Capítulo 10 "Feliz navidad

Feliz navidad

24 de Diciembre a las 23:25 pm

Silencio.

Todo el lugar se quedó en un completo silencio fruto de la estupefacción. No solo por la letra, incluso si esta hubiera sido un completo desastre con su voz seguro lo hubiera compensado.

Oliver...tenía una voz increíble.

Capaz de meterse bajo tu piel y para una persona que le habían traicionado hace pocas horas, fue un golpe bajo y mortal. Mis ojos sin darme cuenta habían regado lágrimas y cuando dejó te mirar la guitarra y se enfocó en el público, palideció.

No supo que decir, al menos hasta que un sonido lastimero salió de mi boca y sus ojos se abrieron.

-Lady ¿por qué estás…?

Empecé a llorar.

Como un bebé mis labios temblaron y antes de hacer más caras feas, me tapé el rostro y sollocé.

Todos lo miraron y él algo cohibido dejó la guitarra y se acercó.

-Oye…señorita loca ¿estás bien?

No, obviamente mi corazón no lo estaba.

Mi ex pudo patearme mis sentimientos, pero esa canción había pateado mi pecho y roto por completo las mariposas. ¿Es por esto que las personas lloran con música cuando están despechadas?

¡Qué masoquismo!

Pero se sentía bien…

Era de alguna manera liberador. ¿Eso me hacía unirme al club de masoquistas? No lo sabía, pero tal vez si al de bipolaridad, porque una sonrisa nació de mis labios.

No la forcé, no me costó, sencillamente me reí entre lágrimas y asentí a la pregunta de Oliver.

-¡Cantas increíble!-reí y sollocé mientras me limpiaba las lágrimas-¡Felicidades! Ya no eres un intento de famoso, ¡eres un intento de cantante!

Soltó un bufido por mis palabras y volví a reír. No se lo dije, pero creo que él lo sabía. No era un intento, él ya era un cantante y seguramente en poco tiempo estaría en la cima. Claro, si es que ya no estaba en ella.

Porque no mentí cuando dije que no había oído de él.

Pero…

-Esa canción nunca la había escuchado-murmuró Jarek-¿De quién es? Me ha gustado.

Todos asintieron en señal de acuerdo y con comentarios positivos. Volteé a ver al intento de cantante y me sorprendió cuando noté que sus labios temblaron antes de dar una gran sonrisa.  

-No lo sé-rió y se pasó una mano por el cabello-es poco conocida, solo me gustó. Pero…estoy seguro que la escucharás pronto.

…Oliver tampoco mintió al decir eso.

Todavía no se había estrenado esa canción.

Y nosotros habíamos sido los primeros en escucharla.

Lo golpeé cuando meses después supe esto.

***

24 de Diciembre a las 23:55 pm

Hay un villancico que he amado toda la vida.

Nunca. Jamás. Ni por todo el dinero del mundo. Podré no oírlo en navidad.

Eso explica porque estoy con niños pequeños tarareando mientras Jackson está tocando una versión acústica de “Rodolfo el reno”

Todo el tiempo soy consciente de la mirada del intento de cantante, pero poco me importa e incluso me muevo con un niño pequeño cuando hacen mención de santa.

Para cuando la canción termina, varios niños están por cerrar los ojos y dormirse, son acunados en los brazos de sus madres y me hacen pensar en mamá y encender el teléfono.

Es la primera navidad que no la he visto.

Nuestra relación no es mala, sin embargo, no teníamos ese vínculo de madre-hija.

Siempre he creído que hay personas que son buenos esposos, pero no tan buenos padres. Mi familia cumplía el primer papel.

¡Son una jodida pareja estupenda!

En verdad se aman mucho, lo hacen todo juntos. Sin embargo, mamá muchas veces prefería estar con mi padre que con nosotros. Así que era normal que mis navidades las pasara sola y ellos juntos.

Jamás…tuve ese abrazo en medio de la noche y las palabras de “Feliz navidad” que las películas mostraban. Y lo peor de ser hija única era que por desgracia, no había una mosca molesta menor, que revoloteara a mi alrededor y me llenara de afecto y problemas.

Al final lo acepté, mis navidades constaban de ver películas en mi habitación sola. Ya que de niña era muy pequeña para convivir con los adultos y de adolescente, estaba muy grande para jugar con los niños.

-¿En qué piensas? Te has quedado callada de la nada.

Miré al intento de cantante y sonreí.

-¿Cómo celebra tu familia navidad?-pregunté a lo que él me miró un rato antes de responder.

-En navidad solemos cenar juntos, no es una gran cena con amigos y familia exterior. Solo somos mis padres, mis dos hermanos y sus hijos.

-¿No es como Jarek?

En esta fiesta había amigos, familia, y vecinos de Jarek. Literalmente, ¡era la cena de navidad!

Sonrió.

-No, no es tan grande como esto. Hay una cena y películas, bromas entre hermanos y entregamos regalos. Nos demoramos más al hacer la cena.

-Seguro es divertido cocinar juntos.

-Lo es, salvo que mi madre tenga hambre y se ponga gruñona-rió-si el pavo estuviera vivo, saldría corriendo-sonreí levemente y asentí-¿Y la tuya?

-No es muy diferente-sonreí encogiéndome de hombros, pero mi sonrisa se desvaneció al ver que recibía una llamada.

-¿Él es…?

-Sí, él es el cachudo Robin-mis ojos se abrieron al ver el número de llamadas perdidas y mensajes de voz-Mierda, seguro tiene mucho saldo para gastar.

-¿No lo vas a perdonar?

-¿Bromeas? ¡Me congelé el culo por venir a New York y salir corriendo despechada de su departamento! ¡¿Qué clase de loca sería si hiciera eso?! Soy estúpida, pero tengo un límite. Este, es mi límite de imbécil-sus ojos fueron a mi mano y yo hice lo mismo-¿Lo dices porque no me he quitado el anillo? Pensaba en venderlo al volver.

Puedo tener un corazón roto, pero eso no nublaría por completo mi emprendedora interior.