Alessia:
—¡Hoy vamos de caza amiga! —Grita Alexia, entrando a mi habitación.
—Callate Alexia, no tengo ganas de ir —Me quejo.
—Hace hambre y debe haber buenos animales para alimentarnos —Sus ojos brillan.
—Sabes bien que no me gusta la sangre de animal prefiero la humana —Le recuerdo.
—Aldo no permitira que mates a un humano —Menciona.
—Qué se joda Aldo, aveces odio que sea el líder —Opine.
—Vete a bañar —Rueda los ojos.
—Pareces a mi madre —Comentó.
—Me lo has dicho todos los días de tu vida. —Sonríe cansada.
—¿En serio llevo un siglo diciendote lo mismo? —Pregunté.
—Si querida, te recuerdo que aparentas dieciocho años así que por favor actúa como una adolescente, además tenemos escuela —Suelto un quejido al escucharla.
Me levanto de mi cama, con mi velocidad me preparo para salir a la escuela. Me visto con un pantalón de cuero ajustado, un blusa blanca y encima una chaqueta de cuero, por último me coloco unos botines. Mi cabello lo ato en una cola alta en mis labios coloco labial rojo intenso.
—Alessia ya Noah esta afuera esperándonos —Informa mi amiga viendo el celular.
—Ya estoy lista vamos —Digo mientras tomo mi mochila.
Salgo de la habitación con Alexia detrás de mí, mi madre se atraviesa en nuestro camino con una copa en su mano. Me la extiende para poder tomarla.
—Bebela cariño, es tu desayuno —Sonrió en agradecimiento. —¿Quieres un poco Alexia? —Ofrece.
—No gracias, hoy es noche de caza quiero estar vacía —Rechaza amablemente.
—Bueno querida recuerden solo animales, de cualquier forma Aldo no permitira que cazen humanos —Dice.
—Buenos días familia y Alexia —Saluda mi padre, detrás de él viene Aldo mi hermano.
Aldo es mi hermano, también es el líder de nuestro clan gracias a que mi padre ya le cedio el puesto. Por suerte tengo buena relación con Aldo y no somos como esos hermanos que con costos un saludo se dan. Aldo normalmente es sobreprotector conmigo, ahora es más celoso después de lo que pasó me cuida como si alguien pudiera dañarme más de lo que ya estoy.
—Ale te sienta bien el negro —Comenta viéndome de arriba abajo.
—Vamos vestidos igual, solo que tu llevas tenis y jeans —Ruedo los ojos.
—Hermana sabes que me veo mejor yo —Habla con obviedad.
—Mejor nos vamos, adiós nos vemos en la tarde —Me despido.
[...]
—Cada vez me sorprende más la cantidad de diferentes especies que están llegando —Comenta Noah.
—Tienes razón, pero lo que me extraña es que están llegando demasiado vampiros de otros clanes y eso no es muy normal —Murmuró extrañada.
—Yo escuche que hay clanes que se están separando —Comenta Alexia.
—¿Por qué? —Curiosea Noah.
—No lo sé, pero al parecer el Príncipe ya está tomando cartas en el asunto —Contesta.
—Hasta que por fin se decidió por salir de su cueva —Comente.
—¿Seguirás enojada con él? —Pregunta Noah.
No le respondo, solo sigo caminando. Lo que pasa es que hace muchos años me enamore perdidamente de él príncipe, según yo el también me amaba porque me juraba amor. Yo en ese tiempo era rellenita, con algo de acné y mi pelo siempre estaba mal arreglado. El príncipe era un amigo cercano de mi hermano, un día me beso y yo estaba super feliz. Nos hicimos novios pero dos meses después descubrí que era una apuesta que él hizo. Me humilló delante de todo el mundo vampiríco, después de eso decidí cambiar. Ahora tengo un cuerpo perfecto y un mi rostro limpio.
Aldo jamás pudo perdonar a Adriel por lo que hizo, Adriel se fue y jamás lo volví a ver en toda mi larga vida. Lo cual agradezco por el hecho de que lo odio con todo mi ser; pero dicen que el Karma es una perra así que algún día le tocará arrepentirse por todo lo que a hecho.
Por eso es un milagro que Adriel salga por fin del palacio, después de lo que pasó él se encerró ahí todo este tiempo, muy pocas veces se escuchaba que saliera de ahí. Solo espero no volver a verlo jamás en toda mi vida.
Me adentro en la escuela, hago un mueca de asco al sentir el aroma de perro mojado el cual emana de los hombres lobo. Lamentablemente esta escuela es mixta vienen todas las especies de altos rangos o los que pueden pagarlo.
[...]
—Bueno chicos que tengan una fantástica cacería, recuerden que nuestro futuro gobernante se unirá a nosotros, así que es obligatorio ir a la cacería —Informa el profesor.
—¿Qué pasa si me ausento? —Pregunté.
—Tendrá un castigo señorita Moore, así que será mejor no faltar —Amenaza. —Pueden irse —Dice.
Tomó mis cosas y salgo del salón, por dicha ya terminaron las clases. Mis amigos se desaparecieron hace un rato así que no me preocupo por esperarlos. Al llegar afuera alzó vuelo, me da pereza caminar así que vuelo hasta mi casa. Entro por la ventana de mi habitación, dejo mis cosas y vuelvo a salir.
La cacería es algo lejos así que probablemente llegue cuando esté de noche.
~Tengo un buen presentimiento ~Abre el link, mi vampira interior.
~¿Sobre qué? ~Pregunte.
~No lo sé, pero me siento inquieta de felicidad ~Responde.
~Anne no se cual sea tu presentimiento, solo espero que sea bueno y me dé una gran cena ~
Corto la conexión con Anne.
[...]
Caigo de pie al suelo, encontrándome con todo el clan al que pertenezco. También a algunos otros clanes, busco a mi hermano con la mirada entre todos los vampiros que están presentes hasta que lo encuentro coqueteando con una pelirroja, no dudo en acercarme. Aveces Aldo se pasa de idiota, al llegar a su lado toco su hombro.