CAPÍTULO 4 LA SENTENCIA.

Necesitaba espacio, aire, por primera vez desde mi llegada, decidí darme un espacio para pensar. Sin volver siquiera al despacho para apagar las luces. Me dedique a vagar por Santa Cecilia atravesando espacios por lo que nunca había pasado. Calles por las que únicamente aparecía de tanto en tanto un vehiculó aislado, aquella hora soleada, y ya pasando el tiempo una tarde de atardecer, su sosiego resultaba sobrecogedor. Carente del dramatismo estético de los entorno de belleza externa. Clavada en el suelo a los pies y alrededores, como un sinfín multiplicado frente ese árbol, en una banca sentada sentí la presencia de mis dos hombres amados el de mi querido esposo y la sonrisa mágica de mi hijo de 5 años, que me despertaba de felicidad cada vez que lo escuchaba sonreír.  Sé que están junto a mí los puedo sentir, porque no me dejan verlo por última vez. Cada rama de árbol inmenso empezó a soplar tan fuerte que sentía que cada viento que llegaba a mi rostro eran sus manos acariciándome, eran sus abrazos y eran cada beso que les pedía.

De camino al apartamento, me detuve a comprar algo para la cena, solía cubrir, mis necesidades domesticas en Marquet, en un callejón junto a la calle central. No obstante había dejado atrás casi todas mis antiguas rutinas y, entre ellas, la gran compra quincenal para tres. Termine de comprar y me retire, llegando al apartamento  un espacio vacío, y solitario, con unas ganas inmensas de llorar y no parar. Destapare una botella de vino y comeré.

Luis Manuel--- vamos a comer Albert te prepare una rica pizza hijo. Hijo solo te puedo decir que eres mi hijo amado, Albert--- papi yo también te amo, pero extraño mucho a mami. Llorando sin parar. Luis Manuel --- hijo no me gusta que estés triste, juntos superaremos poco a poco este dolor- vamos a comer y después a leer un cuento de los que mama siempre te leía.

Un nuevo día llegó, Tifany --- que amanecer lleno de tanta ganas de continuar, y de empezar, ya lista para comenzar mi jornada de trabajo. Llamare un taxi para que me lleve a tribunales, y ya mañana, me entregaran mi nuevo vehículo, al  salir a recepción, hola Luis Manuel buenos días y eso. ¿Qué haces aquí?   Luis Manuel --- buenos días vino por ti. Tifany sonriendo le dijo no te hubieses molestado. Luis Manuel ---no es molestia señora bonita.   

Llegó la hora de Salir se nos hace tarde, llegando al despacho. Tifany---bueno  Luis Manuel Gracias nos vemos más tarde. Hasta luego Dra. Tifany --- al llegar al despacho me acorde que algo pendiente hasta por resolver, la misteriosa carpeta amarilla de un expediente que una noche calló, dándome la responsabilidad de resolver lo que un alma en pena necesita para irse.

Dios mío este expediente pertenece al doctor Eduardo Ramírez, un caso inconcluso que no termino de dar una sentencia firme y que definitivamente su angustia era que se lograra terminar ese caso, dándole una justa y adecuada culminación de proceso de este caso. Un borrador inconcluso, realizado por el Doctor dando su razón de porque esas tienen que ser sentenciada. Ahora bien esto fue escrito la noche que supuestamente el sequito la vida, que extraño, que razón tendría el doctor de quitarse la vida. Cae de nuevo el segundo expediente, continuación del caso, Dios mío esta carta de correspondencia  la escribió el  Doctor Ramírez. Al leerla me di cuenta que él había sido amenazado, por varias personas, por el caso de los narcotraficante de la mafia del sur española. Y es entonces que definitivamente este caso no es un suicidio, sino un asesinato, al Doctor lo mataron. Dios mío que difícil saber y descubrir ese caso. Procedí a seguir estudiando, los casos para poder ver y darle una lógica jurídica a cada palabra analizada, por el Doctor, empezando a buscar las personas, de confianza para poder reabrir el caso de ambos el del Doctor, que definitivamente no fue un suicidio y el de los Narcotraficante.

Luis Manuel--- Tun ..Tun,  puedo pasar. . Tifany si claro, pasa, siéntate puedo contarte algo, pero no aquí vamos a almorzar y hablamos. Luis Si claro vamos, para eso pase a buscarte para que comiéramos juntos.

Este puesto está bien, es muy lindo este espacio Luis, me encanta, Luis Manuel --- Siempre venía a comer aquí con mi esposa y mi hijo todos los fines de semana, Tifany----es hermoso sabes, que lindo es escuchar como hablas así de tu esposa. Yo extraño mucho a mi hijo y a mi esposo, no hay un día que no pueda recordarlos.  Luis –ella era una mujer especial, autentica, así como tú. Creo que ella desde el cielo te envió para conocerte. Tifany --- sabes yo pienso igual, creo que mi esposo y mi hijo, están haciendo todo esto para yo poder seguir con mi vida.

Tifany-----Bueno solo ellos sabrán, sabes Luis, que tan seguro estaban en el despacho de que el Doctor Ramírez ¿se quitó la vida o fue  un asesinato? Luis—bueno esa noche él se quedó trabajando, así como tú lo hiciste ese día. Al llegar Fabiana lo encontró con la pistola en su mano sentado en el sillón, frio y pálido. Ya tenía cuatro horas de muerto. ¿Sabían en el despacho que él se quedaría toda la noche?, Fabiana era su secretaria en ese entonces y ella tenía solo conocimiento de que el estaría toda la noche trabajando. ¿Fabiana se quedó luego como jueza al morir el Doctor? Si, de una vez al otro día .Uhhh.

Luis Manuel--- porque tantas preguntas  de ese caso, ya pasó años de eso. Tifany--- porque el alma en pena del Doctor vive por cada pasillo de los tribunales, buscando justicia, porque él no se quitó la vida a él lo mataron. Luis ---de verdad y ¿cómo sabes eso’?. Tifany el mismo me lo dijo, la noche que me quede pude verlo y saber tantos secretos. Que poco a poco te contaré, por ahora nadie puede saber esto ok Luis.  Luis---- entendido mi señora bonita, boca cerrada. Tifany ---gracias, bueno esta comida estaba rica, y de tanto hablar me provocó un café. Luis --- listo dos café por favor. Sabes Tifany es muy extraño que empieces a descubrir tantas cosas al llegar a este país, es algo que pareciera que tenías que venir tú, para que todo esto empezará  aclararse. Tifany ---te cuento que solo por respuesta de un email, fue que decidí este destino, fue la única propuesta que me respondieron, Luis—sabes quién te aceptó tu candidatura para aprobar tu cargo aquí?  Fuiste tú verdad.  Recuerdo que al firmar decía Doctor Luis Manuel Ramírez, Tifany--- no.  Tú eres Ramírez,  eres hijo del Doctor Eduardo? Luis ---Sí, él es mi padre Tifany yo no pude quedarme en su mismo puesto, también sospeche de ese caso que él estaba estudiando en ese momento de narcotraficantes, pero nunca tuve una prueba, que determinara que eso no fue un suicidio, y ahora apareces tu como mi ángel, Tifany--- ahora nos toca hacerle justicia a tu padre Luis, para que pueda descansar en paz. Luis--- desconfías de alguna persona en específico?  Tifany--- lee esta carta de tu padre. Luis--- no puedo creer esto, dios mío porque, tanta tiempo teniendo la persona, cómplice de que mi padre lo mataran. Tifany--- así es solo queda ir a denunciar este caso, y quedara detenida, tenemos la prueba y la declaración de tu padre .. Ya el doctor Ramírez sospechaba de ella, desde el momento que se dio cuenta que ella era una de las amante de uno de los narco detenidos.