Capítulo. 10

-¡¡¡oh Diosss!!... sigue alexey… me voy a correr… ooohhh…

 -vamos, preciosa… ya estoy a punto… dale dale… eres mía, solamente mía, génesis…

 -ohh siii… ¡¡¡oh oohhh!!!... soy tuya… -me corro me corroooo ¡¡aaarrggg!!…

Despierta el ruso, en la madrugada, exaltado y sudoroso, con una gran erección que punza su vientre, su respiración es anormal, porque tenía esos sueños, con ella, parecía tan real, tenerla en su cama haciéndole el amor, pero que sabía el de esos sentimientos. Se levanta y se dirige a la enfermería, sus hombre de seguridad, dejan la entrada libre para que el pase.

Al entrar en la pequeña habitación, puede ver a la joven dormir, y moverse incomoda, se acerca un poco más, sin hacer ruido, y la escucha balbucear, de inmediato se da de cuenta que su fiebre volvió a subir.

_ Marcos…no…Marc…deja…me- escucha el siseo de sus palabras. Oír el nombre de ese hombre lo enoja un poco.

Alexey, pone el dorso de su mano en la frente de la joven para medir la temperatura, camina hasta la mesita de noche donde se encuentra las medicinas recomendada por su amiga, y toma el medicamento para la fiebre, seguido llena un vaso con agua, regresa a la camilla y ayuda a incorporar a la chiquilla que tirita.

_ Vamos, siéntate…te daré tus medicina- le habla en voz baja, mientras trata de abrir sus labios, pero es inútil.

_ No…déjame…Marcos…por favor…no, me hagas…daño

_ Sshh, abre tu boca, tienes que tomar tus medicinas, coopera- exige el hombre un poco impaciente.

_ Mmm, mmm,-se niega a recibirla.

Alexey no le quedó mas opción, que pulverizar la pastilla, para después disolverla en un poco de agua, lucho por darle, el vaso, pero fue en vano el esfuerzo, así que recurrió, a dar pequeños sorbos en su boca para pasar la medicina a los labios de la mujer, abrió la pequeña boca y vertió de sus labios el liquido. Sentir la respiración y los cálidos labios de la joven lo estremeció.

La chica dio acceso, al medicamento, y de paso en su delirio le robo un beso al hombre que se dejo llevar por un minuto en la nébula que lo desubico, en ese momento, la mezcla entre sus alientos y la medicina era lo mas dulce que Alexey haya probado en su vida, todo termina cuando escucha a su madre detrás de él.

_ ¿Que estas haciendo?- cuestiona la madre.

_ No es nada, madre, solo le estoy dando su medicina- con testa con pesadez.

_ Y de esa forma- mira a la chica que tirita con los ojos cerrados, no era conciente de lo que pasa a su alrededor.

_ No había de otra, Elena solo dejo esto- mostro los medicamentos.

_ Y Elena te dijo que se lo tenías que suministrar de esa manera.

_ ¡¡Basta!! Madre, no me gusta que me cuestiones- acota el interrogatorio.

_ Iré a ver a tu hijo, que pases buena noche- sisea la mujer.

Alexey pasa sus manos por el rostro, estaba perdiendo el control y su compostura, desde, que génesis apareció en su vida, no hace mas que distraerlo de sus objetivos.

_ Debí entregarte, a Claudio- susurra.

(…..)

Canadá…

_ Maldito, ruso, si piensa que se quedara con lo que es mío- expresa Claudio molesto.

_ Usted dirá jefe, cuando caemos por esos lados, y llevamos nuestro juguetitos- opina uno de sus hombres mas cercano.

_ No te apures Macario, tengo algo mejor que irnos a meter a la boca del lobo-sonríe ladino.

_ Como usted mande patroncito- chocan sus copas de licor.

En los planes de Claudio estaba, recuperar la confianza de Saúl, a cambio del paradero de génesis y el ruso, ubicación que no tenía claro el mafioso mexicano pero que muy pronto tendría esa información en sus manos para negociarla.

(…..)

_ Buenos días, como te sientes?- pregunta Elena.

_ Bien, solo me duele un poco la cabeza- responde génesis con voz pastosa.

_ Como te llamas?

_ Ge…génesis- carraspea para aclarar un poco su garganta.

_ Bueno génesis, tuviste un resfriado, perdiste la conciencia, y te subió fiebre, pero con este medicamento, en un par de días, estarás como nueva- alienta la enfermera.

_ Puedo quedarme en esta habitación?- pregunta la joven con gran interés.

_ No creo que eso sea posible, como veras esta es la enfermería, y no esta acondicionado para presidiarias- suelta algo sarcástica.

La joven baja la cabeza derrotada, y trata de ponerse de pie, cuando ve bajo el umbral de la puerta al ruso, que no despega su mirada de ella.

_ Buen día Elena, llegas temprano- dice Alexey.

_ Ya ves, tengo paciente, alguien tenía que supervisarla.

_ A noche le di la medicina que prescribiste.

 A la mente de génesis llegan recuerdo fragmentados, pero que no asocia si fue un sueño o real, ella siendo besada por el apuesto hombre que no dejaba de mirarla con intensidad. Génesis esquiva la mirada con timidez, no es capaz de sostener su vista ni un segundo.

_ Tu cautiva, me pide que ceda la enfermería para su estadía- declara Elena con una sonrisa falsa a labios cerrados.

_ Eso no será posible- responde la cejas fruncida- ya mis hombres acondicionaron el lugar donde estas.

_ No quiero regresar a esa pocilga- escupe molesta la rubia,

_ No estas en condiciones de exigir.

_  Bueno, veo que mi jornada ha terminado, me retiro- anuncia Elena, marchándose de la habitación.

_ Si quieres matarme, de a poco, creo lo estas logrando- mira desafiante al hombre que se acerca con autómata hasta ella.

_ Siempre, eres tan testaruda?- habla, haciendo chocar su aliento mentolado, hacia la pequeña nariz de la joven.

_ Y tu acostumbras a secuestrar a las mujeres de tus enemigos?- dice fijando su vista en los labio del ruso. Su aliento la hace estremecer.

_ Señor, todo esta como lo pidió- escucha a Sergey hablar detrás de su espalda.