Primero que nada quiero agradecer a Dios por todo lo que me a pasado
Segundo por mi hija que a pesar de su corta edad siempre me alentó y me dijo que si podía, que esperaba que algún día cuando estuviera más grande lo leyera y dijera que fue de su super mami. Creo que fue la mejor motivación del mundo
Y por último pero no menos importante al contrario, es para todas aquellas personitas que se tomaron su tiempo para leer y darme ánimos a seguir con esta historia, gracias por acompañarme en esta nueva aventura y está etapa de mi vida
Les agradezco mucho sus palabras y buenos deseos...
Nos vemos pronto!...
En la historia de Aaron y Míriam