¿Aún no lo entiendes?

Unas semanas después del viaje Mad y yo habíamos decidido entrar a trabajar un tiempo para conseguir algo de dinero, aunque fuera por unas semanas, y con suerte conseguimos entrar juntas en un pequeño restaurante.
Entre Matt y yo no había pasado nada importante o más bien, fuera de lo común, después de el viaje, en cada momento estábamos acompañados, y era raro el momento en el que nos quedábamos solos, sólo cuando nos mandábamos mensajes era cuando platicabamos de forma "privada" aunque nada inusual. 
Llego un momento en el que incluso pensé que no quería mas de Matt, que podía ser sólo su amiga, una vez más me equivoque y me di cuenta solo con la llegada de una nueva amiga. 
Ella se llamaba Kath. Cuando Mad y yo la conocimos en "Colours" nos pareció una chica linda, de cabello color café obscuro, ojos color miel, y era un poco más alta que nosotras, parecía un poco tímida pero trabajadora. Nos llevábamos bien, así que Mad un día la invitó a salir con nosotros para presentarla al grupo, y ella aceptó. Después de esa única invitación todo cambió. 
Ella seguía yendo a nuestras salidas como una del grupo, a mi me caía bien y ella parecía adaptarse rápidamente, sin embargo, después empezamos a ver su interés por Matt. 
Kath hablaba siempre que él lo hacía, lo llamaba Matty, trataba de sentase siempre a su lado, cambió de ser la chica tímida a una que era más atrevida en solo unas pocas semanas. Mientras trabajábamos en Colours, Kath lo confesó todo.

-Chicas, -nos dijo- la verdad agradezco que me hubieran incluido, yo me siento muy feliz con ustedes, pero hay una cosa... Matty me gusta. Y la verdad es que el siempre es tan lindo conmigo que incluso pienso que yo también le gusto.

Mi corazón se detuvo un momento y mi estomago se revolvió. En mi cara trate de formar una sonrisa aunque mas bien parecía una mueca. Mad se dio cuenta de eso y le contestó por mi.

-Oh vaya, que bien. -dijo apenas. Y eso fue todo. A partir de ahí, no quería que saliera con nosotras, pero no iba a decírselo, verla con él me causaba celos y eso me causaba enojo conmigo misma porque él no era nada mio, no podía reclamar, cada día se estaba haciendo más insoportable oír lo hermoso y lindo que era "Matty", sin embargo aún no escuchaba nada de parte de Matt, no podía decir que él también la quisiera, eso quitaba un peso de mis pensamientos. 
Un día salimos los cinco al centro comercial, Kath le pidió a Matt que si la acompañaba, y él aceptó no supe ni a donde ni por que, solo supe que nos quedamos Erick, Mad y yo en la mesa. Pasaron unos minutos y yo me levante de mi asiento para ir al baño. Y entonces los vi. Un beso. Otro beso que me partió el corazón, me llenó de celos, pero yo no iba a cometer la estupidez de la última vez, quite la lágrima que caía en mi cara y seguí de largo hacia el baño y cuando regrese ellos ya estaban en la mesa, ninguno de los dos comentó nada, ni mostraron algún tipo de nuevo contacto amoroso. En el trabajo ella nos lo dijo, y yo hice la que estaba feliz por los dos. Mad supo que mentía, pero no dijo nada. Pasaron unos días, y sin embargo Matt no había comentado nada al respecto de alguna relación especial con Kath, ni ella enfrente de los chicos, así comí tampoco había hablado yo con él.

-Anne

-Matt.

-¿Estas bien?

-Claro -menti- ¿por que?

-No se, te noto... Extraña conmigo.

-Nada importante... -me miro confundido esperando que siguiera- esperaba que me tuvieses mas confianza. Eso es todo.

-¿De que hablas Anne?

-De tu y Kath. -su cara, que tanto en gustaba, ahora estaba mostrando una gran confusión.

-¿Eh?

-No tienes que ocultarlo. -los ojos empezaron a picar - esta todo bien. Que los dos la puedan pasar muy bien, si ella es la chica que te gusta... Todo bien. Yo les deseo lo mejor.

-Anne no se de que hablas.

-Los vi besándose, y ella dice que se gustan. -miré hacia el piso, no podía verlo de frente o lloraría ¿por que era así? Matías soltó una pequeña risa, y con su mano levantó mi cara obligándome a verlo de nuevo.

-¿Aun no lo entiendes verdad Anne? -seguro mi cara ahora era la confusa.

-¿Entender que?  -No pude continuar, porque él me calló con el tan esperado y delicioso beso que tanto quería.