Capitulo 14

— ¡Wow señorita Park! — exclamó una de las chicas al verme salir del vestidor con hermoso vestido de novia — Se ve realmente hermosa — las 3 chicas restantes cubrieron su boca con sus manos en señal de asombro.

Lentamente caminé hasta el espejo y observé detalladamente el vestido que traía, debo confesar que era muy hermoso y cualquier chica estaría más que feliz de llevarlo, pero no era mi caso. Cada vez se acercaba más el día de mi boda, realmente me iba a casar y el amor que debía existir para unirnos era nulo, hasta creo que él en serio me odia.

—Señorita Park, ¿Qué le pasa? — se acercó preocupada al verme reflejada en el espejo derramando unas lágrimas.

—No pasa nada — negué limpiando una lagrima que había escapado de mis ojos y traté de sonreír —, lo que pasa es que el vestido es muy hermoso, ¿no lo creen?

Ellas asintieron sonriendo mientras se ponían detrás de mi mirando mi reflejo en el espejo.

Había ido a probarme el vestido por última vez y como las otras veces, pedí a las trabajadoras que me acompañaran. A diferencia de cualquier novia que iba acompañada de sus padres, amigas, familiares o algún conocido; yo solo podía estar acompañada por ellas, eran lo único que tenía ahora. No es que no disfrute de su compañía, solo que necesitaba de mi madre... necesitaba que me acompañe en este martirio.

Mi abuelo estaba ocupado como todas las veces, así que no podía exigirle nada sería muy injusto de mi parte.

—Eres la novia más hermosa de todo Seúl, definitivamente serás la envidia de todas — dijo la vendedora acercándose a nosotras —. Ya falta unos días para tu boda, ¿estas nerviosa?

—Un poco — bajé la mirada —, los días están pasando muy rápido.

—Y más si se acerca un día tan importante para ti.

Narradora

En un abrir y cerrar de ojos los días habían pasado tan rápido que ahora solo falta unas horas para el gran día. Y mientras muchos estaban ansiosos por lo que sería la boda del año, los novios permanecían en sus respectivas habitaciones despiertos, pensando en lo que sería de ahora en más su vida.

Lo único que les impulsaba a seguir adelante era sus madres; Taehyung quería verla por primera vez y (TN) quería que siguieran cuidando de su madre. Ahora ya no había marcha atrás, en unas horas se convertirían en esposos y estarían atados por el resto de su vida.

El acuerdo que habían firmado Yoora y Yung-Hee decía claramente que ellos no podrían divorciarse o se rompería toda alianza y es más si alguno de ellos, ya sea Taehyung o (TN), pedían el divorcio, automáticamente todo lo que le correspondía pasaría a manos del otro, de igual manera era si alguno cometía infidelidad. Este último se hizo para evitar otra aventura entre los Park o los Kim.

**

En toda la noche ninguno de ellos había podido dormir y ahora ya era de día. Ahora ya era el gran día...

En la habitación de (TN)

—Señorita Park — llamó a la puerta por segunda vez. (TN) no estaba dormida solo pensaba que tal vez solo era una pesadilla, de la cual despertaría en cualquier momento — Señorita Park — llamó nuevamente.

—Pase — respondió finalmente al darse cuenta que nada de ello era una pesadilla.

—Señorita Park — abrió la puerta y caminó hasta ella apresuradamente acompaña de otras chicas más vestidas con su respectivo uniforme de sirvienta —, tenemos que alistarla de una vez, hoy es un gran día y debe lucir hermosa — lanzó las sábanas que le cubrían a (TN) a un lado y la ayudó a levantarse —. Chicas tenemos que apresurarnos antes que llegue el estilista — aplaudió y todas comenzaron a moverse de un lado a otro.

*Horas después*

—No puede ser... — conmovida retrocedió sin dejar de mirar a la novia quien ya se encontraba lista —, señorita Park...

—¿Qué sucede? — preguntó y al no recibir respuesta, se dirigió hasta el gran espejo que se encontraba en su habitación —¿Soy yo? — sonrió incrédula al verse reflejada — En serio, ¿soy yo? — tocó el espejo —. Mamá me veo hermosa — balbuceo y sintió un nudo en la garganta queriendo llorar.

—Señorita, hoy no es un día de tristezas — le tocó su hombro —, es todo lo contrario — ella asintió, sería un largo día y tendría que lucir "feliz", por su abuelo.

En la habitación de Taehyung

—¡Taehyung! — se escuchó los gritos por toda la casa y quien los realizaba era Jin — ¡Taehyung! Más te vale que te hayas despertado — apresuradamente llegó hasta la habitación de su amigo y abrió de golpe la puerta — No puedo creer que sigas en cama.