Elena
— Te odio querido — respondí entre risa
— Yo te amo — Grito con alegría
comencé a correr por la habitacion del hotel y no dude en reírme a carcajadas. — Intenta alcanzarme — rete
— No es estes tan segura querida
Intente saltar por encima de la cama, pero me di cuenta que la maleta estaba alado de la cama, y me tropecé caí en las sabanas, el pelirrubio paso sus manos por mi espalda y me recostó en su pecho y comenzamos a reírnos.
— Cada día eres mas loca — Añadió
— ¿Ya terminaste el libro? — pregunte
— No — negó— estoy ala mitad de el libro
— lee un poco — mande
—bien— Tomo su libro y comenzó a leer una frase de el libro— Pues porque las mujeres son como aire en movimiento, vaporosas. — baja su mano hacia mi cintura para que lo abrazara
— No cesan de ir de un lado para otro como si fueran corrientes de aire. En segundo lugar, porque las mujeres, por naturaleza, por creación, tienen poco sentido común y en consecuencia no existe freno a su malicia natural.— terminó la frase pero que no es tan corta — Eso es un poco de este libro — rio
— Ya veo — respondo
— ¿Y que haremos hoy? —Pregunto
—Nada, solo quiero estar a tu lado
— Bien
—Bien —repitió
Alas horas después, Vincent continuo su lectura. Y yo volví a leer Tan poca Vida. Uno de mis libros favoritos actualmente.
el día fue corto el junto a mi, conversamos, reímos, entre abrazos y besos. Todo fue tranquilo entre nosotros. Pero lo único que quiero en este momento es que las voces no vuelvan, pero no es tan fácil, dejar todo atrás. Mis pensamientos van a volverse pesados hasta que decide acabar con todo de una vez, intentando quitarme la vida, con una simple navaja y comenzar a cortar mi piel. Aunque no me veía así en el futuro puede ser que me equivoque nuevamente.
Y no volveré jamás a hacer la misma de hacen unos meses, jamás podría cambiar algo de mi pasado.
A lo mejor en unos meses me aleje de Vinnie, toda la vida estaré con el, Elena el nunca estará cuando te mueras a tu lado repetí mil veces en mi mente. El nunca estará cuando te mueras a tu lado.
A lo mejor si, a lo mejor no. Quiero llorar des controlablemente, sin que me pregunten una de las pregunta mas estúpida del maldito planeta, Estas bien, como odio eso.
Quisiera llorar sin que me interrumpan, odio sentir, odio este puto sentimiento. Y mis voces me dicen.
Toma cualquier cosa filosa y córtate la piel. Enserio mis pensamientos están de otro nivel. Voltee a ver a Vincent y se había quedado dormido con su libro en mano.
Obviamente se lo quito y lo coloco en la mesita de noche. Y deposito un beso fugaz en sus labios y voy a preparar la maleta.
Mañana volvíamos a Los Ángeles. Ya quería ver a mis padres y contarles que volví a ver a mi hermano y que tiene un hijo y uno en camino.
Se que no Volveré a ver a mi sobrino por un buen tiempo. Ellos viven en Paris y yo en Los Ángeles no hay manera de venir un fin de semana.
Tenía tanta ropa que no me cabía en la maleta. Eso que eran dos. Algunas cosas las hecho en mi bulto que siempre está conmigo y otras en mi maleta. En menos de dos horas termine de acomodar mi maleta.
Vincent tendría que acomodar la de el. No soy sirvienta, en cuanto termine me di una ducha de agua fría.
Al salir me coloqué una pijama color roja y negra y me acosté alado de Vinnie .
El no tardo en abrazarme Nuevamente.
Vincent es demasiado cariñoso conmigo aunque no me molesta.
— ¿En que piensas ? — me pregunta el pelirrubio
— No lo se — respondí
— Sabes.. no te creo — dijo entre dientes
— no me creas — me voltee mirado en techo.
— Mhm — pasó su mano por mi Abdomen
— Eres muy importante para mi. — susurre con nostalgia
— Diría lo mismo pero.... Eres todo para mi...—
Sonreí
— Cosas que nunca olvidaré — dije sollozando
— No llores
— No voy a llorar — mentí
— Ven aquí — intenta acércame a él
— No— negué — mucho abrazo me empalaga — mentí
— No me importa — me pego a él de una
manera que no podía ni siquiera respirar. — haber quien gana — dice riendo
— Ganarás si me dejas respirar — bromeé
Me comenzó a soltar, solo para que respira.
— No te separarás de mi — comenzó a reírse
Yo le seguí el juego y comencé a hacerle cosquillas. Entre tanta risa, casi nos morimos por quedarnos sin aire pero pasamos uno de los mejores momentos en Paris.
Estaba abrazada a Vinnie y suena un celular. Exactamente me estaban llamando, tome el celular.
Observo la pantalla y era Avani, que me estaba llamando por videollamada.
No dude en contestar. Al contestar, sus ojos estaban rojos parecía que había llorado por horas, sus ojeras eran notables. Estaba completamente rota.
— ¿Que pasó? — pregunté sorprendida
Suspiro antes de hablar.
— Termine con Anthony — dice con nostalgia
Babosa me asustas
No sabía que decirle, — lamentó eso
— no lo lamentes, el fue el culpable — su mirada estaba perdida
— ¿Quieres hablar de eso?— me separé de Vinnie