Vestigios Atemporales

Un último respiro cruel

Al final, no sabría describir cada detalle

Se me escapa de las manos toda pequeña oportunidad

Para bailar y brillar

Me descomprimo a la luz del sol

Me marchito si en esas horas de soledad

No oigo tu voz, no siento tus dolores como míos

Me nublo y el aire no llega a mis pulmones.

Tesoros y pobreza

Un desierto seco en mi corazón

Con oasis de pabellones oscuros

Nunca pedí nada más, solo una gota roja

Que rebalse el profundo pozo de miseria

Que dejo en el pasado sin remordimientos.

Plumaje eterno, sagrada mirada

Búsquedas miserables, cielos oscuros sin finales

Atormento un poco el cerebro sin ganas

Sin deseos ni expectativas

Lunático, hambriento, abierto y decidido

Recorro las rutas añejas, sucias

Pobladas de putas, esclavas de sus penas

Perturbadas por decisiones pasadas que arrugan un poco el corazón

Y alimentan con mucha energía el miedo eterno del alma.

La oscuridad es mi hogar, allí me siento bien

No soy un nabo hipócrita

Y es que, no puedo frenar mi lengua hoy

Si lo que ven mis ojos dañan el corazón.

Me someto a mis torturas

Escupo ácido cuando te beso

Me quemo al rozar tu piel.

Esos gritos, innecesarios y sin escrúpulos

Viajaron detrás de cada año

Haciéndole compañía a mi única compañera

Mi sombra

Vieja amiga, dulce nena.

El cuerpo es el mensaje final

De la comunicación entre el exterior y el alma

Hice una mala jugada, fui quizás vulgar

Todo eso que vos connotabas como positivo

Siempre fue en verdad estúpido

Arden mis venas, lloran mis ojos

Y hoy no tengo un buen motivo que respalde mi indecisa decisión.

Este fuego casual, casi inesperado

 Era el dulce licor que hacía brillar tus labios

Encerraste cada sentimiento pobre e hipócrita

Y cada palabra barata, así como tu demacrado cuerpo.

Aburrida prisión

Emana gritos de desesperada desolación

Sofocados recuerdos, pensamientos de vago poder

¿Por qué el sol sale hoy si me siento tan mal?

Desnutrido de la esencia que abandona mi valor

Mi paraíso no suele tener brillos y destellos

Tardes aburridas, provocadoras de la jaqueca más cruda

Adormecida la mente por un exceso de realidad.

Provengo del valle más limpio del infierno

Me alimento del agua espesa, mares de clara tempestad

Magias de occidente, poder cínico

Placeres que fulminan el cuerpo, pero llenan la psique

Como viejos y angustiados rocanroles

Torbellinos de furia y pasión.

La inocencia de cada neurona

Se vuelve sexo luego de horas de televisión

Profano y ciego, el diablo no se esconde

Vive pegado a la mugre de tu alma

Y despierta cuando el temor te rompe los huesos.

El mundo ya no gira, no hoy. Ya no puede.

Estoy consumido en excusas e indecisiones

Quizás sea un poco cruel

Más conmigo que contigo

La noche hace dormir mis penas

Entonces la dualidad me hace creer que la luz las crea

Débil y lunático, me espanto entre realidades que veo por la pureza del ojo tierno

Indescriptibles vivencias.

Bienvenido al nuevo cielo

Intenta no fundirte en tus penas

Recuerda no mirar atrás

Siempre sonríe

No perturbes ningún cerebro

No permitas que te quemen

Intenta dejar tu huella en este planeta loco

Pero nunca habites mi cielo

Y no intentes entenderme ni conocerme en profundidad

Podrías asustarte

Podrías enloquecer

Habla conmigo y no volverás a ser el mismo de antes.



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En el texto hay: poesia, poemas, poesia mixta

Editado: 13.02.2021

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