Vida Nueva, Lena Nueva

Lena. 

¿Saben lo horrible que se siente cuando tu mejor amigo/a no va a la escuela y eres tan antisocial que solo hablas con esa persona y te sientes sola? . Pues eso es lo que siento la única diferencia es que mi mejor amigo es un cabron que si vino a la escuela. Lo he evitado todo el día hasta falte a una clase con tal de no verlo, pero llego el momento de enfrentarlo.

Me encuentro la puerta de el salón de clases, soy la última en salir por lo tanto el salón está vacío. Me estoy preparando psicologicamente para verlo en la cafeteria.

Suspiro, cierro los ojos y salgo. Pero algo o alguien se impacta contra mí.

—Oye, Amigo estoy comenzando a creer que tienes un problema conmigo—Miro a creo que se llama Josh.

—Oh, no, no lo siento muchísimo. Es que la pizza se acaba rápido en la cafetería—una idea llega a mi mente.

—Oye, joshi ¿te puedo decir joshi verdad?—Asiente con una sonrisa—¿Puedo sentarme contigo?.

—¿P-pero tu no te sientas en la mesa enorme de los populares y así?—me mira nervioso.

—¿Si, pero creo que me debes un favor, ya van dos veces que te chocas contra mi—su rostro se pone rojo de la vergüenza.

—Bueno si eso quieres, puedes sentarte en mi mesa, pero ahí somos raros.

—Yo soy rara—el engancha su brazo con el mio y caminamos ala cafetería.

—Que quede claro, eres muy linda, pero si no alcanzo la pizza tendremos problemas—me mira con los ojos achinados y yo asiento.

Al entrar ala cafetería siento una horrible sensación en mi garganta, pero ya no me voy a doblegar ante nadie. Levanto la cara y paso a un lado de la mesa de Nathan.

—Lena—ignoro la terrible sensación y le paso por un lado.

—Oh, oye creo que te hablan.....—me señala hacia atrás disimuladamente pero lo ignoro—Ohhh, por tu cara de perra enpoderada supongo que si lo escuchamos pero lo ignoraremos, me encanta acabo de ignorar a Nathan Graham—intento no soltar una carcajada ante su entusiasmo.

—¿Dónde comeremos?—el señala una mesa donde se encuentra un chico con gafas y un suéter azul y de cabello rojo, una chica vestida absolutamente toda de arcoiris, cabello rosa y otra vestida de negro al igual que su cabello. Nos acercamos y Josh llama su atención.

—Queridos amigos, ella es Lena, Apartir de hoy comerá con nosotros.

—Oye tu no eres de la mesa de niños ricos y prepotentes de allá—señala hacia atrás.

—Mara, no seas grosera—la chica arcoiris la regaña—Disculpala es rara, yo soy Amelia y el callado de ahí es Nicolas pero todos le decimos Nick—me da su mejor sonrisa.

—Mucho gusto de conocerlos, espero no causarles molestias.

—Yo también espero que no las causes—la tal mara me mira mal antes de ignorarme y seguí comiendo.

—Bueno, len voy a traer mi deliciosa pizza—Intenta levantarse pero lo agarro del brazo.

Ni loca me quedo aquí sola.

—Yo te acompaño.

[...] 
 

Al terminar las clases siento que mis ojos no soportan más necesito dormir no he dormido bien. Salgo del salón de clases y al salir me jalan del brazo. 
 

—Josh te juro que si otra vez.....—no termino mi frase pues me encuentro con los hermosos ojos verdes de mi ex mejor amigo. 
 

—Lamento decepciónarte, no soy tu noviesito—me deshago de su agarre como si su toque fuera una infección, el me mira extrañado. 
 

—No me toques.
 

—Len, por favor necesito que me escuches—me mira a los ojos pero aparto la mirada. Se que si lo miro o escucho lo perdonaré, tiene más control en mi de lo que él cree y odio eso. 
 

—Estoy ocupada—intenta hablar pero no lo dejo seguir—quiero que te elejes de mi, así como yo lo haré de ti. 
 

[...] 
 

—Cariño, ¿estas segura que te sientes bien?—mi tía me quita el cuchillo de la mano—deja esas pobres papas ya estan parece que haremos puré de papa. 
 

—Lo siento estaba un poco distraida—asiente y acaricia mi cabeza—¿Puedo subir a mi habitación tengo sueño?. 
 

—Claro, seguro cárter no llegará aún, dijo que iría a hacer un trabajo. 
 

—Creí que todos sabemos que clase de trabajo es ese—las dos reímos. 
 

—Pues mientras no salga con que seré abuela por mi—se encoje de hombros, yo me río. 
 

—Bueno tía, iré a dormir. 
 

Subo a mi habitación y al acostarme en mi cama lo primero que veo son eso hermosos malditos ojos verdes. 
 

—Tengo que olvidarlo, no te hace bien lena es un cabron que te va a lastimar. Y no necesitas que te lastimen más. Apartir de hoy vida nueva, lena nueva—me digo a mi misma y después me obligó a dormir