"Capitulo 6"

-Hola Acinu, no muy bien de hecho- al parecer estaba intentando reprimir las lágrimas que se querían escapar de sus hermosos ojos verdes - te puedo pedir un favor.

-Claro, por supuesto que sí.

-¿Me puedes prestar tu baño y un poco de ropa?

Definitivamente algo no anda bien con mi amiga, a ella no le gusta la ropa que uso, quiero preguntarle que le paso, pero no sería muy prudente de mi parte:

-Claro que sí, ven vamos a mi habitación.

-Muchas gracias Acinu.

Nos adentramos a mi habitación no sin antes decirle a mi mamá que estaríamos en ella.

Keni tenía un aura de tensión y tristeza, estaba muy extraña, no le preguntaría porque, si ella quiere contarme la escuchare, pero si no lo quiere hacer, respetare su decisión pero, realmente si quisiera saber y ayudarla en lo que pueda:

-Acinu.

-Si Keni dime.

-Sé que estas confundida, o tal vez un poco extrañada de verme aquí, en tu casa, en estas fachas- soltamos una leve risita por su comentario- pero todo tiene una explicación, para mí no es fácil lo que te voy a contar.

-Si no quieres contarme, por mi está bien no te preocupes- realmente si quería saber, me moría de curiosidad, pero no quería que ella se sintiera con la obligación de contarme.

-Yo soy la que te quiere contar, necesito contarte.

-Está bien, te escucho- tenía que concentrarme para no reírme, este es un momento serio.

Algo que me sucede cuando tengo que tomar las cosas con seriedad, es que de la nada me río sin control, es algo que no puedo evitar:

-Te acuerdas de Bryan.

El tal Bryan, era un chico que mi amiga había cosido por Facebook, a ella le gusta aceptar las solicitudes de extraños, solo para que sus fotos tengan más like, pero bueno ese es otro tema.

En fin, a ella le gusto la foto de perfil del muchacho y empezaron a conversar, se dieron cuenta de que se parecían mucho y ella se enamoró de él, lo último que supe, es que él le pidió a ella que se vieran pero no sé si mi amiga acepto, yo le dije que no fuera, pero realmente no sé qué fue lo que hizo:

-Si, como olvidarlo, no parabas de hablar de él - ambas reímos por mi comentario.

-Bueno, después que el me pidió que nos viéramos, yo acepte- ella agacho la cabeza en señal de arrepentimiento- quedamos en que él me iba a recoger en la escuela el viernes anterior, y de ahi nos íbamos a ir al cine- hizo una seña con su mano para que no la interrumpiera- yo le dije a mi mamá que me iba a quedar con mi prima en su departamento unos días, lo cual no me creyó pero igual me dio el permiso, en fin. Él me fue a buscar y fuimos a caminar por el parque un rato, lo cual me pareció extraño pero no le di importancia. Llegando a una pizzería nos desviamos y entramos en un barrio muy feo, después de finalizar nuestra caminata por el parque claro está. En todo el camino él se mostró amable y cariñoso, nos estábamos divirtiendo mucho, al final de la calle se veía un club muy bonito, pero también muy caro, entramos y el pidió un trago fuerte mientras que yo solo pedí un vaso de agua. Mi corazón me dijo que algo no andaba bien, tuve el impulso de irme de vuelta a mi casa pero evadí esa idea. Esperaba con ansias mi vaso con agua cuando me percate que muchos en el club parecían conocer a Bryan, le pregunte si el frecuentemente venía a este lugar, a lo que él no respondió ya que en ese momento llego lo que habíamos pedido.

No sabía si mi amiga estaba preparada para compartir lo que pasó, pero con lo que me ha contado hasta ahora, creo que puedo imaginar el final.

Esto no es fácil para ella y lo entiendo, quisiera decirle que se detuviera y no siguiera relatando lo que paso, pero... eso sería darle la espalda. Si ella me está contando esto es porque quiere que la ayude, no puedo decirle que pare, mejor dicho no debo decirle que pare, es mi amiga y a pesar de tener nuestras diferencia y de no compartir el mismo círculo social, lo seguirá siendo.

-Tranquila Keni- dije apoyando mis manos en su espalda y dándole masajes circulares

-Descuida estoy bien- dijo haciendo una pausa- luego de un rato me sentí extraña y todo me daba vueltas, mire mi baso y ahí fue cuando me percate de algo inusual en el agua, era de color verde, pero un verde muy suave y no era fácil de visualizar por la poca iluminación del lugar. Le dije a Bryan que no me sentía bien y que si me podía llevar a mi casa y lo único que dijo fue, "dulces sueños princesita", luego de eso desperté en un departamento que no era el mío, Bryan esta acostado al lado de mí y mil cosa pasaron por mi mente, no aguante más y me puse a llorar, Bryan despertó de un salto y me puso la mano en la boca para que no hiciera ruido, me explico lo que realmente pasó para que estuviera más tranquila, me dijo que como me desmaye y no sabía dónde vivo me llevo a su departamento. Sabía que algo andaba mal con él ya que su actitud no era la misma del chico que conocí ayer, parecía como si estuviera ansioso por algo.

Luego de un rato, le pregunte si podía llevarme a mi casa, pero me dijo que aún no porque tenía que presentarme a alguien, yo solo asentí me sentía preocupada porque sabía que algo muy malo me pasaría si no salía de ahí, empecé a buscar mi celular pero no lo conseguía y le pregunte si lo había visto y me dijo que si pero que se había quedado sin carga y estaba cargando. En fin, llego un muchacho idéntico a Bryan, el cual no tenía ni remota idea quien era, me han llevado hasta la sala porque ellos tenían que hablar, pero después de un rato de estar en la sala sin escuchar nada me dieron ganas de ir al baño, no era mi intención escuchar su conversación pero se escuchaba todo por los ductos de ventilación. Al parecer el chico que llego después, me iba a llevar con él a donde un tal Maicol que al parecer era su jefe. Me asuste y empecé a buscar una salida, solo pensé en los ductos de ventilación ya que era la única opción que tenía, no lo pensé más y entré en ellos pero no falto mucho para que se dieran cuenta que ya no estaba en la sala. Me empezaron a buscar por todas partes y yo entre en pánico, empecé a arrastrarme por los ductos más rápido pero una mano me agarró por el pelo y de un jalón me saco del ducto de ventilación. Me encontraba en una oficina de aparentemente otro departamento, rodeada de chicos y de otra chica que parecía tener ganas de morirse antes de estar ahí, aunque pensaba que de igual forma moriríamos si seguíamos ahí, eso es lo que pensaba ya que nadie nos había dicho si estaríamos bien, o al menos a mí no.