Capítulo 1: “Experimentación”

Para el primer experimento se transfirieron los cerebros de los individuos a cuerpos creados anteriormente utilizando incubación artificial. Estos recipientes fueron dotados con habilidades a partir de características especiales de diferentes especies. Poseen un aspecto humano acorde con la edad de los individuos. Algunas partes de sus antiguos cuerpos fueron conservadas: Iris y cuerdas vocales para que se sientan mejor identificados. Solo sobrevivieron cinco sujetos de los diez elegidos.

 · El cerebro Kalamita tiene una morfología y un tamaño similar al cerebro humano. 
· Las funciones cerebrales no se deterioran con el paso del tiempo.
· Ningún Kalamita ha presentado nunca síntomas de amnesia, demencia o enfermedades mentales
· El sujeto cinco se adapta con mayor facilidad a los cambios.
· Los sujetos uno y tres colapsaron. Hora de deceso: 14-45 AM. 34-11-2584 Calendario Universal.
· Se detiene la experimentación con las especies Knor y Unya. Razas no aptas para el proyecto.
· Sujetos dos, cuatro y cinco se mantienen estables.
· Ninguno de los individuos ha salido del estado de suspensión. Plazo de tiempo para "El despertar" antes de que quede invalidado el experimento: 15 días.
· No se observan cambios.
· 11 días para la invalidación del experimento.
· 8 días para la invalidación del experimento.
· 5 días para la invalidación del experimento.
· 4 días para la invalidación del experimento. Los sujetos dos y cinco salieron de suspensión.
· 3 días para la invalidación del experimento. Los sujetos dos y cinco presentan una conciencia activa y poseen un leve control de sus extremidades: Siguen la luz de la linterna con los ojos y reaccionan a los estímulos con leves movimientos de los dedos en manos y pies. Sujeto cuatro sin cambios. Probabilidades de que despierte antes de la fecha de invalidación: 25%.
· El sujeto cuatro no ha salido del estado de suspensión. 
· El sujeto cuatro ha sido desconectado. Hora de deceso: 12-15 PM. 04-12-2584 CU.
· Se detiene la experimentación con la especie humana.
· El individuo número dos presenta fallos en la memoria de largo plazo. Órden de apagar la vida del sujeto dos en marcha. Se detiene la experimentación con la especie Surín. Sujeto cinco listo para el segundo período de pruebas.
   Descripción del sujeto cinco:
Antes de "El Renacer" era perteneciente a la especie Kalamita. Color de piel: Naranja pálido. Color de ojos: Azul eléctrico. Edad: Seis años. Sexo: femenino. Altura: 1m. Masa: 39 kg.
   
El científico se levantó de su asiento frente a la gigantesca pantalla holográfica. Había terminado de redactar sus anotaciones diarias, las últimas que haría antes de trasladarse con todo su equipo e indumentaria hacia el planeta 918(La Tierra) donde se desarrollaría la segunda etapa de su experimento. Esta parte consistía en dejar al sujeto cinco en ese planeta junto a dos humanos sintéticos que desempeñarían el papel padres y le proporcionarían una rigurosa "Educación". Aquel científico loco, o como le gustaba llamarse: Dr. Poder, planeaba formar a los próximos líderes universales que conquistarían todo el espacio conocido, siempre bajo la tutela del Dr. Power por supuesto. Todo ello para instaurar una supremacía humana en el órden universal. Irónicamente había tenido que utilizar formas de vida no humanas para cumplir con su auto impuesta misión. Ninguno de los sujetos de prueba terrestres habían sobrevivido, de hecho, ningún sujeto de prueba había sobrevivido en los últimos períodos de experimentación, hasta ahora.
El Sujeto cinco pertenecía a una raza muy especial llamada Kalamita descubierta pocos meses atrás por la Unión Interplanetaria. El planeta donde habitaban los kalamitas era subdesarrollado por lo que no poseían tecnología necesaria para desplazarse en el espacio grandes distancias sin desperdiciar el tiempo de los tripulantes de las naves. 
   Los altos directivos del planeta conocían de la existencia de otras civilizaciones pero ocultaban la información a su gente. Esto no sería un gran problema para el aprendizaje del Sujeto 5, su memoria sería restablecida, pero todavía le faltaba saber si su cerebro poco acostumbrado a hacer cálculos avanzados y memorizar leyes de la física soportaría aprender todos los tipos de ingeniería existentes. También tendría que aprender a defenderse y desarrollar instintos de guerrera que los pacíficos habitantes de Khálar no poseían. 
   Poder se frotó los ojos. Se había pasado toda aquella jornada preparándose para el viaje, sin tomarse siquiera un momento para descansar. El esfuerzo valió la pena, las predicciones estaban listas. 
   Tenía marcados en la pantalla un agujero negro con la hora exacta en la que ingresaría a ellos para llegar al lugar y tiempo correctos. Miró atrás donde su creación estaba recostada en una camilla, estaba tan orgulloso por lo que había hecho. Lamentaba tener que separarse de aquella niña pero era necesario. Él no intervendría directamente en su educación. Sintió un nudo en el estómago. Nunca había tenido hijos pero estaba seguro de que así se sentiría un padre al irse lejos de su descendencia. No se preguntó ni un momento como se sentiría a esas horas el verdadero padre de la niña. Se dijo a sí mismo con mucha convicción que ella se lo agradecería algún día, cuando estuviera lista y supiera de donde venía, lo afortunada que era por haber sido elegida por él.