores-me mira un poco serio, lo cual preocupa- así que responde.

- ¿Ahorita? -le dije con pesar y me dio una mirada de ¨hablas o te hago hablar¨ por un demonio si no fuera mi mejor amigo no me intimidaría por decirlo así-okey vale, con respecto al chico pos tiene nombre se llama Elías y digamos que es mi amigo más cercano y con el que más he salido últimamente.

-Mmm y se puede saber ¿por qué sabe dónde va la llave de emergencia y casi entra? -me mira ofendido-pensé que esa confianza solo me la dabas a mí.

-Ah eso bueno pues pelee con él, digamos-comencé a sentir otra vez molestia-por una estupidez de él, ya que intentaba o mejor dicho me celo-lo dije con molestia- un poco más y me hace una escenita ni que fuera mi mejor amigo-con eso se va olvidar de lo otro lo sé.

- ¿Qué?, me parece que si lo hace es por algo-me mira acusatoria mente-aunque ni yo te celaría.

- ¡Hey! no seas así conmigo, puede que tenga algo de culpa, pero en mi defensa fue por algo estúpido y por un chico que recién conocí-sonreí por inercia-en fin, no lo voy a perdonar tan fácil, a veces es muy infantil y controlador.

-Mmm okey, tienes un punto no tiene por qué celar te ni controlarte no es más que un simple amigo tuyo el cual solo te puede aconsejar y proteger. -lo dijo con ligera molestia, porque ni el me hace estas cosas siendo mi mejor amigo-pero he notado algo cuando has mencionado al chico por el cual te celo, has sonreído, y eso también lo ha de haber notado Elías, así que no creo que tan mal este. Deberías dejar de ser tan ingenua con la gente, sé que algo ha pasado y eso ya me lo contaras cuando creas lo conveniente.

-Eres un exagerado, enserio te vas a poner de su parte- lo dije molesta e incómoda, él había llegado recién y no pensaba pelear con el- okey puede que haya pasado algo con el chico el cual se llama John, y no fue más que un abrazo porque me puse mal nada mas-ya frustrada le di la mirada de ¨acabo el tema¨.

-Te creo, pero no te enojes-se acerca a mí y me abraza-exagerada-susurra.

¿Que has dicho? -lo dije fingiendo seriedad-haber dilo más fuerte-sabiendo que lo haría sonreí.