CAPÍTULO UNO

Narra Jacob 

Agarro mi celular al escuchar que empieza a sonar el tono de llamada.

El nombre de Chad, mi amigo, aparece en la misma así que contesto.

—Ey, ¿que pasa bro? —pregunto y al instante escucho cómo un plato se cae del otro lado y se hace añicos.

—¡SAL DE AHÍ GATO SUCIO! —alejo de mi oído el celular para no dañar mis tímpanos con su grito—, disculpa Jac, el gordo Jack Jack tiró un plato, como siempre— se disculpa y ríe.

—Y si vos sos el dueño que podemos esperar—me burlo—. En fin ¿para que me llamaste? No creo que sea para que escuche como cae un plato obviamente.

—Claro que no, pedazo de bobo—escucho un fuerte golpe nuevamente —¡JACK JAAAACK! ¡AFUERA POR GATO MALO! —suelto una carcajada—, mi hijo crece cada día más y es cada día peor, que duro es ser papá—dramatiza.

—Si, cómo digas- respondo riéndome entre dientes—. Dime que era lo que me ibas a decir—le recuerdo.

—Si, bueno, esta noche hay fiesta en lo de Patrick y sabes que significa eso amigo—. Ruedo mis ojos aunque él no puede verme—¡Exacto! —se adelanta al contestar—: ¡Mujeres, descontrol, sexo, sexo y más sexo!

Cuando no mi amigo pesando en sexo. Que suerte que solo tiene a un gato como hijo.

—Ay. Chad ¿Que haré contigo? —escucho que ríe—. Bueno, ¿a que hora me pasas a buscar?

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Después de unos minutos más hablando de chicas con Chad, cortamos la conversación para prepararnos ya que solo faltaba una hora para la fiesta.

Si, Chad me avisó muy tarde. Pero es sábado a la noche y prácticamente no tengo nada que hacer.

Una vez que terminó de bañarme, voy hacia mi armario para buscar ropa ¿qué más va a ser? Que bobo.

Me decido por unos pantalones negros, una remera blanca y unas zapatillas Vans. Me aplico un poco de perfume y después me dirijo hacia el espejo para ver el resultado. Sinceramente me siento satisfecho.