Lara Rossi
_ Mi señora están atacando el lado este de la manada, Luka se encuentra en el lugar, pero informa que son muchos y no logra contenerlos. – en ese momento siento como la sangre de mi cuerpo comienza a hervir, que estaba pasando este era el 5to ataque de la semana y apenas era jueves.
_ ¿Dónde está Ariel? – si una batalla estaba en casa mi general tenia que estar en el sitio.
_ Herida, mi señora. - escuchar eso no era bueno, no solo porque ella es mi Gamma si no por que al igual es mi hermana.
_ ¿Quién nos ataca esta vez? – yo sabia quien, solo estaba confirmando lo que ya me temía.
_ Vampiros. - esto se pondría feo
Ya de fuentes nos habían informado del porqué de tantos ataques, y aunque el enemigo no tenía la información verificada, yo sí. Sabia lo que el rey de los vampiros estaba buscando, pero no se lo dejaría tan fácil lucharía hasta el final con tal de mantener al chico a salvo. Jamás seria de el y no permitiría que eso pasara.
Sali de mi casa y poco antes de entrar a el bosque me transforme, mi loba se llama Alexa sus ojos son tan rojos como la sangre y su pelaje es negro como la misma noche, se supone que por ser una mujer Alpha mi pelaje serio blanco, pero en mi fue distinto saque el pelaje de mi padre eso causo mucha fascinación en la manada, dado que nunca se había visto que una mujer tuviese el pelaje tan oscuro. Correr para mí era un juego de niños casi nadie era capaz de alcanzarme les costaba mucho, soy mas fuerte mas ágil y poseo dones que ningún lobo los tendría jamás.
+ Hasta que por fin vamos a una batalla, siento que me hago vieja y tu no me sacas de esa idea. - Alexa es muy quisquillosa a la hora de dar su opinión.
+ Deja de quejarte que siempre te dejo hacer lo que quieras. - eso era verdad cada vez que ella quería algo no era capaz de decirle que no, la conocí cuando cumplí los 16 años. Solo los lobos alphas completan su transformación a esa corta edad mientras el resto de la manada tiene que esperar hasta los 18 años. Una larga espera para conocer a quien se convierte en tu aliado y un gran amigo o amiga.
+ (risas), no te enojes Lara, últimamente estas muy sensible.
+ Se acerca otro celo y seguimos solas, que esperabas, risas y celebración. Estoy frustrada, jamás lo vamos a encontrar y eso me pone de malas.
+ tienes que estar tranquila si lo encontraremos ya verás. - Alexa siempre quiere tener esperanzas, pero eso para mi ya no es válido, tengo 275 años y jamás he dado con ese lobo/hombre que será parte de mí, mi mate.
+ mejor concentrémonos que estamos llegando, espero que Ariel y Luka estén bien.
Desvié mi atención a lo que seria la masacre mas cruda en mucho tiempo, demasiados lobos caídos y muchas cabezas de los chupa sangre a el alrededor, esto se estaba saliendo de control.
Agudice mi vista para encontrar a luka y hay estaba peleando cuerpo a cuerpo con uno de ellos, corrí en su dirección y de un salto le arranque la cabeza a el vampiro.
_ infórmame. – la comunicación es directamente en nuestros pensamientos
_ Lara son muchos tenemos alrededor de 38 lobos muertos. Y Ariel esta herida y echa una furia porque se está perdiendo la batalla.
_ me imagino que sí, llama a Laia que venga. – Laia es una excelente Delta es muy fuerte y sobre todo capas de resolver problemas al instante.
_ No quiero a nadie con vida. - abrí el canal directamente con todos los omegas que estaban en el lugar, no permitiría que mis soldados mueran en vano.
A lo lejos vi al intruso que orquestaba la matanza, seria mío y su sangre adornaría mi pelaje. Mi objetivo se dio cuenta de mi llegada y pronto comenzó una carrera hacia mí, era eso precisamente lo que estaba esperando la oportunidad de desestresarme y que mejor que quitándole el cuello a un asqueroso vampiro.
_ Estúpida loba, pronto morirás. – el me causaba risa, en tantos años de vida una vez me dejaron una cicatriz y sabia que el tiempo me daría la gloria de cobrar el favor. Un pobre soldado débil no era rival para mí.
+ Me llamo estúpida Lara, le arrancare mas que la cabeza. Lo are sufrir- Alexa es muy sensible y mas si le dices cosas feas.
+despreocúpate de eso. Lo aremos trizas. - siempre dándole ánimos a mi loba.
Con tenerlo cerca ya podía distinguir su olor a tierra desierta, me abalancé sobre él y pronto le di el primer mordisco, chillo del dolor y yo sonreí, quiso atacarme con un cuchillo, definitivamente era un inútil su arma no traspasa mi pelaje y pronto vio como se rompió a la mitad. Me detuve para observarlo y el miedo en su mirada era épico, le mostré mis dientes y así mismo me aproxime y de una sola estocada le arranque un brazo, cayó al suelo y me pose sobre el abriendo una comunicación directa a sus pensamientos.
_ Nadie insulta a mi loba y sale libre para contarlo. Inservible. - cerré la comunicación
De un solo movimiento le arranque la cabeza, me voltea si el resto de los vampiros y se las arroje estos dieron la voz de huida, pero aquí no se iba nadie.
_ Que nadie salga. Mátenlos a todos. - mis soldados se alentaron mas y uno a uno termino en el suelo desgarrados. Una victoria mas para la manada.