Ya había pasado unos días después de que Andrew me dio la organización de la gira del poemario. En algunas ocasiones le pedí ayuda y consejos a mi amiga, para poder guiarme de mejor manera. Tuve algunas reuniones con Luka, solo él y yo, pueden imaginar cómo me sentía, la mayoría de las veces muy tensa y las otras, muy nerviosa. Era frustrante saber que a pesar del tiempo todavía era capaz de crear esas emociones en mí, de poder sentir su presencia a tras vez de mi nerviosismo. Así que en eso consistió mi semana, en reuniones y planeamiento.
Era la noche antes del viaje, ya me había encargado de hacer mis maletas y dejar todo listo para el día de mañana. Como ven, me encontraba divagando en mi mente sobre todo lo ocurrido, era imposible no pensar en cada cosa, pues el cometer un error no era una opción para mi persona. Así que repasaba por mi mente cada cosa que teníamos que hacer.
En mi mesita de noche se encontraba mi celular, el cual en cuestión de tiempo timbro en señal de una llamada éntrate.
–¿Hola?
–¿Alice? – de inmediato reconocí la voz de Luka
–Hola, ¿Pasa algo?
–No nada grave en realidad, solo no puedo dormir y decidí llamarte – hubo un lapso para sus palabras – ¿Ya te encontrabas durmiendo?
–No, la verdad tampoco lograba dormir – por un momento pensé en mis siguientes palabras – ¿Te encuentras nervioso? Porque si te soy sincera yo si lo estoy un poquito – escuche una ligera risa que logro calmar un poco de mis nervios.
–La verdad no, mis nervios tienen otro nombre.
–¿Así? ¿Cuál?
–Alice Foster – sentí como el calor de mi cuerpo se intensifico, para ser acompañado por mi silencio – Esa es la razón de mi desvelo.
–Nunca pensé que yo sería la causa de tu insomnio
–Eres la causa de muchas cosas, de mis tormentos y mis demonios, pero también la causante de mi felicidad, así que eso compensa todo lo anterior.
Ya no tenia idea que decir, así que me quede ahí, tranquila escuchando el vaivén de su respiración a través del celular. Pensando lo que en realidad podría pasar en los próximos días, si de verdad su presencia se ha vuelto una amenaza para mi salud emocional, lo dispuesta que estaba para poder seguir con esta nueva etapa de mi vida.
–Sera mejor que tratemos de dormir, mañana será un día muy largo.
–Concuerdo contigo cariño, así que ve a dormir y trata de no pensar mucho en mí.
–Engreído
–¿Perdón como has dicho?
–¡Que peligro!, puede ser peligroso para la salud el no dormir las horas necesarias.
–Ya, si tu lo dices – sé que no se ha creído ni una de la que he dicho, la verdad no es como que mintiera bien.
Después de eso termino nuestra conversación. Enseguida quise conciliar el sueño, pero me era imposible. Tras hablar con Luka me quedo claro que en realidad no tengo miedo del viaje o de alguna interrupción, mi miedo radica en que sé que soy muy susceptible a su persona, sé las emociones y sentimientos que estando su persona conmigo puede generar.
En algún momento de la noche logre dormirme. Así que era muy temprano, con una alarma algo fastidiosa y ruidosa, y muy seguramente con solo tres o cuatro horas de sueño. Me levante de mi cama perezosamente con la intención de darme una ducha, desayunar algo ligero y después disponerme a tomar un taxi para así llegar al aeropuerto.
Al llegar a la puerta de abordaje me encontré con Andrew y Luka los cuales se encontraban esperando por mí.
–Buenos días, ¿Andrew no dijiste que no nos acompañarías?
–Buenos días Lis, la verdad es que no, solo vine a despedirlos y a desearles suerte – instintivamente deje mi maleta a un lado y me abrace al cuerpo de Andrew.
–¡Muchas gracias! Y sobre todo gracias por la oportunidad, prometo hacer mi mejor esfuerzo – poco a poco deshice el abrazo.
–De nada Lis, sé que eres la mejo en lo que haces, así que – dirigió su vista alternativamente entre Luka y yo – Traten de conseguir la mejor cantidad de lectores en las conferencias con los fan y seguidores, de ellos dependemos para que el trabajo será un éxito.
–Claro, haremos nuestro mejor trabajo – hablo esta vez Luka – ¿Verdad Alice?
–¡Así es!
¡Vuelo con destino a España, por favor abordar!
–Vamos Alice.
Sin esperar mucho Luka tomo mi mano para que caminara tras él. Con apenas tiempo tome mi maleta y dirigí mi vista a Andrew que me miraba sonriente y con una mano despidiéndose, me hubiera gustado despedirme de la misma manera, pero el hombre que me llevaba sujeta no me lo permitía. Así que solo me limite a asentir en su dirección.
Nunca pensé que lo que seria para mi trabajo, se podría convertir en toda una aventura de colores, lugares, sabores y sobre todo muchas emociones.
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